El aspartamo es seguro para el consumo humano
Una reciente investigación confirma que el aspartamo es seguro para el consumo humano. Así concluyó la Autoridad Europea de Seguridad Alimentaria (AESA o EFSA por su sigla en inglés) en su primera evaluación del riesgo de dicho edulcorante.
Para llevar a cabo esta evaluación, la EFSA examinó rigurosamente todos los trabajos de investigación científica disponibles sobre el aspartamo y sus componentes, incluidos estudios realizados en animales y seres humanos.
"Este dictamen constituye una de las evaluaciones de riesgo del aspartamo más exhaustivas jamás realizadas. Se trata de un gran paso para reafirmar la confianza del consumidor en el rigor científico del sistema de seguridad alimentaria de la Unión Europea y en la reglamentación de los aditivos de los alimentos", señaló la Dra. Alicja Mortensen, Presidente del Comité sobre Aditivos Alimentarios y Fuentes Nutricionales Agregadas a los Alimentos (Comité ANS por su sigla en inglés).
Expertos del Comité ANS consideraron toda la información disponible y, tras un análisis, llegaron a la conclusión de que la ingesta diaria admisible (IDA) de 40 mg por kilo de peso corporal por día es segura para la población en general.
Sin embargo, la IDA no es aplicable a aquellos pacientes que sufren una enfermedad llamada fenil cetonuria (FCU), ya que deben seguir una dieta estricta baja en fenilalanina (un aminoácido de las proteínas).
Tras una revisión exhaustiva de las pruebas aportadas por los estudios tanto en animales como en seres humanos, los expertos descartaron el posible riesgo de que el aspartamo cause daño a los genes o provoque cáncer.
Los expertos de la EFSA llegaron además a la conclusión de que el aspartamo no daña el cerebro ni el sistema nervioso, y que tampoco afecta la conducta ni la función cognitiva de niños y adultos.
Con respecto al embarazo, el Comité señaló que la exposición a la fenilalanina derivada del aspartamo no implicaba riesgo alguno para el feto en desarrollo al valor de IDA actual (salvo en mujeres que padezcan FCU).
En el dictamen se deja en claro que los componentes del aspartamo (fenilalanina, metanol y ácido aspártico) también están naturalmente presentes en otros alimentos (por ejemplo, el metanol se encuentra en la fruta y las verduras). Es bajo el nivel de incidencia de los componentes del aspartamo en la exposición general a estas sustancias en la dieta.
Dado que el aspartamo se descompone rápida y completamente en el aparato digestivo, todo efecto que se observe en el organismo tras la ingesta de aspartamo será causado por uno o más de sus tres componentes: el ácido aspártico, la fenilalanina o el metanol.
En el dictamen científico de la EFSA, se analizan los posibles riesgos asociados a los tres componentes y se llega a la conclusión de que no plantean riesgos de seguridad a los niveles actuales de exposición.