La policía de ese país detuvo ayer a Eduardo Zaplana , ex ministro del gobierno del Partido Popular y ex presidente de la comunidad de Valencia. El ex gobernante  montó un imperio económico basado en comisiones y sobornos que, según la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil, alcanzó los 10,5 millones de euros. Una estructura en la que fueron fundamentales un matrimonio de amigos de Zaplana desde la infancia y el abogado uruguayo Fernando Belhot vinculado a los papeles de Panamá y a varias causas de lavado.

De acuerdo a información difundida por el diario El Confidencial, "la estructura tenía ramificaciones en Uruguay, Panamá, Reino Unido, Luxemburgo y Andorra. Y en su creación fue fundamental el abogado uruguayo Fernando Belhot, responsable del bufete South Capital Partners, con sede en Montevideo y especialista en crear entramados en paraísos fiscales".

El abogado ya fue mencionado como parte del denominado "caso Lezo", una maniobra realizada por Belhot para blanquear capitales sucios en España mediante una empresa que adquirió en Alemania para prestar servicios a la principal empresa de aguas de Madrid.

En abril del 2017, el sitio web uruguayo Sudestada definía a Belhot como "el testaferro de la corrupción española".  Y agregaba que "a través de South Capital Partners, aparece como nexo de una sospechosa inversión de la empresa Canal de Isabel II. También figura en el caso Lava Jato junto a Marcelo Chakiyian".

South Capital Partners  (SCP) se define en su página web como "una firma de profesionales Boutique en las áreas de alianzas estratégicas, finanzas corporativas, internacionalización de empresas, proyectos de inversión y licitaciones internacionales. En su diversificada cartera de clientes  el bufete menciona diferentes sectores de la economía como, Bancos, fondos de inversión, grandes empresas y compañías gubernamentales"

Además promueve inversiones en forestación y energía eólica.

En el siguiente informe explicamos otros negocios en Uruguay que surgen de  la investigación española y que involucran a Florentino Pérez, presidente del Real Madrid y uno de los hombres más ricos de España.