De Omar França, sobre la Fiesta de Santa Claus
Los holandeses que migraron a los Estados Unidos a finales del siglo XVII llamaban a San Nicolás de Bari con el diminutivo Sinter Klaas (Sinnter Niklaas) y llevaron al nuevo mundo una costumbre típicamente holandesa de recordar este generoso obispo.
Nicolás de Bari cuya fiesta se celebra el 6 de diciembre, nació el 310 d.c. y se caracterizó por un gran amor a los pobres. De familia acomodada abandonó su bienestar material para hacerse sacerdote. Su entrega a los pobres, especialmente a los niños fue generando cada vez más respeto y autoridad en el seno de la Iglesia que lo ordenó como Obispo. El rojo es un atuendo típico de los obispos (y cardenales) de manera que posteriormente a su muerte, empezó la tradición de celebrar su fiesta de diciembre repartiendo regalos a los niños pobres, tal como lo hacía el pastor de Myra (Turquía). Los adultos se disfrazaban de rojo y se colocaban una larga barba, típica usanza de los obispos de la época (al igual que es común hoy día, en la Iglesia Oriental y la Ortodoxa Rusa)
Quien volvió leyenda a este obispo católico de Turquia fue Clement Clarke Moore que escribió en 1823 un libro titulado "La Noche anterior a Navidad" y lo imagina en el polo norte, con el trineo que vuela, los nombres de los renos, etc. Concomitantemente con el período de independencia del Uruguay empieza la mitologización de San Nicolás.
La imagen que conocemos actualmente del clásico Santa Claus, fue modificada por el inmigrante Alemán recién llegado a Nueva York el protestante Thomas Nast quien lo ilustra para el semanario "Harper" en 1864 mostrándolo con el traje rojo las botas, un gran saco de juguetes y entrando en una chimenea.
Coca Cola en 1931 lo toma como imagen para promover su producto y lo convierte en un universalmente conocido gordinflón roji-blanco.
A partir de esta mitologización, el obeso abuelo de voz ronca deja de preocuparse por los niños pobres sino por traer regalos costosos, no precisamente para los niños necesitados. Y todo, según conveniencia de la sociedad de consumo.
OTROS DATOS DE LA BIOGRAFIA DE NICOLÁS DE BARI
San Nicolás de Bari nació en el año 310 después de Cristo, en un tiempo de persecución, donde la enseñanza de la doctrina de Jesucristo suponía estar en contra del Imperio Romano. Por lo alejado de la época es difícil saber con exactitud su nacionalidad. Países como Rusia, Turquía y, en general, medio Oriente se atribuyen este privilegio. Los padres de Nicolás que eran gente adinerada habían inculcado en su hijo el espíritu de generosidad entre otras virtudes.
Siendo aún muy joven mueren sus padres y comienza a dar la herencia recibida a los mas necesitados;
Entre los episodios que se cuentan de su vida se incluye el caso de tres chicas que pretendían casarse pero su padre no podía pagarles la dote correspondiente, condición imprescindible para el matrimonio, en aquella época. La extrema miseria en la que se encontraba la familioa estaba llevando al padre a hacerlas ejercer la prostitución, ante la imposibilidad de casarlas. Al saberlo Nicolás, sin ser visto, tiró por la ventana las monedas de oro suficientes para las tres dotes. La leyenda dice que esas monedas cayeron en unas medias de lana que las jóvenes habían dejado secando (por eso se cuelgan las medias tejidas que sirven para los regalos) En algunos países su imagen aparece con tres monedas de oro en las manos.
En esos tiempos era emperador Diocleciano quien ordena a Cesar Galerio acabar con los cristianos con toda la fuerza. Es en esta época que San Nicolás es nombrado Obispo de Myra Turquía (de ahí el color rojo de su vestimenta).
En una de las persecuciones fue aprehendido y encarcelado por casi 30 años.
Al convertirse al cristianismo el emperador de Roma, Constantino, hijo de Santa Elena, el Obispo Nicolás fue liberado. Ya anciano con el pelo largo y la barba blanca regresa a su ciudad dispuesto a empezar otra vez la Iglesia de Cristo.
Su sorpresa fue grande cuando llegando a su diocesis, en los días previos a la Navidad, observa la Catedral que había sido reconstruida por sus Cristianos y los encuentra entonando cánticos navideños.
Se dice que sostuvo con su dinero y con su fe a su pueblo y a ciudades como Patara y Lycia de Kalamaky que vivían hambrunas.
Sus restos descansan en la Basílica de San Nicolás, en Bari, Italia, desde el siglo XI (1087) y a falta de precisión de su fecha de paso a la vida eterna su fiesta es asociada a la vuelta a su diócesis en los días previos a Navidad. Por eso, el 6 de Diciembre.
Padre Dr. Omar França Tarragó