El gobierno decretó la esencialidad de los servicios
en los hospitales ocupados

Texto del comunicado del ministro de Salud Pública, Conrado Bonilla

MSP DECRETA SERVICIO ESENCIAL PARA PREVENIR UNA DESGRACIA

Desde que empezó este conflicto, este Ministro y todas sus jerarquías han sido pacientes y han llamado al diálogo permanentemente. Hemos ido buscando caminos en un entorno muy difícil para el presupuesto de Salud Pública. Exploramos así todas las posibilidades que nuestro presupuesto y el del país permiten, ofreciendo una salida viable, sensata, y cercana a las reivindicaciones de los funcionarios.

A pesar de ello se tomaron medidas extremas por parte de los funcionarios no médicos consistentes en la ocupación de los grandes hospitales de Montevideo con desplazamiento de sus directores y de sus gerentes. Estas instituciones quedaron bajo control gremial, con la vida de centenares de pacientes y millones de dólares en medicamentos y equipamientos en juego, sin que nadie asuma individualmente semejante responsabilidad.

Estas medidas gremiales son una suspensión unilateral del diálogo franco que estábamos manteniendo. No estamos dispuestos a que ocurra una desgracia para después tomar las medidas que marca la ley.

Mantenemos la vocación de diálogo, pero para el mismo es fundamental hacerlo con orden y con responsabilidad. Esta medida con estas características en un hospital del tamaño del Pereyra Rossell, es absolutamente imposible de que pueda realizarse sin que vaya en desmedro de las mínimas garantías de seguridad que debemos ofrecer a la población. A
nuestro entender se ha cometido un acto de intransigencia irresponsable, por lo tanto a la hora 14:00 hemos solicitado al Ministerio de Trabajo y Seguridad Social la declaración de Servicio Esencial en todos los hospitales ocupados.

Los funcionarios tienen derecho a la reivindicación salarial, pero hay que saber que esos derechos tienen límites, en la medida que su ejercicio pueda llegar a lesionar el derecho a la vida, la seguridad y la salud.

Respetaremos en un todo los criterios establecidos por el Comité de Libertad Sindical de la OIT en el sentido de que la declaración de esencialidad debe limitarse a las operaciones estrictamente necesarias, y estamos pidiéndole a los funcionarios en sus domicilios o personalmente, cumplir los turnos de emergencia que así soliciten los directores y jefes de servicios, o mantener los servicios mínimos a los efectos de no incurrir en acciones que pudiera tener en algunos casos, repercusión penal, disciplinaria o civil.

Este Ministerio sigue abierto al diálogo. No nos agrada tener que tomar estas medidas, pero la actitud de los funcionarios no médicos obliga a que el Ministerio retome sobre sí toda la responsabilidad que corresponde.

Dr. Conrado Bonilla
Ministro de Salud Pública