Abogado de Dancotex reclama "madurez"
Si bien se mostró dispuesto a "negociar lo posible", el abogado de Dancotex Ernesto Rodríguez Altez dijo que "para salvar la empresa tendría que haber madurez de ambas partes para permitir llevar en forma armónica las máquinas y la materia prima a Colonia". El profesional recordó que una comisión ya laudó que la decisión de la empresa de trasladarse al interior "era imprescindible".
(Emitido a las 8.47)
EMILIANO COTELO:
Ya lleva tres meses y medio el conflicto en Dancotex, y ayer tuvo un giro más. No sé si un giro del todo sorpresivo, porque Juan José Ramos, dirigente del PIT-CNT, había adelantado este cambio en la estrategia jurídica ayer, cuando participó en un debate temprano aquí En Perspectiva.
¿Qué fue lo que sucedió ayer? Los obreros de la textil expresaron ante la jueza en lo laboral de tercer turno, Elisa Lizaso, su voluntad de desistir de la medida cautelar que habían presentado y por lo tanto su voluntad de levantar el embargo que sostenían sobre las máquinas ubicadas en la planta de Montevideo. Teóricamente entonces estas máquinas quedan liberadas, pero todo indica que el propietario de la firma, Daniel Soloducho, no podrá sacarlas, porque, al mismo tiempo, ayer los trabajadores de Dancotex resolvieron pasar, ahora sí, directamente, a la ocupación de la planta.
Hasta ahora ellos sostenían que la medida que llevaban adelante era una guardia gremial, pero desde ayer ellos mismos, no otros sindicalistas de otros gremios, están controlando el establecimiento.
¿Qué puede pasar en esta nueva vuelta de tuerca?
El diálogo es con el doctor Ernesto Rodríguez Altez, abogado de la firma Dancotex SA.
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ERNESTO RODRÍGUEZ ALTEZ:
Hoy más que nunca en perspectiva, por lo que veo.
EC - ¿Por qué?
ERA - Por lo que me está diciendo.
EC - ¿Cómo observan esta novedad?
ERA - Me está quitando la sorpresa, el desconcierto total. Si parto de la base de lo que aconteció en la audiencia del miércoles en laboral tercero, las cosas no fueron así.
EC - ¿A ver?
ERA - En primer lugar el ingreso del señor Ramos, que no es parte del expediente lo autorizamos porque ingresó como público, el hecho de que viniera un avezado sindicalista, a quien todos reconocemos una gran labor en AEBU, incluso en todo el tema del Banco Comercial debemos respetarlo por su experiencia y su inteligencia, que nadie puede negar, significó en primer término un cambio en la actitud, aquello de no sacar un tornillo pasó a ser vamos a cumplir el mandato de la Justicia.
EC - Usted está relatando lo que ocurrió anteayer en la audiencia de conciliación que finalmente se frustró.
ERA - No se frustró tanto, hubo distintos pareceres, distintas opiniones. Soloducho explicó de forma terminante que era imprescindible, para poder seguir dialogando, que las máquinas, la materia prima que ya lleva mucho tiempo en el depósito de Veracierto, corriendo riesgos de todo tipo, de deterioro, de roedores, etcétera, y que son muchos miles de dólares, el muestrario que está terminado desde marzo que había que entregar a los compradores y algunas computadoras de las 60 que existen en el establecimiento en Colonia hay cinco, esas cosas imprescindibles, como toda la Justicia ha entendido, tenían que ser llevadas primero a Colonia.
Hay 150 máquinas en Veracierto para seguir dialogando, hay 31 telares de los cuales sería importante llevar algunos a Colonia, pero como la hilandería era uno de los centros de reclamo de los trabajadores se podían dejar, el Ministerio de Trabajo (MTSS) lo pidió, y dentro de todo ese contexto se culminó con una decisión de la señora jueza que decía algo así como "autos para proveer, mañana a las 15 horas damos la sentencia".
EC - O sea, ayer a las 15 horas.
ERA - Por la prensa nos enteramos, antes de llegar al juzgado a las 15 horas, de que se había presentado un desistimiento. Me llama un poco la atención que no sólo haya sido la prensa es la labor de ustedes, respeto eso, no sé cómo hacen para llegar antes que nosotros a los escritos, pero llegan, sino que además hubo un comunicado de la Suprema Corte de Justicia (SCJ), que tiene una oficina es loable que la tenga, como todo organismo público para comunicarse con la prensa...
EC - Tengo aquí el comunicado que emitió ayer la SCJ explicando lo que acababa de ocurrir, cuál había sido el planteo de los trabajadores de Dancotex.
ERA - Usted lo tiene y yo no, pero me llama la atención que sobre una medida reservada como esta, que no se ha terminado de cumplir, haga comunicados nada menos que la SCJ. No me llega a convencer, podríamos discutir si ya dejó de ser reservada o no, pero mientras no se termine de cumplir la medida es reservada.
Eso fue notorio, fue un hecho público, incluso le "tiraron orejas" creo que muy irrespetuosamente, a la señora jueza letrada de cuarto turno, a quien, si había alguien que podía no recusar, que es una cosa que ya está en desuso, pero cuestionar como lo hicimos por la vía recursiva, era la empresa. Se había embargado todo el establecimiento de prácticamente cinco millones de dólares, tasado por el Banco República, por una deuda real que ascendía a 17.000 dólares que estaban depositados, a los que después se sumaban otros rubros discutibles de licencias, aguinaldos y despidos por 115.000. Dimos garantías por 300.000 dólares y la jueza redujo el embargo, o sea que lo que afectó a la contraparte, que la llevó a la recusación y a todo lo que aconteció después, fue una reducción en la sentencia que esa misma contraparte había pedido.
EC - Ayer la SCJ informó, a través de su oficina de prensa, que los operarios de la empresa Dancotex habían presentado un escrito ante la jueza Elisa Lizaso expresando su voluntad de desistir de los procedimientos, de acuerdo con lo dispuesto por el artículo 227 del Código General del Proceso, o sea, desistir del procedimiento de embargo.
"Analizado el breve escrito de los trabajadores, suscrito por el abogado Dr. Alejandro Chape Machado, la jueza actuante dispuso traslado a la contraparte por el término de seis días, disponiendo que la resolución se notificara personalmente al demandado (propietario de la empresa). Todo lo peticionado en otros escritos agregados en el expediente quedó también supeditado a esta última resolución", dice el comunicado.
ERA - Es exacto totalmente, yo me notifiqué a las 17.30 horas de ese decreto. Pero quiero aclarar una cosa: el desistimiento no es una decisión unilateral, yo no puedo iniciar un juicio, estar cientos de días o varias semanas embargando, causando daños y perjuicios, y de un día para otro decir: "Me arrepentí, desisto y esto se terminó".
EC - El artículo 227 del Código General del Proceso, en su inciso 1, dice: "Podrá desistirse del proceso en cualquier estado del mismo anterior a la sentencia ejecutoriada, en cuyo caso el tribunal ordenará el archivo de las actuaciones, salvo que medie oposición de la contraparte, deducida dentro de los seis días siguientes a la notificación". Ustedes, en teoría, pueden oponerse a este desistimiento.
ERA - Y con mucho fundamento. Pero quiero aclarar una cosa, porque lamentablemente el derecho no es tan sencillo ojalá fuera así: el articulado es un contexto, y Couture que es una palabra mayor en el derecho procesal uruguayo e internacional señalaba que había tres formas atípicas de poner fin a un juicio, o sea de llegar a una conciliación: la transacción por el ejemplo si el otro día hubiéramos llegado a un acuerdo total habríamos transado y ahí se terminaba; cuando el demandado en este caso Dancotex es convencido por la otra parte y se allana; y el desistimiento, o sea cuando el actor está diciendo que estaba equivocado.
Allí surge todo este proceso que debemos analizar paso por paso, porque hay una sentencia ejecutoria que está firme que debemos retirar las máquinas, que la Justicia laboral tiene que hacer cumplir, la Justicia civil fue conteste y el Poder Judicial; todo está en juego en este momento.
EC - ¿Ustedes van a oponerse a la decisión de los trabajadores de Dancotex de desistir del embargo?
ERA - Tenemos seis días para contestar. Vamos a analizarlo profundamente, es un tema bastante complejo, primero vamos a seguir insistiendo en retirar la maquinaria, porque es una cuestión de supervivencia.
EC - La nueva situación que ha quedado configurada es que en principio ya no hay oposición de los sindicatos a la resolución de la jueza en lo laboral puesto que en teoría, en la visión del sindicato, cayó el pedido de embargo que sostenía ese reclamo de la jueza y de la empresa, pero al mismo tiempo se ha resuelto ocupar la planta...
ERA - Eso es lo extraño, porque siguiendo el razonamiento de Couture lo hablamos ayer, la doctora Lizaso entendió que hoy nosotros libremente podemos ir con los camiones y llevarnos todo.
EC - La jueza entiende que ustedes pueden ir a retirar las máquinas...
ERA - En un primer razonamiento, de acuerdo con lo que habló con el doctor Chape, que me merece todo el respeto, que nos ha demostrado con creces ser un colega leal, lo mismo que en un primer momento el otro colega que intervino. Porque esto que usted me dice que es nuevo es lo mismo que pasó el primer día, hoy hablamos de ocupación de Dancotex pero es lo mismo que pasó el 3 de marzo, en aquel momento era otro el abogado, el doctor Fabián Fernández, quien había llegado a un acuerdo con el doctor Crespo de cumplir con el consejo de salarios, con el convenio colectivo vigente y hacer una bipartita. Todo eso que se ha dicho durante mucho tiempo yo he seguido las tertulias de ustedes con mucho respeto porque veo que personas que piensan diferente han analizado con una profundidad extraordinaria todo este tema tiene una gran falacia en la base. El 3 de marzo no se dijo algo inhumano, de un día para el otro nos vamos para Colonia, lo que realmente no estaba en la cabeza de nadie, porque desarmar y trasladar 160 máquinas dándole trabajo a muchísima gente, lleva por lo menos un año; y estaba todo el muestrario que se iba a hacer en Montevideo, que por lo menos llevaba seis meses de trabajo y lo iban a hacer 70 u 80 operarios de Montevideo. Eso era lo que había que cumplir el 3 de marzo, pero ese día se ocupó la fábrica, hay un acta, que le puedo hacer llegar. Después vino toda la historia de guardia gremial, de medida gremial, de si se podía cobrar seguro de paro contra el decreto 15.080, artículo 80, literal B, que es terminante, y toda la historia que ustedes conocen y han difundido. Después se pidió un embargo, después vino la recusación de una jueza y ahora un desistimiento. ¿Dónde estamos parados?
EC - En principio ustedes, a la luz del desistimiento de los trabajadores en cuanto al embargo, pueden ir hoy mismo a retirar la maquinaria.
ERA - En principio parecería lo lógico. Si anteayer tuvimos una audiencia en la que se esperaba una sentencia de la jueza y aparentemente la otra parte nos da la razón, desiste, lo lógico sería que, si la oposición de intereses estaba en retirar ocho máquinas y sus accesorios, materia prima, muestrarios y cinco computadoras y dejar todo lo demás para seguir negociando, pudiéramos cumplir con esa parte.
EC - Si dan ese paso, ¿lo van a hacer al amparo de una resolución judicial?
ERA - La resolución judicial está firme, porque si bien hay dos recursos, recurrieron ellos y recurrimos nosotros, porque la sentencia no deja conforme a ninguna de las dos partes, nosotros pedimos más y nos dieron menos y ellos pedían mucho más y les dejaron sacar unas máquinas...
EC - Usted dice que la sentencia está firme.
ERA - Está firme porque el desistimiento no tiene efecto suspensivo. Antes de contestar al desistimiento tenemos que contestar el recurso de revocación subsidiario de apelación que interpuso el doctor Chape ya hace unos cuantos días y que vence hoy.
EC - Qué lío, ya desde el punto de vista jurídico es demasiado difícil como para ser comprendido desde afuera. Es un entramado muy entreverado.
ERA - Lo que la gente tiene que comprender desde afuera es que este ya no es un problema del país sino de todo el empresariado uruguayo.
EC - Ayer Juan José Ramos decía que si se presentaba el desistimiento lo que iba a ocurrir iba a ser un conflicto entre dos derechos, el derecho de propiedad del empresario y el derecho de los trabajadores a ocupar.
ERA - Esto viene de muy larga data, usted conoce todos los antecedentes, el caso Vanni, que no vamos a repetir nosotros, el caso de la curtiembre Naussa, que tampoco vamos a repetir, Soloducho no quiere mandar preso a nadie, quiere retirar ocho máquinas. Y conoce el caso del frigorífico Lorsinal, en el que hubo un recurso de amparo y la sentencia de la doctora Zulma Casanova fue terminante en cuanto a que no prosperaba. También hubo un caso en Lavalleja, el del diario La Unión, que está cerrado; nueve empleados contra los dieciocho restantes ocuparon el diario, no era un conflicto entre empresarios y trabajadores, era entre trabajadores y trabajadores, entre trabajadores que querían trabajar y trabajadores que querían ocupar, en ese caso el recurso de amparo tampoco prosperó y el diario cerró. Esto dejó de ser un problema específico de Dancotex, tampoco es un problema de los trabajadores de Colonia sino de todos los trabajadores que en Uruguay quieran trabajar, y tampoco es un problema político, porque yo reconozco que la oposición haga su juego y ejerza el contralor hoy más que nunca cuando hay mayorías absolutas, porque este es un problema jurídico, de seguridad jurídica. Es un problema del Estado de derecho.
EC - ¿Cómo se lauda? ¿Hay espacios para negociar todavía?
ERA - ¿Negociar qué?
EC - No sé, pregunto, quiero saber cómo se sale de esto desde el punto de vista de ustedes.
ERA - Negociar lo posible, todo, negociar lo que tenga consecuencias reales, todo, pero primero vamos a salvar a la empresa para tener qué negociar. Y para salvar la empresa tendría que haber madurez de ambas partes para permitir llevar en forma armónica, con colaboración de ambas partes, las máquinas y la materia prima, que son imprescindibles para continuar en Colonia. El resto queda acá, si quieren ocupar durante el año, que lo ocupen durante dos años.
No vamos a hacer ningún camino, hoy no existe ningún camino, este decreto que surgió es realmente peor que lo anterior, no permite ninguna solución. Lo anterior podía ser cuestionable, era un decreto del año 66, no de hace quince días. Aquel decreto, que permitía el recurso a la fuerza pública, se podía entender como una reglamentación de las potestades del Ministerio del Interior, pero el decreto de hoy es inmirable, inleíble, porque está entrando en materia de ley. En expresiones del doctor Cassinelli Muñoz, la ilegalidad es tan manifiesta que está regulándose por decreto lo que es materia reservada de ley, sólo la ley en esto estoy de acuerdo con el PIT-CNT puede establecer una regulación como la del decreto vigente.
EC - Pero si ustedes insisten en retirar la maquinaria se van a encontrar con una fábrica ocupada. ¿Qué pasos van a dar?
ERA - Hay un problema de la Justicia. ¿La justicia entiende que puede hacer cumplir un embargo o no? ¿Puede hacer cumplir una medida cautelar o no? Estamos en una situación de sucesivas dilatorias no las quiero calificar, y antes que yo dijo Couture que cuando algún litigante muy susceptible no encuentra caminos obstaculiza la Justicia y busca variables como la que estamos escuchando, que es una dilatoria más de un rosario muy largo, y estamos olvidando que son ciento y tantos días de privación de ingresar a la fábrica y el mundo no espera por Dancotex...
EC - ¿Ustedes han tenido del gobierno, del MTSS, alguna señal en estas horas, alguna llamada, alguna comunicación en procura de la conformación de un nuevo espacio de negociación?
ERA - Siempre estamos abiertos al diálogo.
EC - ¿Pero ha ocurrido eso?
ERA - Lo que sucede es muy sencillo, ¿quiere algo más concreto que lo que hizo el Ministerio de Industria (MIEM)? ¿Conoció eso? Una comisión de notables presidida por Juan Manuel Rodríguez e integrada por tres representantes de la facultad, los ingenieros más competentes en el tema, y un representante del MTSS analizó toda la situación y dijo lo que correspondía hacer. Si bien no se pronunció por escrito, porque no correspondía porque era un organismo asesor del MIEM, dijo terminantemente que la decisión de la empresa de ahorrar y bajar costos era imprescindible, que lo que se estaba haciendo era coherente. Incluso tengo entendido que se ofreció alojamiento en hoteles y traslado gratuito a algunos obreros que podían viajar y eso fue rechazado. Entonces, 105 días después, ¿de qué vamos a hablar?
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Edición: Mauricio Erramuspe