Alteración congénita

Pie bot: tabaquismo incide en aumento de la anomalía

Pie bot: tabaquismo incide en aumento de la anomalía

El pie bot o pie zambo, es una alteración congénita de los miembros inferiores del cuerpo humano cuyas causas parecen ser multifactoriales, sin embargo, estudios médicos presentados últimamente hablan de la incidencia del tabaquismo como una forma de aumentar el riesgo de esta anomalía.

Lo más notorio de esta afectación es un visible giro de los pies hacia la parte interna del cuerpo. Según los especialistas Uruguay presenta un caso de pie bot en cada 1000 nacidos.

Si bien la causa de esta mal deformación se desconoce, las investigaciones recientes pudieron comprobar que suele ser mas frecuente en varones y mayor aun si la madre es fumadora.

En estos niños se observa un menor desarrollo muscular de las pantorrillas afectadas y huesos rotados.

Según el doctor Rafael Decuadro, pediatra del Suat, todos los casos son distintos entre si, y el tratamiento debe iniciarse lo antes posible.

"Tiene una gama de formas de presentación que van desde forma muy leves hasta formas más importantes, en el cual el diagnóstico es muy sencillo. Lo que es más difícil darse cuenta es de los casos que no son tan claros. Cuanto se empiece (el tratamiento) mejor son los resultados", afirmó Decuadro.

Las alteraciones no provocan dolor, y en cuanto a la evolución de la anomalía, si no se trata a tiempo, es decir al empezar las primeras caminatas del niño puede ser tarde.

"No depende solamente de que el tratamiento se empiece en tiempo y forma, sino que muchas veces como todo tratamiento crónico y que tiene sus dificultades porque implica el uso de yeso y calzados especiales también va mucho en el cumplimiento estricto que se haga. Muchas veces pasa que al producirse resultados bastante satisfactorios al principio después como que aflojamos los controles y las cosas se empiezan a complicar", expresó Decuadro.

Los tratamientos varían dependiendo el caso particular, pero si hay ciertos métodos terapéuticos comunes que permiten la corrección de la anomalía.

"La gran mayoría de las veces si el tratamiento se empieza bien precoz se hace manipulación para ir aflojando las articulaciones y después se van utilizando célula de yeso y calzado especial que mantienen el pie en su forma normal para que en el crecimiento el pie vaya adoptando la forma lo más parecido posible a un pie normal. En algunos casos puede haber necesidad de recurrir a cirugía", estableció Decuadro.

La importancia radica en un diagnóstico oportuno y precoz. En caso que se observe si existe alguna duda en la posición de los pies de un bebe, la consulta temprana con el pediatra asignado asegura una solución eficaz explicó el profesional.