Entrevistas

Cardal tras seis meses del Plan Ceibal

Cardal tras seis meses del Plan Ceibal

Entusiasmo. Motivación. Curiosidad. Sorpresa. El Plan Ceibal ha despertado muchas reacciones en Cardal. Ya lleva seis meses y la experiencia de que cada niño de la escuela tenga una computadora revolucionó el pueblo, según el relato de la maestra Hanía Villanueva. "Primero lo vimos como una traba, pero después nos dimos cuenta de que era importantísimo que el niño explorara, descubriera por sí solo. De todas maneras, la parte didáctica siempre le corresponde al maestro, que sabe de qué manera la máquina va a influir en los aprendizajes. No queremos formar técnicos en computación, queremos que la máquina mejore los aprendizajes".

(Emitido a las 9.14)

ANDRÉS GIL:
"cardal-ceibal.blogspot.com"

¿Cómo definirlo? Se me ocurre "una ventana al mundo". O, capaz, simplemente "una puerta abierta al futuro".

"cardal-ceibal.blogspot.com" es la dirección del blog, de esta bitácora colectiva que los niños de la Escuela Italia, de Villa Cardal, han venido desarrollado en internet desde hace ya algunas semanas.

Recordemos, Cardal es el pueblito de Florida que se embarcó (hace seis meses ya) en este "viaje" que significa ser la experiencia piloto del Plan Ceibal, o la versión uruguaya de "un computador por niño".

Un camino que, por ejemplo, ahora los llevó a avanzar hacia una de las modalidades de comunicación más usadas hoy en la red: el blog.

Les propongo ir esta mañana a Cardal, a la capital de la cuenca lechera, para hablar un poco del futuro. Pero del futuro, hoy.

Estamos con Hanía Villanueva, maestra de cuarto año de la escuela Italia, número 24, de Cardal.

***

Hanaía, un viernes especial, los encontramos en pleno inicio de la "fiesta de la leche", todo un acontecimiento para Cardal.

HANÍA VILLANUEVA:
Sí, está muy revolucionado el pueblo, hay mucho movimiento, fuera de lo común. Están muy entusiasmados.

AG - ¿Es diferente la fiesta este año, teniendo en cuenta que es la primera que encuentra al pueblo embarcado en el Plan Ceibal?

HV - Este año quizás sea diferente, ya que también la comunidad sufrió un impacto importante desde que llegaron las máquinas. Los niños de la escuela van a tener su espacio en un stand para mostrarle al público lo que están haciendo.

AG - Supongo que también nos van a mostrar al resto del país qué es lo pasó ahí, a través de fotos, videos, etcétera.

HV - Por supuesto, hay un montón de niños dispuestos a hacer entrevistas. Va a haber muchos periodistas infantiles aquí.

AG - De hecho, me enteré de que van a organizar el segundo arroz con leche gigante.

HV - Sí, se hizo el año pasado para entrar en el libro Guiness, pero faltaron algunos papeles previos. Este año vamos a hacer todos los trámites y va a ser un arroz con leche gigante igual al del año pasado.

AG - Según nuestros informantes, tú te has involucrado muchísimo en todo este proceso del Plan Ceibal en Villa Cardal. Sin desmerecer el papel de nadie, por supuesto. ¿Por qué te consustanciaste tanto con el proyecto?

HV - Sí, me entusiasmé, vi el entusiasmo de los niños, ellos trasmiten ese deseo, esas ganas de lo nuevo. Además es una villa con pocos habitantes, son unos 1.200, y eran muy pocos los hogares con computadora, que ellos pudieran acceder a este medio. Entonces nos pareció que era una herramienta que les iba a dar la posibilidad a todos los niños de interactuar con ella, de tenerla en la clase y en la casa para ampliar información. Quizás trabajan de otra manera, más motivados. Han cambiado muchas cosas, los maestros, sobre todo los que tenemos algunos años de trabajo, hemos tenido que adaptarnos al cambio, no ha sido fácil.

AG - Tú tienes 45 años. ¿Habías tenido contacto con computadoras? ¿Te manejabas bien?

HV - No, yo era bastante negativa, no tenía mucho trato con las computadoras.

AG - ¿Tenías cierta aversión a las computadoras? ¿O no te manejabas bien?

HV - No me manejaba mucho. Los jóvenes aprenden más rápido todo lo que es tecnología, a la gente un poco mayor nos cuesta algo más. Me costaba un poco el manejo de la computadora, pero hemos tenido que aprender junto con los niños. Además el sistema de estas máquinas es totalmente diferente del Windows, es distinto, no tiene nada que ver con las computadoras convencionales.

AG - Antes de seguir quiero mandarle saludos a "Virginia, que es peluquera, que tiene una perra dálmata que se llama Catalina", que es la tía de Agustina Peraza,        una alumna de segundo año de la escuela, a quien conocí a través de una foto que Agustina publicó en el blog de la escuela. Un ejemplo, nada más, de cómo los niños se comunican con el mundo por esta vía.

¿Cómo se llevan los niños con la experiencia del blog?

HV - A los niños al principio les parecía que en internet iban a encontrar todo, que toda la información que necesitaban estaba allí. Nosotros hemos tratado de hacerles ver que es importante complementar diferentes fuentes, porque los cuadernos, los lápices, los libros no se han dejado de lado. Los niños de cuarto año están haciendo un blog que se llama "Infoescolar cuarto", que es una especie de periódico digital donde cuentan la historia del pueblo, para revalorizarlo y presentarlo al mundo.

Estábamos buscando datos de la población de los últimos años y enseguida me dijeron "en internet, maestra, en internet". Buscamos y no encontramos el dato, entonces los niños salieron al pueblo, hicieron sus propias investigaciones, fueron a la comisaría local y por intermedio de la comisaría y por un fax de la Jefatura de Policía de Florida consiguieron esa información. Fueron ellos que pusieron la información en internet. De modo que además de buscar, los niños producen información; a los maestros nos gusta más que puedan producir.

AG - ¿Todas las clases tienen su blog?

HV - Todas. Algunos comenzaron antes, otros se están incorporando recién ahora. Al principio comenzamos con un blog experimental de toda la escuela, donde se ponían nada más que fotos. Luego vimos que no podíamos quedarnos en eso, entonces cada clase tiene su blog, con aristas diferentes, cada uno con un tema diferente a tratar. Después te paso las direcciones para que nos visiten.

AG - Contanos qué tipo de contenidos han publicado.

HV - El de cuarto año, que fue el primero que se subió a esto del blog, es un periódico del pueblo, tiene todo lo que sucede en el pueblo, lo que a los niños les parece interesante. Y también edificios, porque el pueblo tiene entre 100 y 120 años, entonces están todos los edificios de 100 años que encierran una historia, cuentan cómo se crearon, qué función tenían antes, qué función cumplen ahora.

El de quinto año tiene un contenido curricular, todo lo que se trabaja en clase y les parece interesante y los trabajos de los niños se publican en el blog.

Sexto año está haciendo un blog más bien de producción de cuentos, adivinanzas, chistes que surgen de los niños.

Primero, segundo y tercero, como recién comienzan, tienen muy pequeñas intervenciones, pero por su edad son muy importantes también.

AG - Y muy divertidas algunas. Las estuvimos repasando.

HV - Están de acuerdo con la edad de cada niño.

AG - Más en general, ya llevamos casi seis meses de la puesta en marcha de este plan piloto. Supongo que estamos en condiciones de hacer una evaluación. Una de las preocupaciones que surgen en general es cómo se incorpora una herramienta tan potente, pero al mismo tiempo tan riesgosa, dispersiva, en el proceso de educación, en la clase. Por ejemplo, ¿cuánto tiempo por día usan la máquina en clase?

HV - No le damos un tiempo exacto, a veces la incorporamos en la planificación docente, dentro de la asignatura que estemos trabajando. Otras veces no la incorporamos y el uso surge solo, como algo natural. Pero la usamos casi diariamente.

AG - ¿Y es fácil después retomar la clase tradicional, recuperar la atención y la concentración de los niños?

HV - Ahora se está volviendo a la normalidad, pero al principio, cuando recién empezamos a utilizar las máquinas, era muy difícil, el niño empezaba y se entusiasmaba, entonces volver al cuaderno o a lo oral daba más trabajo. Ahora que el niño está superando la ansiedad del primer momento, la novelería de tener la máquina en clase, se está haciendo más fácil, ya es algo natural, la usan como una herramienta más, no como lo más importante.

AG - ¿Cambió la dinámica de trabajo? ¿Hubo que incorporar formas diferentes de trabajar?

HV - Sí, la dinámica ha cambiado, desde el movimiento del niño, ya no es una clase pasiva, el niño muestra su trabajo a los compañeros, se para más, conversa más. Los maestros hemos tenido que adaptarnos a este cambio. Ha cambiado, ni que hablar.

Además el niño se ve más motivado en algunos aspectos, por ejemplo antes le daba un poco de pereza trabajar en el cuaderno, pero ahora le gusta más hacer la producción en la computadora, ya que tiene un procesador de texto con varias herramientas, entonces cambia la letra, le pone color, elige el formato que le gusta. Eso hace que la producción tenga un poquito más de sentido. Además, escribir para otros, porque saben que la gente va a leer el blog, su producción, esa escritura más social hace que el niño se motive de otra manera.

AG - ¿Mejoró el tema del ausentismo escolar? Se había manejado algo de esto al principio de la experiencia.

HV - Sí; esta escuela no presenta mucho ausentismo, pero el niño viene con otros intereses, no quiere perderse nada, trabajar con la máquina, sobre todo cuando en la escuela había internet y en otros lugares del pueblo no, el niño tenía más interés todavía. Les gusta muchísimo. Ahora se expandió a todo el pueblo, casi todos los niños tienen.

AG - ¿Qué impacto han tenido las computadoras en la vida diaria de los niños, fuera de la escuela? Porque recordemos que, de las experiencias en América Latina, esta es la única en la que los niños se llevan los laptops para sus casas.

HV - Sí, es la única. Es totalmente diferente y se ha comprometido mucho a la familia en esto.

AG - Vamos a preguntárselo a alguno de ellos. Tenés a alguien por ahí.

HV - Me acompaña Micaela. Porque todos conversan, pero llegado el momento de hablar en público les da un poco de vergüenza. Micaela va a romper el hielo.

Micaela:
Hola.

AG - ¿Cómo estás?

M - Bien.

AG - ¿Cuántos años tenés?

M - Diez.

AG - ¿Escuchaste la pregunta que le hice recién a la maestra?

M - No.

AG - Te la repito: ¿cómo impactó en la vida de ustedes fuera de la escuela el hecho de formar parte de esta experiencia? [Silencio.] ¿Cómo la usan en sus casas, cómo interactúan con sus padres, los abuelos? ¿Se han involucrado en este proceso?

M - Sí, se han hecho muchas cosas con las computadoras en sus casas.

AG - ¿Sí? ¿Por ejemplo? ¿Qué hacen? ¿Para qué las usan?

M - Se dibuja, se mandan correos.

AG - ¿Con quiénes?

M - Con compañeros, con niños de otros lugares y con familiares que están muy lejos.

AG - También sirve para contactarse con los familiares que están en otros países, que se tuvieron que ir.

M - Sí.

AG - ¿Ustedes sabían usarla antes? Tú, antes de esta experiencia, ¿habías usado una computadora alguna vez?

M - No.

AG - ¿Y tus padres?

M - No, mis padres tampoco.

AG - ¿Cómo es en casa? ¿Se pelean con los padres para ver quién la usa?

M - No, no.

AG - Hay tiempo para todos.

M - Sí.

AG - ¿Qué es lo que más te divierte? ¿Qué has hecho con el blog? ¿Qué cosas aportaste al blog?

M - La historia de la escuela, el salón Mevir...

AG - ¿Qué hiciste? ¿Pusiste fotos, escribiste alguna cosa que te gustaba?

M - Sí, de la escuela hicimos toda la historia.

AG - Escribieron toda la historia de la escuela.

M - La resumimos, entrevistamos a una que fue alumna antes y después fue directora y maestra de esta escuela.

AG - Está atada a toda la historia de la escuela.

M - Sí, sabía todo, por eso...

AG - Le hicieron una entrevista, se transformaron en periodistas por un rato.

M - Sí.

AG - Qué bueno. Te voy a plantear un desafío, porque tú sabés que esta entrevista después nosotros la transcribimos y la presentamos en nuestra página web, que es Espectador.com ¿Te animás a mandarme una foto tuya, que hayas sacado con tu computadora, así la ponemos en nuestra página web? ¿Te parece?

M - Sí.

AG - Y de paso, mandá también una de la maestra.

M - Ta.

AG - ¿Está bien?

M - Sí.

AG - Muchas gracias, Micaela. Sigo conversando con Hanía.

M - Ta...

HV - Micaela se envía correos electrónicos con niños de Brasil también.

AG - ¿Cómo es eso?

HV - Cuando recién empezamos vino un educador de Brasil, se contactó con los niños y conmigo, entonces hicimos intercambio de correo electrónico. Comenzamos en un intercambio de mensajes, los niños de allá pedían fotos y Micaela fue una de las que se entusiasmaron más y les mandó fotos de ella, de la clase, de la casa. Después otro niño filmó el parto de una vaca; los niños de Brasil quedaron maravillados, porque ellos donde viven ni siquiera han visto una gallina viva, te imaginás cómo quedaron de impresionados al ver el parto de la vaca. Eso les gustó muchísimo también.

AG - En general es un hecho que los niños aprenden a otra velocidad que los adultos, en particular en lo que a las computadoras refiere. ¿Cómo han sobrellevado esta situación? ¿Les ha generado algún problema? Porque tampoco debe de ser fácil ver que los niños avanzan más rápido que uno.

HV - Se les entregaron las máquinas un jueves, el viernes había ATD y no vinieron a la escuela, y el lunes cuando llegaron habían hecho de todo, nos contaban todos los programas que habían descubierto, lo que habían hecho. Los maestros quedamos maravillados y nos sentíamos un poco impotentes, porque iban tan rápido que cuando descubríamos algo y queríamos enseñarles, ellos ya lo sabían. Primero lo vimos como una traba, pero después nos dimos cuenta de que no, que era importantísimo que el niño explorara, descubriera por sí solo, sin estar siempre dirigido por el maestro. De todas maneras, la parte didáctica siempre le corresponde al maestro, el docente es el que sabe cómo usarla mejor, de qué manera la máquina va a influir en los aprendizajes. El niño podrá descubrir la técnica, pero no queremos formar técnicos en computación, queremos que la máquina sea una herramienta para mejorar los aprendizajes.

Todavía no podemos evaluar, es muy pronto, harían falta uno o dos años más para ver si esto ha tenido resultados positivos en los aprendizajes de los alumnos. Por ahora podemos hablar de una gran motivación del niño con la máquina, mucho interés por trabajar en ella. Mechamos todo lo curricular en la computadora.

AG - Está claro que la evaluación del impacto sobre el proceso de aprendizaje tiene que ser a más largo plazo. La idea era ver cómo habían sido estos primeros meses de interacción con un fenómeno tan novedoso, tan revolucionario para Cardal.

A mediados de octubre tú participaste en Montevideo en un evento en el que se juntaron participantes de esta experiencia de "un computador por niño" de toda América Latina. ¿Qué te dejó ese encuentro?

HV - Fue muy rica la experiencia, pude compartir con gente de otros países y ver en qué situación estaba, compartimos algunos videos de niños de otras escuelas. Me impresionó muchísimo cómo se trabaja en Costa Rica, en una escuelita de un solo maestro con un grupo promedio de 30 niños están haciendo avances tremendos. Pero Uruguay está en una situación bien distinta de la de los demás países de América, comenzó con la computadora sin tener un proyecto pedagógico previo, sin tener una preparación los docentes, un argentino decía que Uruguay empezó como una anomalía salvaje. Y fue algo así, un entusiasmo salvaje, cada maestro hizo lo que pudo, nos fuimos arreglando y defendiendo como pudimos. Fue ver qué podían hacer los niños y qué podíamos hacer nosotros. A otros países les llamó la atención que Uruguay hubiera comenzado así, sin un proyecto, sin nada previo. Tiene cosas positivas por un lado, pero también tiene aspectos negativos, porque es importante tener un fundamento teórico en todo esto, un proyecto, para saber hacia dónde vamos. Pero como experiencia piloto ha sido buena.

AG - ¿Cómo se llevan con la parte técnica? ¿Han tenido problemas? ¿Se solucionan en forma rápida?

HV - Tenemos un soporte técnico que nos presta la gente del LATU, que por el momento ha sido bárbaro, semanalmente están en la escuela. Como las máquinas fueron una donación, son diferentes de las que se van a entregar ahora, tienen algunas fallitas en el teclado o en la batería, entonces dos por tres hay problemitas. Entonces ellos las llevan, las reparan y a la semana o un poco más las traen. En ese período los niños tienen que trabajar de a dos, en grupo. Y el niño se pone ansioso, quiere su máquina, quiere tenerla con él. Por ahora no hemos tenido problemas con el soporte técnico, nos apoyan bastante. Y si no, tenemos teléfonos, mensajes de texto, nos comunicamos con los técnicos, no hay problemas.

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Edición: Mauricio Erramuspe