(Emitido a las 7.42)

EMILIANO COTELO:
Los cinco diputados de Maldonado se unieron en la sesión de ayer en la Cámara Baja en un planteo común sobre la inseguridad en ese departamento. A esta iniciativa, y a partir de los hechos violentos de pública notoriedad, varios legisladores –no solo de Maldonado, también de otros departamentos– reclamaron medidas inmediatas. Se escucharon solicitudes de que se cubran las 750 vacantes que aún hay en la Jefatura fernandina, de que se aplique tolerancia cero para el Código de Faltas, de que se creen Mesas de Convivencia Ciudadana y se forme una comisión especial en la Cámara de Representantes para atender la seguridad pública.

El planteo político fue presentado por el diputado colorado por Maldonado Germán Cardoso, de Vamos Uruguay, al que se sumaron los demás representantes de ese departamento: Federico Casaretto, de Alianza Nacional; Darío Pérez, de la Liga Federal, Frente Amplio; Nelson Rodríguez, de Correntada Wilsonista, Partido Nacional; y Pablo Pérez, de Alianza Progresista, Frente Amplio.

El diputado Cardoso reclamó que se designaran los 750 efectivos para la jefatura fernandina, con el argumento de que se duplicó la población de ese lugar. A su turno, Casaretto reclamó "mano firme y no dura", al tiempo que advirtió sobre una pérdida de valores.

Darío Pérez, por su parte, afirmó que ante estos casos no se debe cobrar al grito, reivindicó el accionar del nuevo jefe de Policía, Eduardo Martínez –algo que también hizo Casaretto–, y reclamó mejoras en los recursos humanos. El legislador frenteamplista insistió en que el Senado debe apurar el trámite para aprobar la Ley de Procedimiento Policial, que, a su juicio, es una herramienta para trabajar.

El otro diputado frenteamplista por Maldonado, Pablo Pérez, comentó que para salir de la situación se tiene que formar profesionalmente a la Policía, romper las organizaciones que amenazan e instalar las Mesas de Convivencia Ciudadana. El legislador, que es suplente del intendente Óscar de los Santos, sentenció que "a los lugares tranquilos llegó la internet, llegó la globalización y llegaron los problemas".

Finalmente, la crónica de Últimas Noticias informa que Nelson Rodríguez, el diputado blanco de Correntada Wilsonista, apuntó que se debería aplicar "tolerancia cero para el Código de Faltas".

Y después siguieron otras opiniones, como la de Luis Lacalle Pou, del Herrerismo, quien planteó que se bajara la edad de imputabilidad y se analizara la posibilidad de eliminar la disposición que borra los antecedentes penales de los menores cuando cumplen 18 años.
Estamos con el jefe de Policía de Maldonado, inspector mayor retirado Eduardo Martínez. ¿Cómo vive usted estos hechos de violencia tan serios que se han dado en los últimos días, desde la responsabilidad que le toca llevar adelante y cuando lleva relativamente poco tiempo en ese cargo?

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EDUARDO MARTÍNEZ:
La violencia de los hechos es lo que nos ha hecho trastabillar a los fernandinos, porque tuvimos toda una temporada en la que hubo más de un millón de personas en Maldonado, pasaron más de 200.000 vehículos durante 60 y pico de días y no tuvimos ningún hecho relevante. Y pasada la temporada, en 24 horas nos hemos sentido todos muy mal porque ha sido asesinada una niña, porque ha sido asesinado un joven de la zona, y eso ha impactado enormemente.

EC - ¿Cómo observa las reacciones que se produjeron ayer en el Parlamento?

EM – Perfecto. Es más, acá hubo una marcha el otro día, en la que yo no estuve porque no estaba en la ciudad –estaba trabajando–, pero entendí y entiendo que no era una marcha contra la Policía, no era contra nadie específico, sino contra una situación que nos tiene nerviosos a todos.

Ayer, por ejemplo, en la sala de sesiones de Jefatura estuvieron el presidente de la Junta, el presidente de la Comisión de Seguridad, varios ediles, vecinos y padres y hermanos de las víctimas, y pusimos todo arriba de la mesa para ver, entre todos, qué podemos hacer. Yo soy un vecino más aquí, trabajo en procura de vivir en tranquilidad.

Así que me parece muy bien, podrá haber enfoques o medios diferentes, pero lo bueno es que la gente no se queda de brazos cruzados frente a los hechos. Si no, iría en contra de lo que yo mismo planteé cuando vine en el mes de julio y acá se hablaba solamente de inseguridad. Yo pedí por favor que borraran el prefijo "in", porque teníamos que empezar a hablar de seguridad.

JOSÉ IRAZÁBAL:
Usted dice que es "un vecino más", pero usted es el jefe de Policía y tiene una responsabilidad muy fuerte en la investigación de lo que sucede. ¿Qué explica estos dos casos que han conmocionado a la opinión pública no solo de Maldonado sino de todo el país (el asesinato de una niña de 11 años el domingo de madrugada y luego la muerte de un joven fríamente ejecutado con un disparo a través de la ventanilla de su automóvil)? ¿Qué puede haber llevado a que en pocas horas se hayan dado dos hechos con estas características? ¿Qué ven ustedes?

EM – Habrá que ver qué fue lo que pasó para encontrar una explicación real, por ahora solo podemos hacer algunas conjeturas. Hay que ver muchas cosas, es muy difícil decir esto públicamente, pero todos sabemos –y esto no es una cuestión política, los que me conocen saben bien que soy técnico, mi posición política no tiene nada que ver– que en el mundo, no solo en Maldonado, no solo en Uruguay, hay una pérdida de valores impresionante. Con el transcurso de los años se ha perdido un principio básico, que es reconocer que los derechos de uno terminan donde comienzan los derechos de los demás... mire qué bobada estoy diciendo, y sin embargo la base de esto es aprender a respetar.

Yo escuchaba en los medios argentinos hace poco sobre los famosos "motochorros" que han aparecido, que ponen los pelos de punta: en plena tarde, con una bruta vigilancia policial, ingresan a un comercio, matan al hombre, matan a un vecino y se van en una moto. Eso no puede ser. Por eso digo, esta movilización general me parece bien, hay que buscar soluciones, porque además es una movilización sumamente respetuosa.

EC - Pero ¿qué puede conseguir una movilización? Muestra un estado de preocupación, pero ¿a quién puede sensibilizar?, ¿a los potenciales delincuentes, a los potenciales homicidas?

EM - No, a toda la población. Usted me habla ahora del homicidio de Pamela y del hecho puntual del homicidio de Fabián, por supuesto, espantosos, horribles, querríamos que esto no hubiera sucedido. Pero ¿por qué suceden las cosas? No me pregunte a mí.

EC - ¿Qué puede hacer la Policía para acotar el margen de maniobra de quienes llegan a esos extremos de violencia? Le pregunto por algunos de los planteos que se formularon ayer en la Cámara de Representantes: por ejemplo, que se cubran las 750 vacantes que hay en la Jefatura de Maldonado. ¿Cómo es esto de que hay 750 vacantes?

EM - Hay un pequeño error del diputado, un hombre muy preocupado, que ha estado permanentemente en contacto conmigo, como todos los diputados. No hay 750 vacantes, Jefatura tiene en este momento 40 vacantes y hemos llamado a un concurso para ingreso.

Esto es muy dinámico, todos los meses se nos va una cantidad de policías, porque hay ofertas de trabajo diferentes, entonces se entusiasman y se van; aunque a los pocos meses piden el reingreso y tienen que dar concurso otra vez, tenemos que darles cinco meses de curso. Es muy diferente de otras unidades policiales. El diputado quiso decir que se necesitan 750 policías más, eso es cierto, porque Maldonado ha crecido enormemente.

EC - ¿Usted coincide en que harían falta 750 más?

EM - Sería lo ideal.

EC - ¿Cuántos funcionarios policiales hay hoy en Maldonado?

EM - Le voy a contestar más o menos lo mismo que contesté ayer acá, aunque después seguimos el tema a puertas cerradas: tenemos una deficiencia de personal, pero no tengo más remedio que mantener los números en reserva. No son suficientes.

EC - ¿Por qué tiene que mantener los números en reserva?

EM - ¿Y a usted qué le parece si yo digo las carencias que tengo? ¿Cómo puede impactar eso en la delincuencia? En forma personal se lo cuento, pero no puedo decir públicamente cuáles son los problemas para darle seguridad a la población. Si lo hiciera estaría alimentando las posibilidades de los delincuentes.

EC - ¿Qué posibilidad hay de que Maldonado obtenga esa cantidad de plazas en su esquema de funcionarios policiales? ¿Qué posibilidades hay de que se incorporen 700 funcionarios?

EM - Es un problema de dinero, de costos, y no es fácil. La ministra del Interior dijo hace poco que había hecho un enorme esfuerzo y nos iba a destinar 40 hombres más a partir del 1° de enero, para lo cual tiene que sacar vacantes de otros departamentos y destinarlos a Maldonado. No es fácil, por eso digo, con la participación de los distintos actores quizás logren sacar de algún lado. No es nada sencillo.

Además, en Maldonado hay otro problema: son muy pocos los fernandinos y los carolinos que ingresan a la Policía. Casi todos son de otros departamentos y vienen todos con una problemática impresionante, de vivienda, de costos para mantenerse, quedan lejos de su hogar, de su familia, de sus padres, de sus hermanos, a veces de su esposa y de sus hijos para venir a trabajar acá. Y después tenemos un problema social interno que complica mucho más la administración, porque hay que buscar la forma de que esa gente no se separe de su familia, de que mantenga algún contacto.

EC - En el planteo que hacía ayer el diputado Germán Cardoso había otros puntos. Por ejemplo, la aplicación de todo el marco jurídico vigente en cuanto a materializar una tolerancia cero. "Esto no implica excesos ni actuar por fuera de la ley, significa dotar de los medios humanos normativos, técnicos y materiales a la Jefatura para su aplicación en toda su extensión del Código de Faltas, previsto claramente en el articulado de nuestro Código Penal. Dentro de la ley todo, fuera de la ley nada", dijo el legislador. ¿Hay margen para ser aún más estrictos? Da la impresión de que sí, según señala el diputado.

EM - Lo que dijo el diputado es correcto, desde mi punto de vista. Nosotros no somos blandos en el aspecto de decir "esto vamos a reprimirlo y esto no", para nosotros es todo igual, aplicamos la ley. Mírelo por otro lado: en cada hecho con apariencia delictuosa que sucede intervienen los tres poderes del Estado. Roban un par de championes y se da cuenta a la Policía, que es Poder Ejecutivo; la Policía investiga los delitos (como está establecido en el artículo 3º de la Ley Orgánica Policial, la 13.963), reúne las pruebas y entrega los posibles delincuentes a los jueces, al Poder Judicial; entonces interviene el fiscal, que pertenece al Poder Ejecutivo y ¿qué hacen la Policía y el fiscal? aplican la ley que salió del Poder Legislativo. Inmediatamente intervienen los tres poderes del Estado. No se trata de que la Policía diga "esto me gusta y esto no me gusta". El otro tema es la cuestión operativa, cómo la podemos realizar.

EC - En ese sentido también hay solicitudes: "se instruya inmediatamente a la Jefatura para la creación de retenes policiales con la finalidad de disuadir las actividades delictivas y llevar un control de las personas que circulan, con el fin de preservar una aceptable calidad de vida y de convivencia". ¿Qué dice de ese instrumento en particular, los retenes?

EM - Tener retenes, técnicamente, es mantener personal policial a disposición para dar una respuesta inmediata frente a los hecho que se presentan. Conociendo el léxico del diputado, me da la sensación de que quiso decir eso, pero para tener un retén tenemos que tener una cantidad de hombres y mujeres policías para tenerlos a disposición.

EC - No ve viable este sistema.

EM - Operativamente en este momento, no. Seguramente por eso el diputado Cardoso habla de 750 policías más.

EC - En definitiva, ¿qué puede hacer hoy la Jefatura de Policía en respuesta a una inquietud que se ha materializado en estos días en la gente de Maldonado por estos hechos? ¿Cómo puede reaccionar la Jefatura, qué puede hacer?

EM - En este momento –y los 365 días del año– nuestros policías están haciendo un enorme esfuerzo, porque hemos perdido en pocas horas una tranquilidad que se había logrado y primero que nada tenemos que dar una respuesta a eso. Se está trabajando sin descanso y estoy seguro de que hay gente que no sabe lo que es dormir o comer en hora, está permanentemente trabajando. Hasta el último policía está (dentro del horario que puede, porque aquí más del 90% de los policías tiene otro trabajo paralelo. Maldonado da esa oportunidad y el personal policial la utiliza, cuando termina su horario de servicio hace 222 o trabaja en otras empresas o tiene su empresita propia) distrayendo horas de esos trabajos, aportando hasta de su bolsillo para atender esta necesidad. Pero es una cuestión que se puede lograr en forma transitoria, porque ellos tienen sus necesidades básicas que cubrir. Esto se está haciendo sobre la base de un gran esfuerzo de todo el personal policial.

EC - Lo entiendo perfectamente y las condiciones en las que se desarrolla la función policial, el problema de los sueldos, de la falta de presupuesto también es conocido. La pregunta apuntaba a medidas concretas que puedan llevarse a la práctica ahora, a corto plazo.

EM - O yo no le entendí la pregunta o no fui claro en la respuesta. Se está marcando una presencia policial a partir de un sacrificio muy grande del personal policial en la calle, y se está investigando a full a los efectos de dar una respuesta a la población, y sobre todo a la familia de las víctimas, para establecer la posibilidad de recuperar esa tranquilidad que hemos perdido en estos días. A eso me refería.

JI - Volviendo a estos dos casos de pública notoriedad, usted dice "hemos perdido una tranquilidad", eso hablaría de que estos serían hechos aislados, pero esa interpretación no coincide con lo que usted decía sobre un cambio de cultura o una pérdida de valores. Y eso no me cierra el razonamiento que usted hace ante esta situación.

EM - ¿Por qué se dan estos casos? En la investigación que se está haciendo en el caso de Pamela y en el de Fabián, uno ve el entorno y se da cuenta de que es un problema que es producto de una cantidad de elementos más. Es un trabajo multidisciplinario, la consecuencia de todo eso se dio en 24 horas y nos destrozó a todos en cuanto a nuestra tranquilidad. Insisto: volvemos a las causas, por qué se dan, por qué se dan en 24 horas. Ahora nos queda responder llegando a resolver estos casos y empezar otra vez el trabajo de recuperar eso. No sé cómo decírselo más claro.