El plan está enmarcado en la Semana Mundial de Concientización sobre el Uso de Antibióticos e involucra a los ministerios de Salud Pública, Medio Ambiente y Ganadería Agricultura y Pesca.

Las acciones concretas de cada ministerio son controlar el uso de medicamentos, monitorear la calidad del agua en playas y vertederos, y regular el uso de medicación en animales y químicos en la producción alimenticia.

La presentación se realizó en la Torre Ejecutiva, estuvieron presentes el ministro de Salud Pública, Jorge Basso; la ministra de Vivienda, Ordenamiento Territorial y Medio Ambiente, Eneida de León; el ministro de Ganadería, Agricultura y Pesca, Enzo Benech, y Roberto Salvatella en representación de la Organización Panamericana de la Salud (OPS) y Organización Mundial de la Salud (OMS).

Salvatella informó que la Organización Mundial de la Salud busca abordar el fenómeno biológico que se manifiesta en la resistencia a las sustancias antimicrobianas, con consecuencias directas en los tres órdenes mencionados.

Por su parte, De León subrayó que desde el punto de vista ambiental se trabaja en la meta geonómica, que permite ver a través de estudios ambientales por qué razón se da la aparición de microorganismos patógenos resistentes a los antibióticos.

Enzo Benech, remarcó la transversalidad social del problema, y el rol que tiene su cartera en los sistemas productivos de carne, leche y lana, ya que utilizan medicamentos y antibióticos para garantizar la salud de los animales, y enfatizó en la incidencia del fenómeno en la cadena alimenticia por el uso de químicos y pesticidas.

En tanto, Basso estableció que se trata de un problema global vinculado a la identificación de agentes infecciosos, que obligan a utilizar medicamentos más fuertes con distintas consecuencias para la salud, y agregó incluso, que en países desarrollados la problemática influyó en la reducción de la expectativa de vida.

El jerarca de Salud, valoró la política transversal y articulada de las distintas carteras del gobierno por que promocionan "una salud", como lo recomienda la OPS y la OMS.

Concluyó que la instancia busca concientizar sobre un problema global y promover la capacitación de personas que trabajan en la salud, el medioambiente, y en las cadenas de producción, pero también persigue sensibilizar a la ciudadanía, que debe ser responsable en el uso de medicamentos sin prescripción. EFE