Corrupción a la uruguaya
Ricardo Gil Iribarne, presidente de la JUTEP, ha señalado en varias oportunidades y hoy también que si bien Uruguay no tiene todavía los problemas de corrupción de los países vecinos "si tiene corrupción y hay que enfrentarla".
Nuestro estado creció gracias a las tarjetitas repartidas por políticos; a los acomodos de familiares, amigos y correligionarios, gracias al reparto de bornes telefónicos, a las jubilaciones tardías gestionadas por diputados y afines.
Enfrentar eso no es sencillo y si bien hay cosas que han cambiado, hay otras que permanecen en el tiempo.
Nosotros no hemos tenido bolsos repletos de dólares revoleados por arriba del muro de un convento; ni tampoco "doleiros" que lavaran las coimas. Pero tenemos una enfermedad menos visible, más silenciosa. Y ella es la complicidad de los acomodados; los estudios jurídicos que se prestan a constituir empresas que saben son para lavar dinero; y sobre todo la ausencia de una política de estado que minimice los riesgos de la corrupción.