Pedro Bordaberry habló de la renovación en el Partido Colorado, el papel de Batlle y Sanguinetti y el relacionamiento con el gobierno.

La renovación se gana "en la cancha"

"Pongamos las cosas en su real dimensión, ayudemos (al gobierno) en lo que hay que ayudar", enfatizó el ex ministro colorado, Pedro Bordaberry. Ahora es tiempo de apoyar en lo que se está de acuerdo, luego vendrá el de pedir cuentas, dijo. Sobre la renovación, opinó que Batlle y Sanguinetti deben ocupar el lugar de estadistas y no estar en el debate cotidiano. "La diaria es para los que se están haciendo", dijo.

(Emitido a las 9.05)

EMILIANO COTELO:
Pedro Bordaberry tuvo un gran protagonismo como ministro de Turismo e Industria durante el gobierno de Jorge Batlle. Después, en mayo de este año, como candidato único a la Intendencia Municipal de Montevideo, fue el artífice de la recuperación que el Partido Colorado tuvo en la capital, después de la catástrofe de octubre de 2004.

Desde entonces se especula mucho con su futuro como una de las figuras para la renovación de la 15 y del partido en general. Pero mientras tanto, Pedro Bordaberry se mantuvo bastante alejado de la escena política.

Ahora, casi a fin de año, volvió al ruedo con declaraciones que llamaron la atención, ya que postuló que su partido no debe criticar todo lo que hace el gobierno de Tabaré Vázquez y propuso ayudarlo en aquellos temas en que los colorados tengan experiencia.

La semana pasada, cuando reseñamos sus dichos, dejamos planteada una serie de preguntas. ¿Por qué Bordaberry sale con este discurso en este momento? ¿Está, ahora sí, comenzando a construir su propio perfil? ¿De qué manera va a trabajar políticamente?

Vamos a tratar de encontrar respuestas a esos y otros interrogantes, entrevistando al propio Pedro Bordaberry.

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Doctor Bodaberry, ¿qué ha estado haciendo desde las elecciones municipales de mayo?

PEDRO BORDABERRY:
Reinsertándome en el sector privado en el trabajo. Volví a dar clases en Facultad -estuve de Licencia por cinco años- y volví al trabajo. Yo soy abogado, así que volví a eso.

EC – Le preguntaba sobre todo por la actividad política porque actualmente no ocupa ningún cargo en el Parlamento y tampoco en el Comité Ejecutivo del Partido Colorado.

PB –El único cargo que tengo es que soy convencional nacional, soy convencional departamental por Montevideo y por Salto. Lo soy también por Canelones, así que soy convencional. También he estado en los últimos meses respondiendo invitaciones que me hizo mucha gente en el interior, fundamentalmente, para que vaya a charlar, para que me reúna, para ver de organizar de nuevo un ámbito de trabajo dentro del partido y dentro de la Lista 15.

EC – Así que ha estado en varios departamentos del interior

PB - Sí, estuve en Salto, obviamente, dos veces. Estuve en Artigas, en Paysandú, en Treinta y Tres, en Rocha, en Florida, en Canelones, en Las Piedras, en muchos lugares del país, en Tacuarembó y obviamente que en Montevideo.

EC – ¿Y participa de las reuniones semanales de la Dirección de la Lista 15?

PB – A veces asisto, no periódicamente. Hay una reunión todos los lunes pero ahora desde hace tiempo que no voy.

EC – ¿Por qué no va?

PB – Bueno, en realidad la Lista 15 es una especie de organización poco organizada. Hay quienes les gusta decir que es un movimiento más que una cosa estructurada. Es un poco así. He ido pero últimamente no. Sí me reúno periódicamente con gente como yo, que asiste esporádicamente a las reuniones.

EC – Se ha publicado en la prensa que hay una rutina de almuerzos semanales de un grupo de dirigentes de la 15.

PB – Sí, hoy justo con Carlos Ramela, con José Amorín, con Martín Aguirrezabala, con José Villar, con Gabriel Páez, -me voy a olvidar de alguno-, con Pedro Pérez, con "Lito" (Isaac) Alfie... Sí, intercambiamos opiniones.

EC – ¿Cúal es el común denominador de ese grupo de gente? ¿Obviamente en ese almuerzo no están todos los dirigentes?

PB – No, pero hay algunos que van, otros que no. Yo creo que el común denominador es que es gente que trabajaba en el sector privado, que fue llamada a trabajar en el gobierno y que ahora rápidamente se ha reinsertado en el sector privado. Es decir, no es esa suerte de político de carrera que un día es ministro, otro día es presidente de un ente, pasado es embajador... Es gente que ve que hay que abrir la política a todo el sector de la sociedad y que además puede integrarse y jugar en los dos lados. Creo que aparte es sano que alguien pueda trabajar para el Estado y después no seguir viviendo del Estado.

EC – De todos modos hay excepciones en ese perfil. Pienso en el caso de Alfie, pienso en el caso de Amorín Batlle, los dos legisladores.

PB –Y el propio Martín Aguirrezabala que está entrando mucho en el Parlamento. Pero está bien, eso no nos cambia. Es bueno que haya legisladores y es muy interesante porque cada uno sigue, hasta por vocación, la realidad de lo que está pasando.

Entonces, obviamente que con todas estas cosas de los Derechos Humanos Carlos Ramela nos enriquece a todos, o con la parte agropecuaria Martín (Aguirrezabala), con la parte económica presupuestal cuando va "Lito" Alfie, o la parte de Industria y de relaciones con Argentina con el propio Villar.

EC – Pero, entonces, ¿por qué está funcionando de esta manera la 15? Por un lado está la Dirección de la Lista 15, que se reúne semanalmente y a la que usted decía "a veces voy, a veces no" -más bien no ha ido últimamente- y, por otro lado, sí tiene la rutina semanal de este encuentro con este grupo de gente. ¿Qué pasa? ¿Se está abriendo un canal aparte, esta es la renovación de la Lista 15?

PB – No, no, no, no. Yo creo que no, porque la Lista 15 sobre todo es eso. Yo creo que es una cosa que no puede analizarse en la perspectiva de una cosa muy organicista u orgánica. Es un movimiento. Yo creo que, fundamentalmente, es un sector pero es un movimiento, entonces funciona un poco así y no es que haya algo paralelo. Muchos de los que nos juntamos después van a la reunión y otros no. Funciona directamente así.

EC – Claro pero a las reuniones de la Dirección de la Lista 15 va el ex presidente Jorge Batlle. ¿Cómo está su relación con el ex presidente Batlle?

PB – Bien, normal.

EC – Porque desde afuera da la sensación de que no tienen ahora un vínculo muy fluido, que la relación está un poco fría.

PB – No, no, yo tengo una muy buena relación, siempre la he tenido. Al ex presidente de la República, al doctor Batlle, siempre creo que hay que reconocerle sobre todo lo que hizo. A todo este grupo de gente que no estaba ni siquiera cerca de la política, salvo alguna excepción que usted mencionó, le abrió un ámbito para que se incorpore. Él también lo ha dicho públicamente en los últimos tiempos. Dice que él no va a ser candidato a nada. Tiene 78 años hoy, es bastante sensato pensar que lo diga y obviamente que abra espacios para que otros se incorporen a un proceso natural y ahí se dé naturalmente lo que todo el mundo llama "la renovación".

***

EC – Llegamos ahora a un punto que en el Partido Colorado es un asunto sensible y de primera línea en estos meses. Después de la votación históricamente baja que tuvo en octubre de 2004, 10% apenas, una catástrofe, se ha abierto un debate en torno a la necesidad imperiosa de encarar la renovación. En ese contexto hay algunos dirigentes, pienso por ejemplo en el doctor Ope Pasquet, que sostienen que Sanguinetti y Batlle deberían dar un paso al costado, deberían dejarle espacio a los dirigentes más jóvenes. Usted ha dicho que no está de acuerdo con ese procedimiento. A ver: ¿cuál es exactamente su visión sobre este asunto?

PB – Lo primero que le digo que sí me estoy dedicando a la actividad privada porque es mi sustento, pero me estoy dedicando también a esta actividad política. También estoy saliendo, estoy conversando con la gente.

EC – Claro, pero las ocho horas son en la actividad privada...

PB – Está bien...

EC – ...la actividad política viene después.

PB – Hay ocho horas más y los fines de semana y las reuniones son así... Es lógico, es la situación actual.

En segundo lugar, yo creo que cuando uno habla de renovación tiene que decir cuál es la legitimidad de la "renovación". A mí me parece que es equivocado decir: "bueno, ahora nosotros decimos que los que están se tienen que ir y nos vamos a sentar nosotros". Entonces yo pregunto: ¿quién sentó a los que están donde están? El voto de la gente. Entonces, si yo no tengo el voto de la gente, ¿cómo les digo a los que están: "váyanse que yo me quiero sentar en su lugar"? Es una cuestión de razonamiento democrático.

Además, ¿qué es lo que se dice? Se dice "yo quiero que los que fueron votados, por poca gente pero fueron votados, digan públicamente que ellos son los culpables de todo, salgan públicamente a decirlo y se vayan para la casa". Seamos sensatos, eso no va a pasar.

Las renovaciones se dan (si) creamos un ámbito, trabajamos en ese ámbito, nos presentamos en una elección, comparamos y la gente elige. La que sienta a los dirigentes en los sillones, es la gente. Ese es el camino democrático en el que creo y entonces no podemos pedirles "señores, ahora váyanse que nos vamos a sentar nosotros". Ellos lógicamente van a decir: "¿por qué te vas a sentar tú?" El que se quiera sentar, que la gente lo siente con el voto. Ese es el mecanismo que yo creo que es bueno. Yo se lo que me va a decir usted ahora: "¿y qué dice de adelantar las internas?"

EC – Era una pregunta posible.

PB – Se le veía en la cara.

EC – Iba para otro lado ahora pero hablemos de eso. ¿Hay que adelantar o no las elecciones internas del Partido Colorado?

(Risas)

PB – Está muy bien, pero de vuelta yo también creo que la democracia implica también elegir una persona por un determinado lapso de tiempo. Es decir, yo notoriamente no estoy alineado totalmente con lo que hace el gobierno del doctor Vázquez pero no estoy pidiendo que se haga una autocrítica de lo que hizo en estos nueve meses y, en dos años, que haga una elección nueva para ver si me puedo sentar... No, es elegido por cinco años, déjenlo trabajar y al final usted presente su propuesta, compare y ahí veremos. En el Partido Colorado creo que hay que hacer lo mismo porque si no, sentamos gente nueva a partir de las internas y enseguida los que perdieron dicen: "queremos otra interna pasado mañana". Me parece que hay que dar los plazos.

Lo que sí hay que reclamarle y creo que en eso sí tiene razón el doctor Pasquet, es en que hay que reclamar que abran espacios para que la gente se incorpore, pueda trabajar y les pueda competir. Eso sí. Y eso es quizás lo que no se está dando hoy.

EC – ¿Por qué no?

PB – Yo creo que no hay una suerte de funcionamiento donde realmente se pueda participar. Creo que no es adrede pero por el propio peso que tiene la figura de dos ex presidentes... Cuando habla el doctor Sanguinetti, cuando habla el doctor Batlle, lógicamente imponen un peso enorme porque son ex presidentes de la República y son gente muy capaz.

EC – A ver, indirectamente, ¿usted está diciendo que tanto Sanguinetti como Batlle deberían aparecer menos en los medios?

PB – Yo no soy quien para decirle al doctor Batlle ni al doctor Sanguinetti lo que tienen que hacer, ni lejos, sería una falta de respeto. Pero quizás a mí, con el respeto que les tengo, no me gusta verlos peleándose en la diaria, discutiendo con el ministro Gargano o discutiendo con el senador Rubio. No. Yo los veo a ellos como dos referentes que son, dos personas que fueron presidentes, que hablaron por el mundo, los veo más en esa posición estadista que en la diaria. La diaria es para los que se van haciendo, me parece a mí.

EC – Ese es un ejemplo de los espacios que usted entiende que los líderes que han encabezado el partido hasta ahora deberían dejarle a las nuevas generaciones: el debate cotidiano. Hay un ejemplo interesante en estas horas, yo ahora le voy a preguntar a propósito de las cosas que usted ha dicho, sobre cómo hay que manejar la relación con el gobierno actual. Ayer el doctor Jorge Batlle salió con un discurso bastante diferente, muy contundente en la crítica del gobierno de Vázquez.

PB – También yo creo que es lógico que uno no esté de acuerdo con todo lo que se hace, lo que no quiere decir que no esté de acuerdo con la parte general.

EC – Enseguida vamos a eso, pero a lo que me refería es a este choque de opiniones que de hecho ha venido a darse este fin de semana. Usted diciendo una cosa, dentro de la 15 o desde la 15, y nada menos que el ex presidente, líder histórico de la 15, diciendo algo frontalmente distinto.

PB – Sí pero es democrático y sano que dentro de un sector haya gente que no piense exactamente igual. ¿Qué es lo que pasa? Yo coincido muchas de las cosas que dice el doctor Batlle en cuanto a que no estoy de acuerdo con cómo se están haciendo algunas cosas pero creo que tenemos que poner el énfasis en este momento en las cosas en las que sí estamos de acuerdo. Hay muchas.

EC –Enseguida vamos a eso pero déjeme redondear este tema que estamos tratando. Si entiendo bien, con sus idas al interior del país, usted está como trabajando dos frentes al mismo tiempo. Por un lado hablando con la gente en busca de pistas que permitan mejorar el vínculo del Partido Colorado y la sociedad, pero al mismo tiempo construyendo su espacio político propio, para terminar después sí midiendo ese respaldo en las urnas en la primera instancia que se presente.

PB – Uno nunca sabe dónde van las cosas. Usted lógicamente que con el olfato periodístico quiere llegar al final de la historia... Yo creo que acá hay un grupo de gente que se incorporó a la política -y yo no soy el único- que está construyendo su propio futuro, su propio ámbito, su propia forma de trabajar.

Las idas al interior mías y las propias recorridas en los barrios de Montevideo lo que hacen es responder a algo que me pasó después de la campaña municipal y es que la gente empezó a llamar, a decir: "che, ¿cuándo venís? Queremos charlar, queremos organizar una reunión". En algunos lugares se juntan 50 personas, en otras se juntan 100, en Salto se juntaron 400... Yo dije: "¿Qué es esto? No entiendo nada". Pero creo que sobre todo es hacer algo que el Partido Colorado tiene que hacer: tener mucha humildad, salir a escuchar más a la gente, tener mucho oído, volver a sintonizar con la gente. Todos notamos que perdimos eso. Parece que uno anda en el interior y la gente está un poco cansada que le vengan a decir lo que tiene que hacer. Hay que escucharla más...

EC – Hace un rato usted dijo, los liderazgos o los nuevos liderazgos no se imponen, no se decretan, hay que ganarlos en las urnas con los votos de la gente. Por lo visto, usted está dispuesto a ir en busca de ese respaldo, a ir construyendo ese apoyo popular...

PB – Yo creo que hay un grupo de gente, que yo no soy el único le reitero, está José Amorín, Martín Aguirrezabala, "Lito" Alfie, Carlos Ramela, Daniel Bianchi, Germán Coutiño en Salto y mucha gente, que creemos en construir ese ámbito. De repente soy yo el día de mañana el que lleva la bandera, de repente es otro. Al que la va a llevar lo vamos a empujar todos.

EC – ¿Usted competirá por la candidatura presidencial por el Partido Colorado en las próximas elecciones?

PB – Uno nunca sabe dónde lo lleva la vida. Pero eso se va a saber dentro de tres, cuatro años, porque lo que hay que hacer es cambiar el ámbito de trabajo, ver cómo responde la gente.

EC – Usted podría decir: "no, no, no, a mí la candidatura presidencial no me interesa".

PB – Podré competir yo, podrá competir el Pepe Villar, podrá competir José Amorín, podrá competir el que sea. De todo este grupo alguno va a competir. Al que le toque porque es el que la gente más acepta o el que mejor lleva las ideas adelante, lo vamos a apoyar todos.

EC – ¿Pero usted está dispuesto...?

PB – Sí, todos están dispuestos. El que diga que no está dispuesto me parece que se está haciendo trampa.

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EC - Y en esa línea de trabajo, ¿cómo se inscriben estas declaraciones que ha venido formulando en los últimos días sobre cómo debería ser la relación Partido Colorado – gobierno? ¿Usted parece estar marcando un perfil muy propio?

PB – Yo creo que cuando las urnas hablaron en octubre y cuando las urnas hablaron en mayo, nos marcaron un camino. En octubre con ese perfil de que "todos los demás se equivocan y nosotros somos los dueños de la verdad y hay que hacer esto y punto", nos fue muy mal. Y en mayo cuando salimos a decir "vamos a hacer un programa con la gente, no de protesta, de propuestas", la gente lo entendió. Yo creo que esto de salir a decir que todo lo que está haciendo el gobierno está mal. No es cierto. Todo gobierno hace cosas más o menos, algunas cosas se pueden corregir y a veces el gobierno hace cosas muy bien. Entonces uno tiene que reconocerlo y más aún, en las cosas en que está de acuerdo, ayudar. Y en lo que no está de acuerdo marcarle "mire, no estoy de acuerdo con esto, para mí tendrían que hacerlo así" y ayudar. Me parece que es el momento...

EC – De esta manera se está diferenciando de la actitud que se ve por ejemplo en el Foro Batllista y de la actitud también que se ve en voceros importantes de la propia Lista 15.

PB – Y bueno, ¿qué quiere que haga? ¿Que no haga en lo que pienso? Creo que es como hay que hacerlo. Es claro, yo cuando el gobierno sale a jugársela con el Tratado de Protección Recíproca de Inversiones con Estados Unidos, yo creo que tenemos que decirle: "¡muy bien, me parece que está muy bien lo que estás haciendo! Si querés, te damos damos una mano porque conocemos el sistema, sabemos cómo funciona Estados Unidos..".

Yo le digo un poco... El senador Alfie, ¿sabe lo que ayuda al haber sido ministro de Economía cuando llegan las leyes presupuestales al Parlamento? ¿Sabe lo importante que es tenerlo a él ahí con la experiencia que tiene? Ahora si él dijera "todo lo que traen está mal..." Pero él, ¿qué dice? "No, miren, corrijan esto, hagan esto, agarren por este lado, con esto no estoy de acuerdo, es una cuestión de principios". Me parece que esta debe ser nuestra actitud.

EC - Está bien, pero en un asunto como este, donde el Frente Amplio al ser gobierno está modificando lo que fue su postura cuando era oposición hay una tendencia fuerte, no sólo de colorados, también de blancos, y tal vez una tendencia legítima, a cobrar la cuenta. Destacar: "oiga, está bien, me gusta lo que están haciendo, pero ojo que no era lo que proclamaban en la campaña electoral". Como diciendo "attenti que ustedes consiguieron los votos y llegaron al gobierno con un discurso distinto, nos sacaron a nosotros empleando otro discurso".

PB – Dos razonamientos. Uno, ese es un problema del gobierno con sus votantes, no es un problema nuestro. Dos, este es el tiempo del país. Si yo estoy convencido no ya de que haya un tratado de cooperación recíproca con Estados Unidos sino un tratado de libre comercio con Estados Unidos, es lo mejor para el Uruguay porque en realidad se está formando el ALCA y estamos quedando afuera y nos estamos perdiendo el tren de vuelta para tratar de pasar un camión de arroz en la frontera con Brasil o vender bicicletas a Argentina, nos estamos perdiendo el tren del mundo que nos está pasando adelante, ¿qué tengo que hacer? ¿Decirle: "sí, pero vos no tenés que hacer esto porque le dijiste a tus votantes que no"? Es asunto de ellos con sus votantes. Yo tengo que decirle "che, ¡vamos arriba! Arreglemos esto para el país, que quede arreglado". Olvidémonos de esas cosas, el día de mañana cuando llegue el momento eleccionario se pararán arriba de la tribuna y dirán, "ellos habían dicho esto e hicieron esto otro". Pero no ahora. Ahora si están haciendo lo que yo estoy de acuerdo que estén haciendo, ¡por favor, apoyémoslos!

EC – Usted acaba de decir: "podemos dar una mano en la negociación de un tratado de libre comercio con Estados Unidos" pero ese no es un asunto que figure como prioritario en la agenda de este gobierno. Se ha mencionado sí como una posibilidad. El propio Vázquez dijo que sí, que podría ser el paso siguiente. Mi pregunta es: entonces, ¿usted no está ofreciendo colaboración en algo que en definitiva no va a estar en la agenda?

PB – Pero es algo en lo que yo estoy de acuerdo... O cuando salen a defender como salen a defender las plantas de celulosa hay que apoyarlos también, hay que decirles: "¡Muy bien, bien trancado el gobierno argentino! ¡Bien llamado al embajador! ¡Bien en no tolerar lo que hace el embajador Patiño acá en Montevideo! ¡No señor, señor nosotros somos independientes, Sarratea no tiene una calle en Montevideo, el que tiene una calle es Rondeau y Rondeau trabajaba con Artigas...!" Veámoslo. Recuperemos eso, en eso han estado muy bien y digámoslo. ¿Por qué? Porque después cuando yo digo que no estoy de acuerdo con lo que están haciendo con el dólar, la gente dice que quien reconoce que algunas cosas están bien, prende una señal amarilla con el tema del dólar o el  tema de la ley sindical. Entonces creo que ganamos todos en análisis, no para criticar al gobierno sino para ver si podemos ayudarlo a que corrija el rumbo.

EC – ¿Qué reacciones ha tenido después de haber hecho estas declaraciones? Salieron el jueves en Búsqueda pero ya en realidad estaban circulando estas ideas suyas. Por ejemplo las habíamos visto en el diario Cambio de Salto. Usted ha hablado de esto en esas recorridas por el interior.  ¿Ha tenido ya algún tipo de respuesta, del gobierno por un lado o desde su partido y su sector por otro?

PB – No, no, no. Del gobierno, no. Y yo creo que del gobierno no la tengo que tener yo porque no estoy diciendo que hablen con Pedro Bordaberry que les está proponiendo esto. Yo estoy hablando lo que debemos hacer nosotros como partido. Es decir, el Partido Colorado siempre puso por delante al país, entonces, me parece que eso tendría que hablarse con el partido, del cual yo soy convencional y punto.

EC – Esa es una precisión importante. Supongamos que a usted lo llaman del gobierno para participar en un equipo negociador con el gobierno de Estados Unidos para un acuerdo de libre comercio, ¿usted va o primero resuelve el partido?

PB – No, obviamente yo soy integrante del Partido Colorado... Es de orden.

EC – Está el antecedente delicado de que no hubo acuerdo entre el gobierno y la oposición para la conformación de los entes autónomos. Entonces, el Partido Colorado en principio está afuera.

PB – Ojo, el Partido Colorado se quedó afuera de entrada y eso creo que habló bien del Partido Colorado. Dijo: "bueno, miren, nosotros no queremos cargos". Me parece que es hasta sano y es bueno para el partido que es el que tiene que ocuparse de estas cosas.

EC – ¿Cuál es la diferencia entre los cargos y esto que usted está manejando ahora?

PB – Que no queremos nada. Yo puse el ejemplo el otro día del doctor Sergio Abreu. Cuando yo entré al Ministro de Industria a los diez días me tuve que ir a México a negociar el tramo final del tratado de libre comercio con ese país. Uruguay y México llevaban dos años y medio negociando y por esos avatares de la vida política se va el ministro que estaba al frente (Abreu) con el doctor Opertti, que en ese momento no estaba en México, y llega un ministro nuevo que tiene que defender los intereses del país. Obviamente que me puse a estudiar... Pero lo llamé a Abreu y le dije lo que me pasaba. "Los mexicanos me va a golear..." Entre que me pongo al día, me golean. "¿Me das una mano?", le pedí. Y Sergio me dijo que sí. Sin cargo, sin nada...

EC – Pese a que el Partido Nacional se había ido de la coalición de gobierno...

PB – Sí, y fuimos juntos. ¿Sabe lo que era el Uruguay en aquel momento frente a quien hoy es canciller mexicano, Luis Ernesto Derbez? Nos sentamos el ex ministro y el nuevo ministro negociando juntos. Dijeron: "Pah, este es un país en serio". Y el tratado se terminó y negociamos hasta el cupo de los quesos, de la leche, el arancel de la carne, los textiles... todo a muerte para poder entrar mejor. Entonces, yo creo que eso está muy bien. Podemos internamente discutir y decir que no estoy de acuerdo con Marina Arismendi, o con Bonomi y su ley sindical, pero para afuera trabajemos juntos porque nos estamos perdiendo el tren. ¿Cuál es la lógica de esto? "Yo estoy arriba, los que están abajo no quieren que me vaya bien porque así vienen ellos a hacer las cosas que yo creo que hay que hacer. Entonces, yo que estoy abajo trato de que a ellos no les vaya bien..." Y así seguimos y nunca hacemos las cosas. Pongamos las cosas en su real dimensión, ayudemos en lo que hay que ayudar.

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Transcripción: Mariana Cencio
Edición: Mauricio Erramuspe