En marzo del año pasado la Intendencia de Montevideo presentó un nuevo sistema de clasificación. Se trata de bolsas naranjas que se entregan en supermercados para depositar vidrio, papel, cartón, metal, nylon, madera y plástico.

Según un estudio del Plan Director de Obras del municipio, el 40% de la basura que se eliminaba en Montevideo hasta ese momento era material reciclable.

La bolsa naranja que debía dejarse a la vista, y no dentro del contenedor, no formó nunca parte del paisaje de las calles de Montevideo. Muchas se arrojaban dentro y las que allí estaban tenían una mezcla de compuestos orgánicos y reciclables.

Según el director de Limpieza de la Intendencia de Montevideo, Eduardo Pereyra, que la gente no haya aceptado el cambio no quiere decir que éste sea eliminado. "El tema del clasificado en origen va a ser de tratar de introducir el cambio cultural de cómo manejar los residuos más allá del grado de avance que se haya presentado con la bolsa naranja. Es hoy ya y va a ser una política que va a ser de carácter permanente, va a trascender al gobierno de turno en la ciudad. La bolsa naranja es un primer empujón en esa dirección. Más allá de que nosotros evaluamos no tener una conformidad total de cómo se desarrolló ese proyecto, lo que estamos haciendo es tratar de ajustar medidas para continuar con esa línea", afirmó.

Por su parte, el director de Limpieza de Montevideo dijo a Índice 810 que en ningún momento la intendencia asumió que con las bolsas se solucionaría el problema de la clasificación en el hogar. "De las dificultades que lleva implícito promover un cambio cultural. Es eso simplemente. La intendencia nunca asumió que iba a obtener el 100% del resultado con esta propuesta primaria. Además que la misma merecía ajustes y detalles que iban a ser reajustados en los marcos de ese proceso que estamos transitando. A un año de ese lanzamiento, nosotros vamos a tratar de generar un ajuste y de seguir con la misma línea de trabajo", expresó.

Respecto a los nuevos contenedores de color naranja que la comuna instalará en Montevideo como parte de una experiencia piloto, Pereyra dijo que en una primera instancia se instalarán cerca de 100 contenedores en algunos barrios. Agregó que en caso de funcionar se llegará a fin de año con unos 400. "La idea es, en primer lugar, meter un contenedor naranja cada tres contenedores verdes y apostar a una fuerte difusión en la zona con volantes, cartelería, herramientas que indiquen que lo que se clasifica en el hogar, donde tiene que ir y que es negativo mezclarlos, ¿no? Nuestra primera experiencia la vamos a hacer en Malvín porque ahí hay una comisión de Medioambiente fuerte y nosotros queremos probar con un grado de involucramiento importante de la descentralización de esto", señaló.

Para la recolección de este tipo de residuos se pondrá en circulación un tipo de camión especial para llevarlo a aquellos lugares donde hay clasificadores que trabajan en cooperativas.

En Paysandú implementarán un sistema similar. Habrá tres contenedores ubicados en puntos estratégicos de la ciudad.

Tal como había indicado el director de Higiene de la Intendencia de Paysandú los contenedores aceptarán solamente residuos inorgánicos, incluyendo papel, cartón, nylon, vidrio, plásticos y metales secos y limpios. No será posible depositar en estos lugares residuos orgánicos ni tampoco residuos de construcción.

Los contenedores se instalarán en lugares de acceso público y donde a la vez podrán ser custodiados para que no se depositen desechos que no correspondan. Eso sí, el ciudadano deberá memorizar el horario en que estará abierto para su uso, que es distinto según la zona de la ciudad en que se encuentra.