Gestos de acercamiento entre Lula y Vázquez
La vista del presidente brasileño, Lula Da Silva, a Uruguay mostró un cambio en las relaciones entre ambos países. Un acercamiento, dijeron las autoridades. El siguiente informe de En Perspectiva repasa los dichos de los presidentes después de una reunión en la que, según el gobierno uruguayo, el país comenzó a recoger algunas de las cosas que viene reclamando hace meses para mejorar su presencia en el Mercosur.
(Emitido a las 7.33)
EMILIANO COTELO:
La reunión de ayer en la Estancia de Anchorena entre el presidente Tabaré Vázquez y su par brasileño Luiz Inácio Lula Da Silva venía precedida de una expectativa muy fuerte.
Pero, ¿qué novedades dejó el encuentro entre los dos presidentes? ¿Cuáles fueron los avances concretos en lo que respecta a las relaciones bilaterales entre ambos países y en lo que refiere al Mercosur? ¿Qué elementos quedaron pendientes?
Después de la reunión que mantuvieron mano a mano y después de la firma de los acuerdos entre los ministros, los dos mandatarios se presentaron ante la prensa para realizar dos declaraciones individuales, sin dejar espacio para las preguntas de los periodistas.
"Una profunda inflexión"
Teniendo en cuenta que Vázquez y Lula habían pasado varios meses mirándose de reojo e intercambiando gestos de frialdad, sorprendió la afirmación contundente que el presidente uruguayo soltó, casi al comienzo de su alocución: hoy, dijo, "se produce una profunda inflexión en el relacionamiento entre nuestros dos países".
Luego de plantear esa evaluación tan positiva de las conversaciones con Lula, Vázquez se explicó un poco más y destacó que Brasil había accedido a los reclamos que Uruguay ha venido haciendo para paliar los perjuicios que el Mercosur ha implicado para nuestro país y para que se compensen las asimetrías que hoy dominan este proceso de integración regional.
"TABARÉ VÁZQUEZ:
Uruguay lo dice con alegría, también lo decimos con una enorme modestia y humildad, ver reflejado en esta visita del señor presidente de Brasil y de su tan prestigiosa delegación, el reconocimiento que los planteos que hemos hecho en el seno de las reuniones del Mercosur, han encontrado -como sabíamos que iba a ser- un amplísimo eco en el presidente de Brasil, en el gobierno de Brasil".
Aludiendo a las concesiones brasileñas, Vázquez enfatizó que en los procesos de integración "los países de mayor economía, de mayor población, de mayor extensión geográfica" deben contemplar las asimetrías pero "no por dádiva, no por caridad, sino por justicia", para que todos los países vean "en los hechos concretos los frutos de un proceso de integración".
Según Vázquez, en esta visita Lula y sus ministros mostraron "la mejor comprensión para este planteo", pero además trajeron "respuestas concretas a la necesidad de trabajar complementariamente ambos países para lograr estos objetivos" en diversos ámbitos: en materia de energía, en la integración física, en el intercambio comercial, en el plano de la ciencia, de la tecnología y del conocimiento, en el apoyo al desarrollo de las comunicaciones.
Brasil asume su responsabilidad
A continuación habló el presidente brasileño, que realizó una intervención bastante más larga que la de su anfitrión: se extendió durante 18 minutos cuando Vázquez había hablado cinco minutos. Por lo visto, Lula necesitaba tiempo para detallar y subrayar las decisiones que su gobierno está impulsando para dar satisfacción a buena parte de las solicitudes uruguayas.
En ese sentido, empezó por aclarar que "la relación que Brasil pretende tener en el Mercosur, en América del Sur y en América Latina nunca será una relación de hegemonía sino una relación de socios...."
LUIZ INÁCIO LULA DA SILVA:
"Ya he dicho que públiamente la relación que Brasil pretende tener en el Mercousr, en América del Sur, en América Latina nunca será una relación de hegemonía sino una relación de sociedad en la que prevalece nuestra relación democrática".
Pero al mismo tiempo, se mostró más firme que en el pasado en cuanto al papel que le toca jugar a Brasil en la región.
Hizo autocrítica cuando reconoció que durante su primer período de gobierno no prestó suficiente atención al bloque. Explicó que para él esos primeros cuatro años habían sido un "aprendizaje" pero adelantó que ahora ya sabe dónde estaban los defectos de la política exterior brasileña y por lo tanto podrá "crear las condiciones" para "fortalecer" el proceso de integración.
Concretamente, sostuvo que "Brasil tiene que asumir su responsabilidad como la mayor economía del Mercosur" y, por tanto, "sin hacer ningún favor", su país "debe crear las condiciones para que (en la región) el comercio sea lo más equilibrado posible y para que el desarrollo también sea lo más equilibrado posible".
"LDS Vine aquí hoy para decirle al presidnete Tabaré, para dicerle a sus ministros y para decirle a los presidentes brasileños y a la prensa uruguaya y brasileña que Brasil tiene que asumir su responsabilidad como mayor economía del Mercosur y, por tanto, Brasil, sin hacer ningún favor precisa crear las condiciones para que el comercio sea el más equilibrado posible y para el desarrollo también sea el más equilibrado posible".
Volviendo sobre el mea culpa, Lula admitió que estas ideas se hablan "con mucha facilidad en el discurso" pero luego "en la práctica las cosas ocurren de forma mucho más lenta".
Sin embargo, insistió en que "si no hay una decisión de garantizar un equilibrio, no habrá Mercosur" y luego enfatizó en lo elemental que es esa necesidad de equilibrio, una condición sin la cual, por ejemplo, "tampoco es posible la Unión Europea" ni "será posible ningún acuerdo internacional".
"Los acuerdos son buenos cuando resultan beneficiosos para las dos partes", dijo en más de una ocasión el presidente Lula.
¿Y Estados Unidos?
Está claro que entre Vázquez y Lula hubo ayer una buena sintonía en cuanto al trabajo a desarrollar para compensar las asimetrías dentro del Mercosur. Recuerden esa frase que los dos emplearon: el país grande tiene que asumir su responsabilidad, tiene que realizar determinadas concesiones y facilidades pero, ambos usaron el mismo término, sin que eso implique "un favor".
En esa materia se concretaron avances evidentes, que los presidentes, además, subrayaron en sus discursos con palabras entusiastas y optimistas.
Pero en los últimos meses la relación entre Uruguay y Brasil (y, en general, entre Uruguay y el Mercosur) viene alterada por otro tema delicado: el reclamo de nuestro gobierno para negociar por sí solo acuerdos de profundización comercial con países ajenos al bloque, en particular con Estados Unidos.
¿Qué conversaron Vázquez y Lula en esta materia? Sólo Lula comentó públicamente sobre este tema en su discurso, pero no dejó del todo claro cuál era la conclusión.
"LDS - Es preciso que cada país cuide de sus intereses, teniendo en cuanta que tenemos reglas que nos obligan en tanto Mercosur a tener un determinado procedimiento pero sin por obstáculos a la libertad de cada país de hacer los negocios de acuerdo con los intereses sobreanos de cada país. Así es que Brasil negocia con China, así es que Brasil negocia con los Estados Unidos, así es que Brasil negocio con la Unión Europea, es así que Brasil negocia con Uruguay y Uruguay negocia con Brasil".
Así expresada, la posición de Brasil no parece implicar mayores avances: Uruguay, como cualquier país del bloque "tiene la libertad de hacer negocios según sus intereses soberanos" y en esa dirección, por ejemplo, podrá negociar con Estados Unidos pero "teniendo en cuenta que nosotros tenemos reglas que nos obligan en cuanto Mercosur a seguir un determinado procedimiento".
¿Qué significa eso en términos prácticos? ¿Es satisfactorio para Uruguay ese margen para negociar con terceros que Lula definió ayer?
Vázquez no se refirió a este punto en su disertación. Así que la única pista hay que buscarla en las declaraciones que formuló a la prensa el ministro de Economía, Danilo Astori. "Nosotros tenemos que seguir explorando la posibilidad de (alcanzar un acuerdo con Estados Unidos). Tenemos un tratado marco para seguir buscando esas posibilidades. Naturalmente tenemos que hacerlo compatible con nuestra pertenencia al Mercosur y de allí nuestra solicitud de mayor flexibilidad en la aplicación de las normas" del bloque, expresó el ministro de Economía.
Cuando los periodistas le preguntaron si Uruguay había logrado esa flexibilidad de Brasil para concretar un tratado de preferencias arancelarias con Estados Unidos, Astori se limitó a responder: "tenemos que seguir trabajando, todavía hay mucho para avanzar".