Estimado Cotelo:

Hoy escuché en forma parcial (yendo y viniendo por la casa), la tertulia con los 3 politólogos. Lo que recogí fue una actitud un poco cínica y descreída hacia la clase política. En ningún momento apareció ninguna preocupación genuina de parte de los distintos nombres que manejaron. Siempre era estrategia, manejo, defensa de los votos, etc., lo que movía las acciones y posiciones adoptadas. Voy a poner un ejemplo porque fue el que escuché en forma más completa. Hablaba alguno de los tres de Mujica. Decía que lo que hacía era defender sus votos obtenidos de la gente de campo, amén, claro
de mantener los originarios que eran de Montevideo.

Yo no voté a Mujica, es más, mi posición personal  era  que ningún tupamaro ni ningún colaborador de la dictadura, podrían haber integrado listas a cargos de gobierno. Para ser clara: ni Mujica, ni Juan Carlos Blanco, ni Fernández Huidobro ni Millor.

Volviendo a "el Pepe", continúo: a  pesar de no haberlo votado, siempre consideré genuina su preocupación por solucionar los problemas de endeudamiento de los productores rurales. No por simpatía ni por justicia social. Sino por lo que él repitió muchas veces: porque la gente de campo  no se improvisa; hay que tratar de que los que están allí permanezcan y hagan lo que saben hacer. El país necesita de la producción agropecuaria para poder vivir, por ahora no se ha logrado otro rubro que lo sustituya como fuente de riqueza. Ni el turismo, ni la pesca,  ni los servicios, ni "na de na", se le acercan.

Por otro lado, éstos expertos dan a la población una imagen de descreimiento sobre la clase política que me parece peligrosa más que nada para los jóvenes. Ellos hablan como técnicos en la materia, lo que les da más autoridad que a un medio de prensa o a alguien que esté en la línea de Bordaberri, por ej.-  

Cordialmente. 
Eva Uría