EMILIANO COTELO:
Señoras y señores, tengan ustedes muy buenas noches.
La Asociación Cristiana de Dirigentes de Empresa (ACDE) les
agradece tan buena respuesta a la invitación a este foro,
con el cual la institución retoma sus actividades públicas
correspondientes al año 2002.
Vamos a escuchar al economista Ricardo López Murphy en esta
conferencia a propósito de la situación política,
social y económica de la República Argentina. Les
recuerdo rápidamente la estructura del evento de hoy: la
disertación se extenderá aproximadamente por 45 minutos
y después abriremos un espacio de preguntas y respuestas,
para el cual en principio están previstos hasta 45 minutos.
Luego los invitaremos a compartir un brindis de despedida.
Invito al micrófono al señor presidente de ACDE,
arquitecto Gustavo Ortega.
GUSTAVO ORTEGA:
Economista Ricardo López Murphy, señores ministros,
señores legisladores, señores representantes del cuerpo
diplomático acreditados en nuestro país, señores
representantes de los organismos internacionales, autoridades nacionales,
señores representantes de las cámaras empresariales,
señores representantes del sector sindical, señoras
y señores.
Creo que el economista Ricardo López Murphy no se imagina
el revuelo que generó con dos temas, cuando estuvo con nosotros
el 2 de agosto del año pasado. Por un lado nos enseñó
un poco de historia a todos con el tema de Salamina y por otra parte
nos hacían estar prendidos del calendario a todos las fechas
que había puesto.
Desgraciadamente se verificó el peor de los escenarios que
él había previsto. Hoy lo traemos para que nos hable
de la no cultura, de la no civilización, de esa nueva civilización
que, como él bien había dicho, iba a empezar a regir
si pasaba lo que no queríamos que pasara en aquel momento.
En ACDE también estamos permanentemente muy preocupados
por algunos temas, que son los que tocó el economista López
Murphy el año pasado. Cuando el año pasado tuvimos
una serie de foros -los años anteriores también, desde
1997-, y comenzamos a tratar en profundidad el tema de la reforma
del Estado, trayendo en aquel momento, entre otros, a la doctora
Ruth Richardson por primera vez a Uruguay, quisimos empezar a tocar
un tema que en el ambiente nacional, por lo menos, no se estaba
tocando. Cuando asumió el actual presidente de la República
tangencialmente lo primero que hizo fue tocar el tema, cuando publicó
en Internet lo que ganaban algunos empleados públicos.
Eso hace que hoy por hoy nosotros también tengamos nuestra
Salamina, que hoy empecemos a tratar algunos temas de otra manera.
Por supuesto que vamos a seguir apoyando la lucha contra el contrabando,
la lucha contra la evasión fiscal y todo ese tipo de temas
nodulares para nuestra economía. Pero también vamos
a pelear cada día más, desde ACDE, por la reforma
del Estado. Nos congratulamos de que el tema se comience a tratar
ahora también a nivel del Poder Legislativo. Le pedimos al
Poder Legislativo que cuando esté tocando este tema, lo toque
por sobre todas las cosas manejando uno de los principios que más
manejamos en ACDE, que es el principio de equidad.
No es justo que un empleado público, más que un empleo,
compre un seguro de vida. No es justo para nuestros empleados, para
nuestras empresas, para nuestro país, que se está
preocupando por la competitividad, por abrir nuevos mercados. No
es justo que los señores legisladores o las autoridades aquí
presentes después tengan un seguro de desempleo mayor que
algunos empresarios o que los trabajadores de este país.
No es justo. Son temas de los que en ACDE estamos permanentemente
hablando, son las cosas de las que tenemos que empezar a hablar
en este país. Porque si el 90% de nuestro presupuesto es
dedicado a salarios, jubilaciones, pasividades, son también
privilegios en lo que tiene que ver con los salarios; también
está lo que tiene que ver con la deuda externa. Tenemos que
empezar a apretar como queremos apretar, pero tenemos que empezar
por donde realmente debemos.
En ese sentido, desde ACDE estamos pidiendo poder empezar a hablar
en forma justa. Porque como bien nos explicaba el economista López
Murphy, para llegar a Salamina hubo una persona como Leonidas y
300 espartanos que se sacrificaron. Si nuestro sistema político
no se sincera, si no tiene un Leonidas, alguien que pueda decir
"esto es por el bien del país"; no importa si Argentina
está bien o mal, si Brasil nos compra o no nos compra, el
problema que vamos a tener ahora es que directamente no vamos a
ser viables como país.
Es en ese sentido que lo que hoy desde ACDE les venimos a pedir
a todos ustedes es que luchemos para no perder nuestra Salamina.
Muchas gracias.
(Aplausos.)
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Transcripción: María Lila Ltaif
Edición: Mauricio Erramuspe
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