Uruguay activó protocolo contra el ébola para tropas en Congo
Los 1.300 efectivos del Ejército de Uruguay que forman parte de la misión de paz de las Naciones Unidas en la República Democrática del Congo asumieron un protocolo especial para evitar contraer el ébola, así como contagiarlo a su llegada a su país de origen, informó hoy el Ministerio de Defensa.
Entre las medidas que incluye este plan se encuentra la de no consumir alimentos que no hayan sido proporcionados por la ONU, la de disminuir el "contacto íntimo" con la población local o la de intensificar las medidas de limpieza y aseo personal, destacó hoy en una rueda de prensa el subsecretario del Ministerio de Defensa, Jorge Menéndez.
El protocolo también desaconseja el contacto directo con animales domésticos o el extremar las precauciones a la hora de manipular cualquier alimento, precisó.
El Gobierno uruguayo estableció un plan por el cual se someterá al personal que regrese a Uruguay procedente de las zonas de riesgo a un reconocimiento médico, a una entrevista personal y a una cuarentena de 21 días para evitar la posible propagación del virus.
Este procedimiento se aplicará a las tropas que retornen a Uruguay tras el reemplazo que se realizará entre febrero y marzo de 2015, siempre siguiendo las directrices que marque la Organización Mundial de la Salud (OMS), afirmó.
Menéndez aclaró que los casos de la cepa de ébola que está afectando a países como Liberia, Nigeria y Sierra Leona se corresponden a otra cepa a los que se han detectado en República Democrática del Congo en los últimos tiempos.
Expuso, asimismo, que esta enfermedad fue detectada por primera vez en este país (antiguo Zaire, 1976) y que los últimos casos de los que se tiene evidencia se registraron el pasado 26 de agosto, cuando un cazador y su familia comieron carne de un animal salvaje infectada por el virus.
Este hecho, no obstante, ocurrió en una zona alejada de los lugares en los que se encuentran las tropas uruguayas, apuntó.
Los soldados uruguayos están desplegados en las ciudades de Pinga, Kitchanga y Goma, en la República Democrática del Congo, donde su misión es proteger a la sociedad civil y facilitar sus condiciones de vida.
Fuente: EFE.