Entrevistas

Cifras demuestran que la emigración continúa

Las cifras de ingresos y egresos del Aeropuerto de Carrrasco muestran que entre enero y octubre unos 20.000 uruguayos salieron del país y no volvieron. "La emigración se ha instalado como un factor estructural", explicó la demógrafa Adela Pellegrino. Dijo que si bien hay causas internas, la competencia de los países centrales por los migrantes calificados es muy fuerte. "La gente trata de no emigrar. Entonces hacer políticas para que los jóvenes tengan ganas de quedarse es lo fundamental", afirmó.

(Emitido a las 8.48)

ANDRÉS GIL:
La información no es nueva, pero la acumulación de datos, la confirmación resulta desgarradora. Según información del Ministerio del Interior que maneja Búsqueda, al 31 de octubre ingresaron por el aeropuerto de Carrasco 202.667 ciudadanos y egresaron 224.957 uruguayos. Esto arroja un saldo negativo de 22.290 uruguayos que permanecen en el exterior.

JOSÉ IRAZÁBAL:
Las últimas cifras de la Dirección Nacional de Migraciones confirman que el país sigue asistiendo a un empuje migratorio similar al que precedió a la crisis de 2002. A octubre de 2007 el saldo negativo que resulta de los uruguayos que salieron e ingresaron al país anda en las 22.000 personas, según los datos oficiales.

FERNANDO ROSENBLATT:
Para los expertos, el año cerrará con un saldo migratorio negativo superior a 21.000 personas, lo que lo ubica a un nivel muy similar al del año 2001, cuando emigraron 20.369 uruguayos. Los demógrafos advierten que la tendencia a emigrar ya no depende tanto de la situación económica como de las políticas de migración de los países desarrollados.

AG - Es todo un tema, me llama la atención, no es bueno cerrarnos a que son solo factores exógenos. No sé cuál es la responsabilidad, no sé por qué es –debería ser estudiado a fondo–, pero lo cierto es que estamos sumergidos en una tendencia que nos sumerge, sumerge al país, porque significa la fuga de nuestros mejores valores.

Estamos en contacto con la doctora Adela Pellegrino, profesora de Ciencias Sociales, ex directora del Programa de Población en la Facultad de Ciencias Sociales.

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Doctora Pelegrino, ¿comparte esa preocupación que comentábamos aquí en cuanto a que son números realmente alarmantes?

ADELA PELLEGRINO:
Sí. Pero el año todavía no terminó, hay que esperar un poco para evaluar bien lo que pasa. De todas maneras, lo que sabemos es que la emigración continúa. Los datos que tenemos son una indicación, no tenemos datos precisos porque nadie se registra cuando emigra.

AG - Una vieja deuda de los registros en Uruguay.

AP - Es muy difícil tener esos datos. El Instituto Nacional de Estadística (INE) hizo una encuesta en el año 2006 en la que hay mucha información sobre los emigrantes. Pero día a día y año a año es muy difícil tener esa información.

De todas maneras, el saldo por el Aeropuerto de Carrasco es un indicio interesante, pero el año no terminó y es importante cerrar un año, porque hay salidas y entradas que son diferentes mes a mes. De todas maneras, podemos decir que la emigración continúa.

FR - Más allá de los números, llama la atención lo que usted señalaba, que el fenómeno continúa. Y por otro lado, en la nota en Búsqueda se señala que algunos expertos demógrafos manejan que ya no depende tanto de la situación económica coyuntural como de factores exógenos, de las políticas migratorias de los países desarrollados. ¿Cómo ve esto?

AP - La emigración tiene muchas causas. Es cierto que se agudizó cuando la crisis, pero desde 1960 tenemos un saldo intercensal negativo. Quiere decir que la emigración se ha instalado como un factor estructural. Tenemos colonias ya muy organizadas, hay redes, los migrantes –lo sabíamos por la encuesta– tienen amigos y familiares en el exterior que los ayudan en su migración.

FR - Ofician de red y bajan el costo de migrar.

AP - Sí, y las políticas ayudan. Por un lado hay limitación al ingreso de uruguayos, de inmigrantes en general, pero hay posibilidades de incorporar migrantes con especializaciones. La migración calificada no tiene tantas dificultades como la no calificada. Y ahora esta decisión de España va a ayudar mucho a que la gente emigre, porque ingresar con la nacionalidad es un factor muy positivo para un migrante, no tiene que pasar por ese período terrible de ilegalidad.

FR - Antes de meternos en esta decisión que anunció Zapatero, ¿ha habido un cambio en el tipo de migrante en estos años? ¿El emigrante uruguayo cambió entre 2002 y 2006? Usted decía que para el emigrante especializado, para la mano de obra calificada ya no es tan difícil como hace algunos años.

AP - No, nunca lo fue, pero ahora se intensifican programas específicos para calificados. Y no solo en España. Estados Unidos siempre tuvo preferencias importantes para el ingreso de ciertas especializaciones, y en los países europeos también hay políticas orientadas a los migrantes calificados. Ahora, por ejemplo, hay mucha demanda de médicos y enfermeras en muchos países. A veces hay políticas que no son generales pero se expiden contratos para médicos, por ejemplo, en algunas provincias o en algunas regiones de España. Y eso también pasa en otros países europeos, antes había muchos contratos para las personas que trabajan en comunicaciones. Esos temas facilitan la emigración y nos hacen la vida más compleja a nosotros, porque en general la gente que ellos demandan es la que nosotros demandaríamos. Es un tema difícil, hay que pensar en políticas interesantes para eso.

JI - Usted mencionaba como un factor importante las facilidades que se dan en determinados países para el ingreso. Me gustaría profundizar en la medida que ha anunciado el gobierno español de otorgar nacionalidad automática a los nietos de españoles. ¿Cómo ve ese panorama?

AP - Eso no tuvo influencia en este año 2007, es un proyecto que va a ser efectivo pronto. Va a tener consecuencias importantes, no tenemos información de cuántos podrían ser los candidatos a emigrar con la nacionalidad de los abuelos, pero seguramente es un número importante. No todos van a emigrar, pero tienen la posibilidad de hacerlo por un camino fácil.

AG - Preocupa el hecho de que se haga un diagnóstico tan apoyado en factores exógenos. No porque no sea fiel a la realidad, sino porque nos lleva a pensar que tenemos que resignarnos a la sangría. ¿Cómo es esto?

AP - Las causas internas son importantes, en general la gente trata de no emigrar. Entonces hacer políticas para que los jóvenes tengan ganas de quedarse es lo fundamental. También es cierto que tenemos una competencia muy importante para los migrantes calificados y ahora también para los que tienen la posibilidad de ingresar con papeles. Es una facilitación importante para la emigración. No voy a decir que no hay causas internas, pero ayuda mucho. En la encuesta del INE pudimos observar cómo con la medida de la embajada de Estados Unidos que puso dificultades para el ingreso de los turistas la migración se cerró. De modo que las políticas de los países de recepción también son una causa importante.

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Edición: Mauricio Erramuspe