Cambalache
En los últimos días Argentina nos ha demostrado que es posible terminar con la impunidad. El padre y el hermano del presidente Mauricio Macri son investigados por actos de corrupción. Dos ex altos jerarcas de Ford fueron condenados a prisión por secuestro y torturas contra empleados de la planta ubicada en General Pacheco. Y ayer un importante grupo de conocidas actrices apoyaron a una par que denunció haber sido violada a los 16 años por un conocido actor.
En cambio en nuestro país los pocos torturadores condenados son enviados a reclusión domiciliaria. Igual que algún estafador y lavador. Un Tribunal de Apelaciones establece que "resulta acredito en principio y sin perjuicio de ulterioridades, que (Raúl Sendic) se apropió de dinero que estaba en posesión por razón de su cargo, perteneciente al Estado, en beneficio personal". Pero el Frente Amplio todavía discute qué hacer con él.
Los partidos políticos, que tienen todos varios "muertos" en sus placares, actúan de acuerdo a sus conveniencias políticas, pero no aciertan a dar una respuesta conjunta que termine con la impunidad.
Entonces, en este cambalache están dadas todas las condiciones para que oportunistas de toda laya intenten hacerse del gobierno.