Un total de 38 personas que estuvieron en contacto con el paciente, que comenzó a mostrar síntomas el 21 de mayo, están en observación (entre ellas su esposa y personal médico), mientras que la Organización Mundial de la Salud (OMS) fue informada del caso.

La OMS confirmó posteriormente el caso y añadió que el hombre se encuentra aislado en un hospital de Huizhou, en Cantón, y que entienden que "se encuentra en condición estable y está siendo bien atendido", según un comunicado.

El organismo añadió que el Gobierno chino ha actuado con diligencia tras la inicial notificación de Corea del Sur sobre el viaje del paciente a China a comienzos de semana, y subrayó que las autoridades locales y las de Hong Kong están identificando a todos los que han tenido contacto con él.

Además, la Comisión para la Planificación Familiar y de Salud de Cantón envió un equipo experto a Huizhou para realizar una investigación epidemiológica.

Corea del Sur confirmó hoy otros dos nuevos casos de MERS-CoV, lo que eleva a nueve el total y ha disparado los temores a una posible propagación más amplia de la enfermedad.

Antes de la confirmación del caso en China, la ciudad de Pekín ya anunció que pondrá en marcha medidas especiales de prevención ante la posible expansión de esta enfermedad, cuyos primeros casos se registraron en Arabia Saudí en 2012 y que preocupa a las autoridades sanitarias por su alto índice de mortalidad (más del 40 por ciento).

Hasta el momento no hay vacunas ni tratamientos especializados para el nuevo coronavirus, que también ha causado cierta alarma en la vecina Corea del Sur, cuyo primer caso diagnosticado fue una persona que viajó a Oriente Medio.

El MERS-CoV, que tuvo su punto álgido hace aproximadamente un año en varios países de Oriente Medio, no puede ser combatido con vacunas o tratamientos, aunque su contagio tampoco es fácil y requiere un contacto muy directo, según la OMS.

Desde que fuera detectado el primer caso en 2012 en Arabia Saudí, 1.142 personas en 23 países han sido confirmadas como portadoras del MERS-CoV. EFE