(Emitido a las 08.40)

EMILIANO COTELO:

Al finalizar la reunión que se llevó a cabo en la residencia presidencial, los líderes partidarios brindaron una conferencia de prensa y expresaron su coincidencia en que el camino para saldar el diferendo es el diálogo.

"Nosotros lo que estamos señalando es simplemente nuestra coincidencia en una línea general de prudencia y de búsqueda de diálogo. El Uruguay ha deseado siempre tener las mejores relaciones con Argentina. Las debe preservar, y las seguirá buscando. Más aún hoy, luego de este pronunciamiento de la Haya", dijo el ex presidente Julio María Sanguinetti.

Por su parte, el presidente del Directorio del Partido Nacional, Jorge Larrañaga, resaltó que el fallo es una puerta de entendimiento: "El fallo de la Haya es una puerta de entendimiento. Debe ser un instrumento para el entendimiento y de esta forma queda ratificado por nuestro país; donde obviamente en las próximas instancias se va a ir generando y construyendo la disposición del país, del gobierno, del Poder Ejecutivo y del Presidente de la República en este sentido".
 
En términos similares se pronunciaron Pablo Mieres, del Partido Independiente, y Aldo Lamorte (de la Unión Cívica).

Finalmente, el presidente del Frente Amplio, Jorge Brovetto, describió la actitud con la que el gobierno se planta en esta nueva etapa: "Hemos señalado que esta es una continuación de una línea de firmeza, apego irrestricto a todas las disposiciones jurídicas y legales, tanto nacionales, regionales como internacionales, y fundamentalmente de diálogo."

Pero más allá de las declaraciones públicas ¿Qué había ocurrido en la reunión? ¿Qué se había conversado? 

Dentro de Suárez

Fuentes consultadas por En Perspectiva estuvieron de acuerdo en que el ambiente fue muy cordial. Destacaron que la reunión comenzó con un intercambio informal y distendido. Por ejemplo, hubo un breve capítulo sobre fútbol cuando el doctor Vázquez recibió las felicitaciones por el ascenso del Club Progreso a la primera división.

La exposición del presidente

Cuando se ingresó al tema de fondo, Vázquez distribuyó entre sus invitados dos documentos:

* La ordenanza de la Corte Internacional de Justicia que rechazó las medidas cautelares solicitadas por Argentina, en particular la suspensión de la construcción de las dos plantas de celulosa. El documento se entregó en inglés y en francés.

* El Acuerdo Marco sobre Medio Ambiente del Mercosur, aprobado el 22.06.01 en Asunción y ratificado por nuestro país a través de la ley 17.712 de diciembre de 2003. De ese documento, Vázquez leería y comentaría luego el Capítulo I, artículo 3°: "En sus acciones para alcanzar el objeto de este Acuerdo e implementar sus disposiciones, los Estados Partes deberán orientarse, inter alia, por lo siguiente: c) promoción del desarrollo sustentable por medio del apoyo recíproco entre los sectores ambientales y económicos, evitando la adopción de medidas que restrinjan o distorsionen, de manera arbitraria o injustificada, la libre circulación de bienes y servicios en el ámbito del Mercosur".

A propósito, el presidente adelantó que será favorable a Uruguay el fallo del Tribunal de Controversias del Mercosur por las pérdidas que le ocasionaron a nuestro país los piquetes organizados por militantes entrerrianos en los puentes Fray Bentos- Puerto Unzué y Paysandú-Colón, a fines de 2005 y primeros meses de 2006. "Todo viene muy bien", comentó.

Luego, el primer mandatario expuso la forma como Uruguay encarará a nivel binacional la nueva etapa del conflicto, después del fallo de la Corte de La Haya: 

*La actitud será la ya asumida hasta ahora: firmeza, seriedad y apego a las normas.

*Se evitará los triunfalismos (entre otras cosas porque en la Corte de La Haya todavía falta ingresar en la denuncia de fondo, sobre el presunto incumplimiento por nuestro país del Estatuto del Río Uruguay; casi puede decirse que esto recién está empezando).

*Desde esa posición, nuestro país propicia el diálogo con el gobierno argentino y entiende conveniente tomar la iniciativa a esos efectos. Pero Vázquez aclaró que este regreso a las tratativas seguramente no se dará a través de un encuentro con su par argentino Néstor Kirchner. La cumbre, en todo caso, quedaría para el momento en que las conversaciones entre los dos países hubiesen avanzado de manera significativa, comentó el mandatario uruguayo, que recordó la frustración que dejó el intento de Cumbre en Anchorena, que debió cancelarse dos veces . Los primeros contactos entre las dos partes van a ser propiciados desde la Cancillería y algunas de esas gestiones tendrían lugar en Córdoba, en ocasión de la Cumbre del Mercosur, cuyos trabajos preparatorios a nivel de ministros empiezan justamente hoy.

*En este nuevo escenario, teniendo en cuenta las recomendaciones de la Corte de La Haya, Uruguay cree que CARU está llamada a jugar un papel muy importante. Por esa razón, se prevé fortalecer la representación uruguaya ante ese organismo binacional, fundamentalmente con un mayor peso técnico.

* Entre otras cosas, nuestro país volverá a ofrecerle a Argentina el monitoreo conjunto, argentino-uruguayo, sobre las plantas de celulosa, tanto en la etapa de construcción como luego, cuando ya estén operativas.

Las voces de los partidos

A continuación, se sucedieron en el uso de la palabra los líderes de los partidos: Julio María Sanguinetti (PC), Jorge Larrañaga (PN), Pablo Mieres (PI), Aldo Lamorte (UC)y Jorge Brovetto (FA).

Sus intervenciones se caracterizaron por un alto grado de coincidencias: sobre la actuación en La Haya, sobre la reacción al conocerse el fallo y sobre los pasos a dar.

Se destacó la forma como Uruguay manejó su presentación en la Corte Internacional de Justicia y se la contrastó con el estilo elegido por Argentina. Se destacó el tono mesurado y sobrio de las reacciones políticas que se escucharon en nuestro país después del fallo y en particular se valoró con satisfacción la actitud serena con la que la sociedad uruguaya recibió ese resultado.

También todos los representantes partidarios estuvieron de acuerdo en que es a Uruguay a quien le corresponde dar el primer paso en procura de nuevas negociaciones con Argentina. Y consideraron adecuado ofrecer participación al país vecino en el monitoreo tanto de la instalación de las fábricas de celulosa como de su funcionamiento y su impacto en las aguas del Río Uruguay y en el medio ambiente de la zona.

De todos modos, en cuanto a los detalles de las acciones a adoptar no se profundizó, ya que se entendió que es el gobierno quien debe tomar esas decisiones, analizando en cada momento los escenarios que puedan ir dándose. Sin embargo, los cinco partidos presentes pusieron a sus técnicos a disposición para participar de las consultas que fuesen necesarias.

Disensos también hubo...

Algunos de los asistentes consultados por En Perspectiva comentaron que en algún momento les sorprendió el alto grado de consenso que pautaba las exposiciones.

Hubo, sin embargo, algunos chispazos de polémica. Por ejemplo, en una de las intervenciones de Larrañaga. El presidente del Directorio del Partido Nacional enfatizó que es necesario profesionalizar la gestión diplomática y criticó en ese sentido la actuación del canciller Reinaldo Gargano en esta crisis.

En otro momento de la reunión, el senador blanco sostuvo que hay que volver a discutir entre todos los partidos la política exterior del país. Advirtió sobre la crisis que atraviesa el Mercosur y objetó que - en ese marco- se haya aprobado la incorporación de Venezuela al bloque.

En esta materia, Larrañaga fue apoyado por el líder colorado Julio María Sanguinetti y por Pablo Mieres del Partido Independiente. Incluso desde la oposición llegó a plantearse la conveniencia de un ámbito donde se pudiera elaborar una política de Estado a propósito de la inserción internacional del país.

Fue entonces cuando intervino el presidente Vázquez, quien advirtió que la discusión se había apartado del orden del día de la reunión, aunque dejó abierta la puerta para volver sobre estas cuestiones en otras instancias.

Estos amagues de polémica fueron disimulados luego en la conferencia de prensa por los líderes partidarios. Por ejemplo, cuando uno de los periodistas consultó sobre si habían existido cuestionamientos al canciller Reinaldo Gargano, el ex presidente Sanguinetti tomó la palabra y sentenció: "No era el tema de hoy".