Abdala: Uruguay no tiene norte en el conflicto con Argentina
El legislador colorado Washington Abdala dijo que algunos funcionarios argentinos, cuando se refieren al conflicto de las plasteras, "llegan a un nivel de ironía que uno no sabe si nos toman el pelo o hablan en serio". Calificó esa actitud como "patotera" y exigió que el gobierno abandone lo que para él es una conducta errática y haga escuchar su voz en los foros y medios internacionales.
(Emitido a las 7.55)
EMILIANO COTELO:
A nivel político, el Partido Colorado (PC) le reclamó al gobierno que actúe para contrarrestar las operaciones de Argentina tendentes a impedir, por ejemplo, la instalación de la planta de Isusa en el departamento de Soriano, pero en general las acciones que buscan impedir inversiones en Uruguay. Según el PC hasta ahora se incurrió en un comportamiento hemipléjico.
De esto vamos a conversar con el diputado Washington Abdala, del Foro Batllista.
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Diputado Abdala, ¿cuál es el análisis que hace usted?
WASHINGTON ABDALA:
Es bastante coincidente con el de la inmensa mayoría de los ciudadanos, que lamentablemente el conflicto con Argentina está medio fuera de control, nunca habíamos tenido una relación con ese país tan compleja como la que estamos teniendo ahora. Da toda la impresión de que los daños a la soberanía en el caso uruguayo ya son bastante notorios, nunca habíamos visto una operación de sabotaje a créditos para empresas instaladas en el país. Y las declaraciones de Picolotti de las últimas horas son aun más agraviantes.
EC - ¿A cuáles se refiere?
WA - A estas últimas en las que hace referencia a que la responsabilidad ahora es del Banco Mundial (BM). Llegan a un nivel de ironía que uno no sabe si nos están tomando el pelo o efectivamente hablan en serio.
EC - Picolotti sostuvo que la responsabilidad es del BM por haber filtrado este informe de impacto ambiental justo antes de un fin de semana largo.
WA - Parece un chiste, da la impresión de que hay una ausencia de seriedad descomunal en todo esto, algunos legisladores tenemos la impresión de que hay una actitud cuasi patotera del gobierno argentino, una especie de aquiescencia con funcionarios gubernamentales y legisladores que dicen este tipo de cosas. Es un clima muy malo y tenemos la impresión de que acá las cosas no se están haciendo como se deben hacer.
EC - "Tanta valentía para oponerse al TLC y tanta vacilación para defender nuestros derechos ante el abuso de nuestros vecinos". Esta es una frase de la declaración de la bancada colorada sobre los distintos debates respecto a la política exterior de este gobierno. Usted la suscribe...
WA - Por supuesto, el gobierno ha tenido una actitud más que errática en esto. Recuerde la reunión del presidente uruguayo con el argentino instando a la suspensión de las obras, anteriormente el silencio del gobierno uruguayo durante el verano, parecía que el tema no tenía trascendencia, e incluso la cruzada de funcionarios, cuando el canciller empieza a perder peso en todo este episodio se van canjeando funcionarios, creo que hasta Mujica termina cruzando a Buenos Aires para ver si puede resolver el tema. Ha habido momentos bastante erráticos, en algún momento se perdió la brújula en este episodio y no hay un norte.
Hoy está difícil el asunto porque los puentes están básicamente cortados, no hay interlocutores válidos de un lado y otro y hay una desorientación fenomenal en el país. Cuando llegan estas cosas hay que actuar con una gran frialdad y con inteligencia, tengo la impresión de que a esta altura se hace imprescindible convocar en consulta a Uruguay al embajador Bustillo para demostrarle a Argentina que todo tiene un límite, que Bustillo venga a Montevideo y haga el racconto de lo que está pasando allá. Es una señal inteligente y madura que se toma en el mundo diplomático como diciendo "estamos tomando las cosas más que en serio".
EC - ¿Qué más debe hacer el gobierno uruguayo?
WA - Debería enviar algún tipo de misiones ad hoc a los ámbitos internacionales. Uruguay no tiene otro medio para dar esta batalla que explicar y explicar y generar un gran ruido internacional sobre esta agresión que nos están instalando. Vamos derecho a un verano muy doloroso para gente que trabaja en el país, que invierte en el país, con bloqueos, ya se habla de las reposeras, vamos rumbo a un verano más que caliente. Lo peor que se podría hacer es simplemente montar en cólera como hizo el gabinete esta semana considerando improcedente la carta de Patiño Meyer. No se trata de enojos o estados de ánimo, el tema es sustancialmente importante para el país.
EC - Se resolvió devolver por improcedente la carta que vino de la embajada argentina a la Dirección Nacional de Medio Ambiente por la planta de Isusa en Soriano. ¿Para usted no es suficiente eso?
WA - Está bien, pero es una perla más en el collar. Además sobre Patiño Meyer no quiero ni opinar, es un funcionario que está desde hace tantos años en el país, que representó a tantos gobiernos argentinos que a esta altura... No perdamos el tiempo con ese embajador que no vale la pena, vamos a las cosas importantes, el lío con Argentina. Misiones ad hoc a los organismos internacionales, Uruguay tiene que hacer un gran sonido mandando gente que tenga peso y que se haga oír, la cancillería tiene embajadores de peso importantes que se saben hacer oír. Uruguay tiene que hacer oír su voz en diarios importantes de la región y del mundo.
Y por último, y central, el presidente tendrá que tomar cartas en el asunto. Me imagino que en la cumbre que se viene no se tomará esa foto protocolar de sonrisas con el presidente argentino, me imagino que no pasará eso cuando estamos en medio de un incendio de dimensiones mayúsculas. Definitivamente hay que hacer esos tres o cuatro movimientos con una gran convicción. El presidente, el gobierno, van a tener a todo Uruguay atrás porque, francamente, ese si no es el tema más importante es de los más importantes, da para preocuparse.
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Edición: Mauricio Erramuspe