Radio en vivo


27.12.2002




























 


Visión sobre la situación de las reformas estructurales y las acciones previstas para 2003

Foto archivo

ARIEL DAVRIEUX:
Buenos días a todos. Como conocemos quienes vivimos en el país, el gran tema del año y la preocupación de todos estuvo en el área de la crisis financiera y bancaria. Y, en consecuencia, el tema que voy a tratar será de alguna manera un pequeño remanso en torno a esto. Me referiré a los temas habituales que trata Planeamiento, más de mediano y largo plazo. La idea central es lograr una economía que funcione más eficientemente, más que nada, en aquella parte en la cual el gobierno interviene: el área de servicios públicos. (La herramienta es el) mejor funcionamiento de las propias empresas públicas y de la apertura a la competencia en todas esas áreas, regulándola de acuerdo con la especificidad de los temas.

Entonces, hoy me referiré a qué ha venido pasando -de manera mucho menos visible- en el tema de reformas en el área del mercado de los servicios públicos y qué perspectivas tenemos para el año que se inicia en los próximos días.

A pesar de todos los problemas financieros que hemos enfrentado, el año se inició de hecho con una importante reforma estructural. Tan importante es que se está recogiendo firmas para su discusión.

El 4 de enero fue promulgada la ley que modifica o que permite que Ancap se asocie con un particular y que establece la derogación de los monopolios que tenía esa empresa en el área de hidrocarburos, inmediata en el área de refinación e importación de petróleo crudo y desfasada al año 2006 en materia de refinados. En todo caso, es una reforma que en caso de persistir -como pensamos que es conveniente para el país- trae un cambio muy importante en materia de suministro de energía.

Y el año cierra, también, con una reforma muy importante: el 13 de diciembre se completó la promulgación de la ley que crea la Unidad Regulatoria de los Servicios de Energía y Agua.

De esta forma, por lo menos en términos del gobierno actual, se cierra las necesidades de creaciones de unidades especiales regulatorias.

La actividad de regulación es propia del Estado en todas las áreas. El Ministerio de Salud Pública regula el área de la salud pública y privada; el Ministerio de Educación regula la Enseñanza; el Banco Central regula el sistema bancario, el de seguros, el de administradoras de ahorro. En el área del transporte, el Ministerio del ramo se encarga de la regulación del transporte carretero, de ferrocarriles, de la parte área y se ha creado -vista la posición general de eliminar monopolios, fuentes de ineficiencia en todas las áreas- unidades regulatorias. (Este proceso) se inició su planteo con la Ley 16.832 del año 97 que crea la URE, continúa con la ley de Presupuesto de principios de 2001 que establece la URSEC. La URSEA viene a cubrir toda el área de energía que no estaba cubierto por la URE, que era sólo la energía eléctrica. Esta se refiere a toda el área de energía cubriendo el gas, los combustibles líquidos, la energía eléctrica, los servicios de agua y de saneamiento, que hasta la fecha son regulados por el Ministerio de Vivienda, Ordenamiento Territorial y Medio Ambiente.

Este hecho significa un gran cambio que, en general, no es percibido por la población.

Nosotros todavía recibimos pedidos de informes que hablan de la importancia de UTE como regulador de la energía eléctrica o de OSE como regulador por excelencia del agua. Ni UTE ni OSE son reguladores. Son empresas suministradoras de determinados servicios. La actividad como se concibe normalmente en todo el mundo, es que la política en la materia la fija el Poder Ejecutivo, la regulación la ejercen organismos que en el Uruguay se ha elegido darles la forma de organismos desconcentrados del Poder Ejecutivo y las empresas públicas son prestadoras de servicios.

Cuando una empresa pública ejerce más de una de estas funciones, normalmente lo hace en beneficio propio y en detrimento de la posibilidad del desarrollo de actividades por otros.

Otro ejemplo de movimiento que ha ocurrido es que se introdujo cambios tan importantes como el hecho de separar la infraestructura de AFE de la empresa de transporte AFE. En este sentido se puede decir que se hizo casi calladamente. Con discusiones parlamentarias, por supuesto, pero no a nivel del tema de la situación monetaria, bancaria y financiera. Por una ley del año 2000, se permitía que empresas privadas pudieran circular por las vías de AFE; no hay ninguna circulando.

Bueno, en la nueva situación, AFE se convierte en una empresa de transporte que usará las vías como otras empresas y que, en lo posible y a corto plazo, deberá ser autofinanciada. AFE, en realidad hasta la fecha y desde siempre, se ocupa de todo: del transporte y del mantenimiento de la vía. Ha funcionado de tal forma que, a pesar de las transformaciones efectuadas, el 80% de su ingreso se ha pagado por impuestos, entre el 75 y el 80 -vamos a ser benévolos y que sea el 75. Pero entre el 75 y 80% de los gastos del organismo lo pagamos todos con impuestos y el 20-25% son los ingresos por la prestación de su actividad.

Lo que se persigue con esta ley y lo que se va a hacer a continuación, es lograr que la actividad ferrocarrilera se sustente a sí misma, haciendo la infraestructura de cargo del Ministerio de Transporte como lo son las carreteras en la actualidad. Y la regulación del uso de las vías férreas será responsabilidad del Estado, como lo es la regulación del uso de las carreteras o la regulación de las bandas de trasmisión de datos o radio-eléctrica, que son responsabilidades del Estado. Las empresas públicas y privadas trabajan sobre las carreteras de cemento, sobre las carreteras de rieles y sobre las carreteras de las ondas magnéticas.

Más allá que eso, en la misma Ley de Presupuesto también se autoriza la posible desvinculación total del Estado de la empresa Pluna S.A., autorizando la venta de las acciones propiedad del Estado. O sea, terminar el proceso de eliminación de la participación del Gobierno en la actividad de transporte aeronáutico.
Y con una Ley votada en la misma fecha, llamada Ley de Reactivación, son dos números muy parecidos, 17.555 y 17556, se autoriza a todo tipo de concesiones, aeropuertos, concesiones con iniciativa privada, concesiones para obras departamentales; se autoriza a la venta de la mega-concesión de la Corporación de Desarrollo, se autoriza la concesión de la explotación de los depósitos de arenas negras, abriendo así a toda la actividad privada un conjunto de sectores bien reservados para el Estado o tan reservados que no se hacen, tal como la explotación de las arenas negras.

En un nivel algo menor de importancia jurídica pero muy agotador en tiempo, entre los meses de junio y setiembre, se aprobaron los principales reglamentos referidos a transmisión, distribución, mercado mayorista eléctrico. Son decretos monumentales que, sin duda, por su complejidad requerirán cambios y algunas modificaciones, pero crean las condiciones para que el mercado eléctrico establecido por una Ley del 97, discutido a través del 98 por un posible referéndum, puedan comenzar a actuar.

Sin duda, estos temas son de gran discusión nacional y en el mundo por la importancia sobre la concepción del mundo, del país que tienen. Y ha habido retrocesos. Los artículos 612 y 613 de la Ley de Presupuesto que liberalizaban el mercado de llamadas de larga distancia internacional, fueron derogados a principios de agosto de este año. Pero, antes que eso ocurriera, se habían concedido 18 licencias para empresas de transmisión de larga distancia internacional que es un número más que suficiente para que en el mercado uruguayo se ejerza la competencia y así se ha visto la reducción de precios. Y así ha sufrido ANTEL la caída de sus ingresos; y así le ha pasado al Estado, la reducción de los ingresos que percibía de ANTEL. Pero, ese reflejo que se ve por la introducción de competencia que mejora las condiciones para otras actividades que utilizan los servicios públicos podrá verse reflejado en las otras áreas, en la medida que ocurra una introducción de competencia en actividades tales como los combustibles, como el gas, como la competencia gas-electricidad- combustible que, sin duda, será muy fuerte en los próximos años.

Además de estos proyectos realmente aprobados, también en el mes de mayo fue presentado un proyecto sobre un marco regulatorio para el suministro de gas que todavía no ha sido considerado por el Parlamento. Pensamos que es de suma importancia, ya que la llegada del gas por el Sur lo convertirá en un combustible sustitutivo en distintas áreas. Esto nos va a crear naturalmente a quienes trabajamos en el Estado complicaciones en materia tributaria, en materia de competencia entre productos sustitutivos, pero que se va a hacer muy fuerte a partir del año 2003.

Alguno puede pensar que estas bases son más que nada un progreso manuscrito. Se aprobó leyes, decretos y se está en condiciones de una acción bastante importante, rápida a partir del comienzo del año que se inicia dentro de pocos días.

Por un lado, como señalara el Presidente del Banco Central se ha transformado el Banco Hipotecario, de una Institución que operaba en una moneda y prestaba en otra, en una Institución financiera más limitada, que en el futuro trabajará sólo con depósitos de ahorro y crédito, en una escala más limitada, lo que requiere una rápida reconversión del Banco, que, sin duda, se iniciará en los próximos días.

En otra área, la de los ferrocarriles, está todo pronto para la transformación total de AFE en la empresa de transporte de carga únicamente, haciéndose cargo el Ministerio de Transporte tanto del mantenimiento de la infraestructura como de la regulación de la circulación de distintas empresas que puedan aspirar a funcionar sobre dichas vías.

En otro sentido, a fin de este año, también se terminó realizando la licitación para bandas celulares. Lamentablemente, el momento no era el más adecuado, pero la empresa que estaba en funcionamiento ya con un arrendamiento con ANTEL, se presentó, adquirió bandas y pasa a trabajar sobre una base de licencia y no como una especie de socio menor de la empresa pública. La idea es que esta empresa -u otras que luego se puedan convocar para trabajar en bandas celulares- trabajen en competencia. Esto se va a poder percibir más acentuadamente a partir del año próximo.

Son necesarias medidas de gobierno relacionadas con el perfeccionamiento de los marcos regulatorios. Habrá que aprobar y estar puestos a consideración de los interesados, de las empresas, entre ellas de UTE por ejemplo, los reglamentos de calidad de energía eléctrica, el cálculo del valor agregado de distribución para calcular lo que se va a cobrar por la distribución, lo que impone y ha impuesto, y ya lo ha hecho UTE, la separación de su contabilidad en sus distintas áreas de generación, transmisión y distribución de energía eléctrica.

Eso pasa también en el área de ANCAP, que trabaja en refinación y distribución de combustible. Será necesario separar sus costos para que la competencia sea transparente y puedan estar sujetos justamente a la regulación que impondrá la recientemente creada URSEA.

Es necesario el establecimiento de la entidad paraestatal creada por la ley de 1997, la Administradora del Mercado Mayorista Eléctrico, para que puedan comenzar a funcionar efectivamente los contratos con el exterior que puedan realizar las empresas y que puede realizar UTE para el abastecimiento de energía en condiciones más favorables para el país.

Es necesario que la autoridad para concesionar servicios públicos pase a las unidades regulatorias, no sea de las empresas. Es decir que cuando una empresa eléctrica se instale, no tenga que pedir autorización a UTE sino a la URSEA que se acaba de crear. Las empresas que trabajen en el área de agua y saneamiento trabajarán con la URSEA y no con OSE; las que trabajan en el área de las comunicaciones trabajarán con la URSEC y no con ANTEL; las que trabajen en el área de servicios postales trabajarán con la URSEC y no con la Administración Nacional de Correos.

Todo eso requiere cambios que se enfrentarán y que son deberes que se van a ejecutar, en lo posible, en los próximos tres meses. O sea, en el Gobierno no habrá verano, como está pasando hace ya varios años, a veces por necesidad y otras por necesidad de hacer todas las cosas que precisa hacer el país en el corto plazo.

Y aún nos quedan varias cosas que hacer en el marco legal. La mayor parte de las normas necesarias para funcionar y para modernizar el país están dictadas. Pero siempre nos queda algo por mejorar.

Tenemos el marco regulatorio del gas, presentado en mayo, entiendo que está en la Comisión de Industria y Energía de la Cámara de Diputados. Debemos presentar un marco regulatorio para el área de agua y saneamiento. Tenemos un anteproyecto preparado que vamos a terminar de considerar con el Ministerio de Vivienda. Tenemos que preparar un marco regulatorio para salir del régimen de contratos de ANCAP para toda la parte de distribución de energía y para fijar pautas generales a la intervención de otras empresas que deseen hacerlo. Es necesario establecer un marco regulatorio -no hemos determinado todavía si lo haremos por decreto o por ley- para todo el mercado de los servicios postales. Este está siendo uno de los temas tratados y me decían que hoy mismo está en la prensa. Se discute hasta dónde llegar.

Esto nos impone una cantidad de tareas que, bajo las indicaciones del presidente de la República, será el tema principal al cual vamos a dedicarnos en los próximos meses y que aspiramos a darle un impulso decisivo. No quería decir nada más que eso, para anunciar el área dónde trabajará el Gobierno en la materia de cambios, en las reformas estructurales en los mercados de servicios públicos.

Nada más, muchas gracias".

Transcripción: Sepredi
Edición: Mauricio Erramuspe



En perspectiva
l Dinámica Rural l Deportes l Página principal

Para escuchar la radio en vivo necesita el Real Player
Optimizado para Internet Explorer a 800x600
Copyright Espectador.com All Rights Reserved