Desfibrilador implantable que salva vidas, pero pocos usan
Un estudio demuestra que el desfibrilador implantable es muy beneficioso para los que han sufrido un ataque cardíaco, pero muy pocos lo usan.
El defibrilador cardioversor implantable, o DCI, es insertado bajo la piel y, en el evento de una disrupción en el ritmo cardíaco, envía una carga eléctrica propicia, para que el corazón regrese a su paso normal.
Sin embargo, un nuevo estudio, publicado en la prestigiosa revista de la Asociación Médica Estadounidense, señala que este aparato salvador, es utilizado en muy pocas ocasiones.
Los científicos de la Universidad de Duke observaron data sobre 10 mil pacientes de ataques cardíacos entre 2007 y 2010, quienes se han beneficiado de los DCI.
De este grupo, encontraron que menos de uno, de cada 10, realmente recibió un DCI durante el primer año después del ataque al corazón.
Como las investigaciones anteriores muestran que los DCI reducen la cantidad de muertes, hasta en un 36%, los científicos alertan de que los médicos pueden estar perdiendo una enorme oportunidad.