"Deplorables" e "infrahumanas". Así fueron calificadas las condiciones de reclusión en las principales cárceles de Uruguay, en el informe presentado el viernes por el relator especial de la ONU para la tortura y otros tratos o penas crueles, inhumanos y degradantes, Manfred Nowak.

El relator culminó el viernes su visita al país y dijo que el pueblo uruguayo "no merece" un sistema penitenciario como el que encontró.

"He visitado muchas cárceles en el mundo entero y lamentablemente tengo que decir que el Penal de Libertad es una de las peores que he visto en el mundo", aseguró Nowak, y continuó: "Nunca he estado en un ningún sitio donde tantos detenidos me hayan dicho ‘aquí nos tratan peor que los animales’ ".

Nowak visitó varios centros de reclusión. Además del Penal de Libertad, estuvo en Comcar, el Hogar Piedras y el Hogar Ser del INAU, comisarías y algunos centros psiquiátricos como el Hospital Vilardebó.

***

En el documento, que será elevado a la Comisión de Derechos Humanos de Naciones Unidas, Nowak señala que recibió "numerosas alegaciones creíbles de malos tratos y uso excesivo de la fuerza en prisiones, comisarías de policía y centros de detención de adolescentes". Agrega que las condiciones de reclusión en las cárceles fueron empeorando en los últimos años y que son constantes las violaciones a los Derechos Humanos.

"Durante la dictadura militar, el Penal de Libertad se convirtió en un símbolo infame de la tortura y los malos tratos. Dos décadas después, sigue siendo conocido por sus condiciones infrahumanas. En particular, las condiciones en los módulos de acero conocidos como Las Latas son un insulto a la dignidad de los reclusos", concluye en el informe.

En el texto, el relator también condena la falta de higiene y el acceso restringido al agua de los reclusos, quienes -según dice- se ven "forzados a tomar el agua del inodoro, y como resultado, a usar botellas de plástico o bolsas para hacer sus necesidades fisiológicas". También asegura que tienen un acceso limitado a los médicos.

Novak mostró especial preocupación por la superpoblación de las cárceles, sobre todo en el Comcar, donde el número de reclusos es cinco veces superior a su capacidad. Además, calificó de "alarmante" la situación de violencia inter-carcelaria que ha provocada la muerte por homicidio de tres reclusos.

"La situación de la higiene en estas condiciones de hacinamiento, donde falta comida, y falta atención médica llevan a un situación de violencia estructural donde los levantamientos y las rebeliones son casi semanales", aseguró Nowak.

Por otra parte, hace hincapié en que Uruguay viola las normas legales internacionales, ya que, en cuanto a la reclusión, no hace diferencia entre procesados y condenados.  

Agrega que existe un fuerte retraso en el sistema judicial, lo que lleva a que dos tercios de los individuos privados de libertad se encuentren procesados, pero no condenados.

Otros centros de reclusión
El relator visitó también el Pabellón de Mujeres, de Canelones. Advirtió que las reclusas cuentan con "mejores establecimientos y un régimen más liberal". Sin embargo, señala que aún existen cárceles que no son adecuadas para albergar niños que permanecen allí con sus madres.

En cuanto a los adolescentes recluidos en la Colonia Berro, el relator de la ONU criticó que en Uruguay la privación de libertad sea el primer recurso y no el último. Agregó que las condiciones de vida en los centros que visitó son "terribles", que no brindan posibilidades de rehabilitación y destacó que los chicos son encerrados hasta 22 horas al día en las celdas.

"Un gran número de adolescentes privados de libertad son adictos o consumidores de drogas. Muchos de ellos reciben sedantes como sustituto a las drogas", agrega.

Acerca de las condiciones en las instituciones psiquiátricas, el relator dice que se llevó una buena impresión de los centros visitados, pero que aún queda mucho por hacer en cuanto a la infraestructura.

El informe también critica las condiciones de las comisarías, que son descriptas como "oscuras, húmedas e inmundas". De todos modos, celebra el hecho de que la estancia en las seccionales sea de corta duración y que el plazo máximo para que una persona sea trasladada frente a un juez esté fijado en 48 horas.

En otro orden, Nowak destaca como positivo el esfuerzo del gobierno de afrontar los crímenes ocurridos durante la dictadura y exhorta a que se haga justicia en un plazo razonable.

Recomendaciones
El relator especial de la ONU también realiza una serie de recomendaciones al gobierno uruguayo para mejorar las actuales condiciones de reclusión en las cárceles de Uruguay. Entre ellas, propone ampliar el mandato del comisionado parlamentario y brindarle los recursos necesarios para que cumpla su labor.

También sugiere la creación de un Ministerio de Justicia, responsable del sistema penitenciario y que forme parte de una reforma del sistema penal judicial y de una política penitenciaria integral.

Otras de sus recomendaciones pasan por separar a los condenados de los procesados en las prisiones, brindarle a los reclusos las necesidades básicas, como agua, alimentación suficiente o tratamiento médico, y limitar el plazo máximo de privación de libertad para los detenidos procesados.

Agrega que es recomendable que se realice una investigación "sobre cada caso de tortura y malos tratos" y establecer un mecanismo de denuncias "accesible y efectivo para víctimas".