La semana pasada, la Comisión Investigadora que, en Diputados, indaga las presuntas irregularidades en la construcción de la planta regasificadora culminó su trabajo. En líneas generales, la oposición coincidió en que existieron irregularidades e ilicitudes que merecen ser estudiadas por la Justicia.

La lista mencionada es bastante larga y , eventualmente, podría convertirse en otro impacto negativo sobre la gestión de gobierno de José Mujica, con posibles conexiones a su vez a nivel internacional, según dijo el diputado nacionalista Pablo Abdala en la Zona Central de Rompkbzas.

"Hubo una manipulación importante en las ofertas" que desembocaron en la adjudicación de las obras a GNLS y a OAS, relató.

Entre las irregularidades, mencionó además la arbitrariedad con la que el gobierno Mujica actuó por sobre las potestades de otros organismos que deberían haber definido el tema, como la Administración Nacional de Puertos o la Armada Nacional.

Todo esto, además, a pocas horas que expire el acuerdo suscrito entre el gobierno la multinacional Shell para un nuevo proyecto de la planta regasificadora.

"A esta altura, lo mejor es que no hagan nada", afirmó.