(Emitido a las 7.35)

EMILIANO COTELO:
El PIT-CNT se dispone a salir en defensa de la soberanía, para lo cual propone resistir la firma de un tratado de libre comercio (TLC) con Estados Unidos.

Según informaron ayer sus voceros, la central de trabajadores está instalando una comisión que llevará adelante una investigación propia de este tipo de acuerdos comerciales porque entiende que hasta el momento la opinión pública maneja una información muy recortada.

Estamos en diálogo con Juan Castillo, secretario de Organización del PIT-CNT, integrante de la dirección de la central de trabajadores.

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Señor Castillo, ustedes el nombre que han elegido es "Comisión en Defensa de la Soberanía". ¿Es correcto?

JUAN CASTILLO:
Sí, hemos sugerido ese nombre porque nos pareció el más apropiado. La otra alternativa sería directamente ponerle Comisión contra un TLC y habría que explicar muchas cosas. Porque no nos preocupa sólo eso, nos preocupan los contenidos de los TLC, que no son solamente con Estados Unidos, pueden ser con China, con la India y se pueden abrir a más países. Además también nos interesa analizar y hacer propuestas concretas para mejorar el relacionamiento en la región a partir del Mercosur o algún otro proceso de integración.

EC - Esta comisión que el PIT-CNT está impulsando se opone a todos los TLC.

JC - Yo no dije que se oponga, dije que nos preocupan los contenidos de los tratados. Vamos a tratar de divulgar la información, de conocer los contenidos, cuestión esta de la que no se está enterando a la población ni nosotros particularmente.

EC - Usted dice que no es una comisión que se vaya a oponer a los tratados. ¿Cómo que no? Esa es la sensación clarísima que queda.

JC - A usted le puede quedar esa sensación, nosotros decimos lo que decimos. Es una comisión que tiene como punto central la defensa de la soberanía, hemos colocado allí el análisis de la inserción internacional del país. Nos preocupa la marcha del proceso de integración regional, mejorar el Mercosur para tener en la práctica lo que se genera a partir de aquello de más y mejor Mercosur. Y porque además no obviamos que nuestro país y Estados Unidos vienen avanzando en la discusión en un formato TLC, que a nosotros nos preocupa porque conocemos sus contenidos y fundamentalmente sus consecuencias para nuestro país.

EC - Usted dice que les preocupa el contenido que suelen tener estos acuerdos de libre comercio. ¿Entonces no se van a oponer? Le pregunto porque usted hacía la precisión recién de que no es una comisión de oposición y no terminé de entender eso.

JC - Hasta ahora no hay nada arriba de la mesa, no hay un acuerdo, no se ha alcanzado consenso entre los dos países, o al menos no lo sabemos, la opinión pública, nosotros no lo sabemos. Se está hablando –a veces con contradicciones dentro del gobierno– del formato TLC y algunos hablan de un acuerdo a la uruguaya. Estamos de acuerdo en que Uruguay tiene urgente necesidad de abrir mercados, de tener comercio con la región y el mundo. Sería una cuestión bastante contradictoria para nosotros los trabajadores, los jubilados, los estudiantes, los cooperativistas impedir que se haga comercio, porque de eso vivimos. Pero nos preocupa que se hable de TLC porque conocemos los contenidos que tiene este tipo de tratados, los condicionamientos, que no se limitan a un intercambio comercial sino que vienen con tantos condicionamientos que pueden afectar, lesionar la soberanía del país. De ahí el título de la comisión.

EC - ¿De qué manera van a trabajar en el estudio de este tipo de documentos con los antecedentes que están a disposición? ¿Qué se proponen hacer?

JC - Varios hechos. La comisión se instalará mañana jueves a las 18 horas, va a funcionar en la Federación Ancap. Las comisiones convocantes van a ser las que van a regir los caminos de la comisión, vamos a marcar las reglas de juego entre todos los que participen y se adhieran a la iniciativa. Ya tenemos una cantidad importante de materiales que nos han acercado, de otros TLC. Estados Unidos ha firmado una importante cantidad con varios países de América Central, de América del Sur y de América del Norte, y ahí vamos a demostrar la similitud de las características de los entre 10 y 12 capítulos en los que se colocan los condicionamientos, son muy similares.

Algunos contenidos son un calco de los contenidos de la Asociación de Libre Comercio de las Américas (ALCA) que los países del Mercosur rechazaron en noviembre del año pasado en Mar del Plata y el vocero fue nuestro presidente de la República, el doctor Tabaré Vázquez, argumentando que no garantizaba el libre comercio y que no estaban las condiciones dadas para que nuestra región pudiera sumarse a un planteo de ese tipo. Además la posibilidad de generar debate público, que no se está generando hoy, trayendo distintas visiones presentadas por distintas personalidades. Hasta ahora se han traído personalidades de otros países que están de acuerdo con los TLC y que hablan de las maravillas que podrían tener. Nosotros tenemos también principales personalidades de América, de países en los que ya hay TLC, que no dicen lo mismo.

EC - ¿Qué nombres están confirmados?

JC - Confirmado hasta ahora tenemos al sociólogo y economista Alberto Arroyo, de México, a quien ya habíamos traído hace dos años cuando estaba en debate el tratado de protección de inversiones con Estados Unidos, que ya está aprobado. En ese momento decíamos que era el paso previo a un TLC, porque en todos los países primero se firmó un tratado de protección de inversiones y luego vinieron los TLC, es una condición que pone Estados Unidos. Hemos cursado invitación a Joseph Stiglitz, que no ha contestado aún.

EC - El Premio Nóbel de Economía, ex economista del Banco Mundial.

JC - Habría algunas otras personalidades. Nuestra idea es, antes de colocar alguna otra propuesta de acción o de movilización, tener tres foros de debate bien participativos, uno que puede ser con personalidades del ámbito internacional, uno con personalidades del ámbito político nacional, con actores políticos con opiniones a favor y en contra para que se genera el debate, y otro con representantes de organizaciones sociales preocupadas por los compromisos que podamos tener en adelante.

EC - ¿Qué organizaciones forman parte de esta comisión? ¿Forman parte de ellas algunas agremiaciones empresariales? Se habló de esa posibilidad en estos días. ¿Ya está conformada la lista?

JC - No, eso va a ser mañana jueves. Veremos quiénes dan respuesta. Con el sector empresarial pensábamos hacer algún foro debate, entendemos que para sus integrantes a veces es muy difícil participar en comisiones o actividades junto con organizaciones sociales, pero en este aspecto puntual hemos escuchado opiniones de varias cámaras empresariales y de empresarios que individualmente han manifestado su preocupación porque no todas las industrias han sido favorecidas en los países en los que hay TLC, muchas de ellas han entrado en riesgo de extinción.

En nuestro país el sector laboratorios, la industria de los fármacos, los sectores del plástico, la pequeña y mediana empresa, son fundamentalmente los más golpeados. Por lo menos en México se habla de 3 millones de pérdida de pequeños y medianos granjeros porque los altos subsidios y el profesionalismo que tiene Estados Unidos con ellos allí dentro hacen que ningún otro pueda competir, entonces con muy poco el mercado uruguayo se vería inundado de estos productos.

EC - Hasta ahora la comisión tiene como miembros al PIT-CNT, Fucvam, FEUU y la Organización Nacional de Jubilados y Pensionistas. No se menciona ninguna institución que agrupe a empresas o a distintos tipos de empresas.

JC - No, no las hay, además esas cuatro organizaciones somos las convocantes y nos proponemos ser los voceros.

EC - Usted mencionó al pasar que los acuerdos que Estados Unidos ha ido firmando en los últimos años son un calco de lo que se proponía a nivel del ALCA y destacó al pasar que el ALCA fue rechazado en la cumbre del Mar del Plata en una postura que encabezó el presidente uruguayo, Tabaré Vázquez. ¿Ustedes perciben una contradicción entre la actitud del gobierno ahora y posiciones anteriores de este mismo gobierno o del Frente Amplio? ¿Cómo va a jugar este aspecto del análisis?

JC - Si efectivamente el final de la película, que yo no quiero, es la firma de un TLC, objetivamente estaríamos hablando de una contradicción entre una postura y la otra. Pero esperamos incidir, por eso estamos tratando de que esta acción prospere, el trabajo de esta comisión, la generación de debates, que estos sean serios, trasmitirle a la población la mayor cantidad de información lo más digerible posible, porque con preocupación veíamos hace unas dos semanas que se decía que más de ocho personas cada diez no saben lo que es un TLC, no pueden descifrar la sigla, no conocen los contenidos, por lo tanto menos saben de las consecuencias que puede tener. Ese es nuestro rol, no sólo contemplar, analizar la realidad, sino tratar de cambiarla. Por tanto tratamos de incidir y cambiar impidiendo los aspectos más negativos de un acuerdo comercial que pueda llevar adelante nuestro país. Veremos lo que ocurre. De hecho intercambio comercial actualmente entre Uruguay y Estados Unidos hay, se habla de que es importante y no hay TLC. No sé por qué firmarlo.

EC - Uno de los argumentos a favor de un TLC es que por ejemplo en las exportaciones de carne, si se redujeran los aranceles o directamente no existieran, las ventas uruguayas dejarían de pagar a la caja del gobierno de Estados Unidos cifras muy importantes, millones de dólares al año. Sería una "ganancia" para el país bastante relevante. Es un ejemplo de cuáles podrían ser las ventajas según lo que se ha destacado.

JC - Creo que hasta ahora es el único ejemplo de por qué firmar un TLC. Muy pocos hacen referencia a que Uruguay ha aumentado el volumen de ventas de carne a Estados Unidos porque Canadá tiene problemas desde hace más de un año con la vaca loca, porque si no el primer compromiso de Estados Unidos es con Canadá, tiene que comprarle tanto los productos cárnicos como lácteos a Canadá, no a Uruguay, siempre va a estar favoreciendo ese comercio, no este. ¿Por qué condicionar toda la economía, la producción, la soberanía e incluso el patrimonio, como pueden ser algunas empresas públicas, por una cuestión muy circunstancial que tiene que ver con ese problema con el ganado?

EC - Se han mencionado otros efectos positivos. No es el momento de entrar en un análisis profundo, pero al existir un TLC vendrían a radicarse a Uruguay empresas incluso de la propia región interesadas en aprovechar esos canales comerciales facilitados que quedarían abiertos, habría por lo tanto generación de nuevos puestos de trabajo en nuestro país. ¿Qué dice de ese tipo de efectos?

JC - No compartimos esa posición y queremos debatirla. No creemos que sea así, no creemos en los contenidos de un TLC, no entendemos que para poder comprarnos algún kilo de carne más y algún litro de leche más haya que condicionar el resto de la economía y la producción. Sin duda que como esto no es en blanco y negro alguna industria, alguna rama de actividad se va a beneficiar. Algunos han mencionado que la industria textil o de la vestimenta podría mejorar, se ha dicho que incluso puede llegar a doblar la cantidad de puestos de trabajo que tiene. Claro, en este momento tiene 2.500, doblarlos sería tener 5.000 puestos de trabajo en general. Pero son más los sectores que pueden llegar a perder, hay que poner todo en la balanza, los efectos a favor y los efectos en contra.

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Edición: Mauricio Erramuspe