Los mecanismos que se utilizan son cuestionados por parlamentarios dados las posibles faltas éticas y lesiones a los derechos personales de los postulantes. Las interrogantes personales y los test psocológicos podrían violar la privacidad de los entrevistados. Algunos cuestionarios tratan temas no relevantes a la tarea a ejercer. Esperan que la investigación no revele malas intenciones y la práctica no requiera otra regulación.