(Emitido a las 7.37)

EMILIANO COTELO:
Parece que se viene una nueva ocupación. Aunque en este caso se trataría de una ocupación con características muy especiales.

Me refiero a la movilización que pretenden llevar a cabo jubilados. Una organización de jubilados anunció que ocupará la sede del Banco de Previsión Social (BPS) en reclamo de aumento de las pasividades. La decisión se dispara a partir de la noticia de que no habrá incremento en el mes de julio.

Esta medida es impulsada por la Organización Nacional de Jubilados y Pensionistas del Uruguay (Onajpu), cuyo secretario general, Sixto Amaro, aclaró que llevarla adelante implicará "un gran sacrificio para jubilados y pensionistas". De todos modos, están determinados a dar el paso, porque "más vale arriesgar la salud que esperar la muerte en condiciones infrahumanas", según dijo.

Estamos en diálogo con Sixto Amaro.

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Señor Amaro, ustedes han hecho este anuncio, como yo recién lo reseñaba, en términos muy dramáticos. ¿Por qué llegan a pensar en una ocupación de la sede del BPS?

SIXTO AMARO:
Esta decisión se toma luego de haber recorrido una cantidad de instancias que hacen a reuniones con el subsecretario de Trabajo y el subsecretario de Economía, en particular con cada uno de ellos, con la Comisión de Seguridad Social de la Cámara de Diputados; hemos hablado con legisladores en forma reiterada. Finalmente se instaló un ámbito de discusión, que consideramos en su momento muy positivo y que discutió una primera fase en cual aumentamos las esperanzas de que se produjera el ajuste a partir del 1º de julio.

Ya hace 15 días y no hemos tenido noticias de que el ámbito vuelva a reunirse, y luego los mensajes que el Poder Ejecutivo hizo conocer al pueblo uruguayo, que vinieron de la mano del vicepresidente Nin Novoa, quien anunció que en el próximo presupuesto las prioridades del gobierno pasan por la salud, la educación, el fortalecimiento de la infraestructura nacional –el puerto, el ferrocarril– y la seguridad. Nos parece muy bien que todos esos temas puedan considerarse con mucha fuerza, pero obviamente la seguridad social no es prioridad para el gobierno.

Inmediatamente después el economista Mesa, subdirector de la Oficina de Planeamiento y Presupuesto (OPP), anunció que habrá aumento para los empleados públicos en enero y que va a ser de alrededor de un 10%. Nuestros aumentos van ligados a los aumentos de los empleados públicos, por ende no habrá aumento tampoco para jubilados y pensionistas.

EC - ¿Por qué entienden que es imprescindible que haya un aumento ahora, en julio? Se lo pregunto porque venimos en tiempos de inflaciones muy bajas, por esa razón se están espaciando los aumentos a los funcionarios públicos y concomitantemente a los pasivos. ¿Por qué es imprescindible cambiar ese criterio esta vez?

SA - En los últimos cinco años hemos venido arrastrando la pérdida del poder adquisitivo de nuestras prestaciones en alrededor de un 30%.

EC - ¿Cómo es eso? Porque, al revés, hubo una época, después de la reforma constitucional que impulsaron las organizaciones de pasivos, en la que las pasividades se recuperaron de manera muy interesante. Nunca fueron nada del otro mundo, no estamos hablando de valores estrambóticos, estamos hablando de niveles bajos, pero hubo una recuperación.

SA - Y luego vino una caída estrepitosa de nuestro poder adquisitivo, que en los últimos cinco años llegó a niveles tales que en estos momentos hay alrededor de 80.000 jubilados y pensionistas que ganan menos de 1.500 pesos por mes, más de 170.000 que ganan menos de 3.000 pesos por mes, y el 80% de gana menos de 5.000 pesos por mes. Entonces el aumento que se produjo en enero, que además fue para cubrir los aumentos del Índice de Precios al Consumo (IPC) de entre julio y diciembre –no fue para adelante, fue para cubrir un semestre que ya había transcurrido–, para una persona que ganaba 1.500 pesos significó 90 pesos. ¿A quién se le ocurre que la inflación ya no se comió ese aumento de 90 pesos? Se lo comió solamente el aumento de las tarifas de UTE, Antel, OSE, o los aumentos permanentes que se han dado en el azúcar, que subió un 37% de enero a la fecha; y termina de subir la carne y ahora van a subir las mutualistas.

El costo de vida hecho en una oficina, números para acá y números para allá, es una cosa, pero cuando uno tiene que parar la olla, estos compañeros que ganan menos de 1.500 pesos por mes no comen ni 15 días, pasan necesidades que rayan en la marginación total de la sociedad.

EC - Ustedes están reclamando un aumento en julio, pero están reclamando un número concreto.

SA - Estamos reclamando 600 pesos de aumento. Porque los porcentajes siempre favorecen a las jubilaciones de privilegio.

EC - Ustedes piden un aumento por partida fija.

SA - Un aumento por partida fija para los jubilados que están más sumergidos. Porque para una persona que gana 1.500, 3.000 o 5.000 pesos, 600 pesos es un aumento importante. Sin embargo, si se aplicara un 5%, por ejemplo, para una jubilación de privilegio de 50.000 pesos el aumento es de 2.500 pesos, pero para aquellos que ganan 2.000 pesos el aumento es de 100 pesos. Hay que considerar qué clase de jubilados y pensionistas tiene nuestro país, qué clase de jubilados y pensionistas va a reflejar nuestra sociedad, si los quiere ver padeciendo y haciendo de los últimos años de vida una condena, o quiere jubilados y pensionistas que al final de una vida de trabajo puedan disfrutar con los hijos y los nietos medianamente en una sociedad que todos sabemos las dificultades que tiene.

EC - Usted dice que venían teniendo una serie de reuniones, que se habían generado ámbitos de diálogo con el gobierno a propósito de estas demandas. ¿Habían hablado en particular de esa partida fija, de los 600 pesos?

SA - Sí, fue una decisión del XI Congreso de Onajpu que hemos venido reiterando en todas las instancias del Poder Ejecutivo y el Poder Legislativo.

EC - ¿Pero llegó a hablárseles de que eso era factible?

SA - No, el gobierno siempre estudia los planteos que nosotros realizamos. Ellos no hicieron promesas en ese sentido, sin embargo tampoco dijeron que no. Estamos en el marco de una discusión que tiene un vacío, que nos sorprende, y en medio de ese vacío de estos últimos 15 días aparecen algunos voceros del gobierno anunciando las prioridades del presupuesto y el economista Mesa anunciando que hasta enero no va a haber aumento.

EC - Entonces ustedes optan por ocupar el edificio central del BPS.

SA - Sí.

EC - ¿Ya han fijado fecha?

SA - Sí, va a ser en los primeros días de la semana que viene, según me avisaron anoche los compañeros de una comisión que nombramos a tales efectos, porque tenemos que preparar la ocupación.

EC - ¿Qué quiere decir ocupar el edificio del BPS?

SA - Quiere decir llegar al BPS con centenares y centenares de jubilados, ocupar sus instalaciones y hacer de ese lugar un centro de lucha, para lo cual vamos a convocar a todos los jubilados y pensionistas para que permanentemente lleguen al lugar, lo rodeen; lo mismo vamos a hacer con el movimiento sindical, con los estudiantes y seguramente Fucvam va a estar con nosotros. Es decir que se forme allí una luz de lucha rodeada por el conjunto del pueblo uruguayo.

Vamos a llamar a nuestros hijos, a nuestros nietos para que nos rodeen. Es una medida de un enorme sacrificio para hombres y mujeres que tenemos más de 65, 70, 80 años, pero no nos queda otro camino porque la realidad es que o alumbramos alguna salida para estos miles y centenares de miles de jubilados y pensionistas, o padecerán hasta que les llegue la muerte.

EC - Anunciando la medida con tanta anticipación, ¿de hecho no están dejando la puerta abierta para que no pueda concretarse? Todo indica que es muy fácil prever un dispositivo de seguridad que impida que ustedes ingresen al BPS a ocupar.

SA - Esa discusión se produjo ayer en el comité ejecutivo, y había algunos compañeros que plantearon "si anunciamos la medida luego no va a ser posible". El comité ejecutivo, porque hay una gran efervescencia entre jubilados y pensionistas, estuvo rodeado de presidentes y secretarios de muchas asociaciones de Montevideo y Canelones, había más de 50 personas, entonces la información se iba a filtrar, y a lo mejor se filtraba distorsionada. Por eso quisimos dar la cara, queremos que el pueblo uruguayo conozca la medida que vamos a tomar, y a nosotros nadie nos puede impedir que entremos al BPS, porque somos todos jubilados o pensionistas y podemos llegar al banco a realizar las gestiones que nos parezca que tenemos que realizar.

EC - Pero de hecho, al anunciarla con tanta anticipación, ¿el mensaje al gobierno no termina siendo "a ver, por favor, abran un nuevo ámbito de diálogo, escúchennos, que alguien evite la ocupación"?

SA - De ninguna manera, rechazamos cualquier interpretación en el sentido de que queremos que se apiaden de los jubilados y pensionistas. Los jubilados y pensionistas de este país conocemos los derechos que tenemos, hemos pasado una vida –que no ha sido fácil para Uruguay– en el marco de la lucha por consolidar el movimiento sindical, hemos bregado por la democracia en este país como nadie y hoy, a la altura de la vida a que estamos, se nos presenta este cuadro que no estamos dispuestos a soportar. Por eso hemos tomado una medida de lucha.

EC - Desde la audiencia, a propósito de la medida, le pregunta Marcelo –entre otros–: "¿Por qué se lleva adelante una movilización tan dura, justo con un gobierno de izquierda?".

SA - Esto en primer lugar marca la independencia de jubilados y pensionistas del gobierno, de cualquier sector político, de cualquier sector religioso, de todo lo que no tenga que ver con la forma de vida de jubilados y pensionistas. Nuestro único compromiso es con los jubilados y pensionistas, si alguien quiere pensar que esta medida es contra el gobierno, que lo piense, pero no es en contra nadie, es a favor de los jubilados y pensionistas.

EC - Porque la Onajpu ha tenido una cierta afinidad con la izquierda.

SA - El 90% de los militantes de la ONAJPU seguramente está vinculado con algún sector de la izquierda, pero eso no implica que tengan ningún compromiso con la izquierda ni con el gobierno. Nuestro compromiso es con nuestra conciencia y con la labor gremial que tenemos por delante.

EC - El directorio del BPS renovó hace pocos meses sus representantes de los sectores sociales, y en particular se renovó el cargo del director en representación de los pasivos, que correspondió a Geza Stari, que fue impulsado justamente por la Onajpu. ¿En qué posición queda Stari en esta circunstancia?

SA - Esta medida no es contra el Directorio del BPS, ni mucho menos. Esta medida se toma porque el BPS es la referencia principal que tenemos los jubilados y pensionistas y que tiene la sociedad uruguaya, pero no tenemos la menor duda de que las soluciones deben provenir de instancias del Poder Ejecutivo. El BPS ejecuta las propuestas que el Poder Ejecutivo le realiza.

Queremos convocar a todos los jubilados y pensionistas a estar atentos el lunes y el martes de la semana que viene, cuando se va a producir la ocupación. Esperamos contar con centenares, quizás miles de jubilados y pensionistas dentro del BPS.