Puestos que son un "colador" y controles a requerimiento. Esta parece ser la situación de los pasos fronterizos de casi todo el país, luego de la repercusión local que tuvo la "causa de los cuadernos" en la Argentina.

Luego que se revelara que gran parte del accionar de las presuntas coimas del otro lado del río tuvo pasó, se sospecha, por estas costas, surgieron múltiples denuncias sobre la falta de recursos humanos y materiales para un control efectivo de los ingresos a Uruguay.

En las últimas horas fueron los Funcionarios de la Dirección Nacional de Migraciones, que aseguraron que "no hay garantías de un control eficiente y seguro".

A través de un comunicado, dejaron en claro que los trabajadores vienen denunciando la situación de falta de personal desde hace tiempo: reiteran "los reclamos que esta Asociación viene realizando desde el año 2011 ante la Dirección Nacional de Migración y el Ministerio del Interior en cuanto a la falta de recursos humanos para atender su operativa normal".

El comunicado agrega que "la Dirección Nacional de Migración tiene la suma de 31 puestos de control establecidos (puertos, aeropuertos, puentes, controles terrestres). A su vez, 10 puestos deportivos (yates, veleros, lanchas deportivas) sin control migratorio, siendo el pasajero quien por su iniciativa debe concurrir a un punto habilitado para registrar sus movimientos, lo que normalmente el interesado no hace, entrando y saliendo del país sin ningún tipo de control".

Los funcionarios detallan que de los 31 pasos habilitados 11 son "a requerimiento" lo que "no da las garantías de un control eficiente y seguro".

En la entrevista de Rompkbzas, una delegación del sindicato aseguró que se cuenta con muy pocos trabajadores para controlar en forma efectiva todo el territorio nacional.

Otro de los problemas es la utilización de un sistema informático instalado en 2003, que crea demoras y que ocasiona que el funcionario no puede atender rápidamente. En la sección Estadísticas, aseguraron, se sigue utilizando un sistema DOS.

Con más del 90% de la plantilla en atención al público, es evidente la necesidad de más recursos humanos en los pasos de mayor movimiento.

Según afirmaron, la apuesta del Ministerio del Interior es apelar a zafrales en las épocas de alta temporada, que llegan con un curso muy básico y que, más que ayudar, "es uno que está al lado preguntando".

En cuanto a la situación de Puerto Camacho, aclararon que es obligación de la persona que llega al país pedir el ingreso, por lo que se lo atiende a requerimiento. Los funcionarios no pueden hacer nada ante esa situación.

Según explicaron, son diez puntos similares a ese en todo el país, en los cuales la fluctuación de ingresos es mínima, por lo que no cuentan con personal en forma permanente.

Según el sindicato, la Dirección Nacional de Migraciones cuenta con menos de 500 funcionarios para cubrir todo el país. Sus cálculos indica que, por lo menos, se necesitarían otras 350 personas.