(Emitido a las 8.35 horas)

EMILIANO COTELO (EC):
Por estos días Florida festeja los 200 años de su fundación y al mismo tiempo se consolida como un líder digital entre los gobiernos municipales de Uruguay.

Fue acá en el pueblo Cardal que nació el Plan Ceibal, en el año 2007. Y el lugar elegido no era casualidad. Un año antes el departamento había lanzado el proyecto "Florida Digital", una apuesta fuerte a la conectividad y a la inclusión de Tecnologías de la Información (TI), en el funcionamiento de la Intendencia, pero también de otros servicios públicos y privados.

En junio del año pasado la comuna fue elegida como "la mejor ciudad digital pequeña de América Latina y el Caribe", una distinción que le otorgó la Asociación Hispanoamericana de Centros de Investigación y Empresas de Telecomunicaciones.

En aquel momento entrevistamos En Perspectiva al intendente Juan Giachetto, pero hoy es una buena oportunidad para averiguar en qué se avanzó desde entonces, cómo se adaptan los floridenses a estas nuevas posibilidades, cuáles son los objetivos de la Intendencia para este último año de gestión.

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EC – Para eso es un gusto recibir en nuestra fono platea al intendente municipal Juan Giachetto, maestro y periodista.

JUAN GIACHETTO (JG):
Muy buenos días, Emiliano, primero que nada en nombre del pueblo de Florida darles la calurosa bienvenida por esta amabilidad que han tenido de trasladarse hasta la capital de la Piedra Alta para usted y todo su equipo, anhelando que tantos oyentes como tiene El Espectador también puedan acercarse a esta fonoplantea hermosa que tiene el centro comercial y verlos trabajar en vivo y en directo, que es la magia de la radio.

EC – Usted conoce de eso, porque su trayectoria periodística estuvo fundamentalmente centrada en la radio.

JG – 26 años en CW33 la Nueva Radio, después de haber realizado ocho años como docente, trabajando en Reboledo y San Ramón. Las cosas de la vida... se nos cruzó la oportunidad y el desafío de optar entre seguir con la carrera magisterial o incursionar en una radio que recién comenzaba y daba sus primeros pasos; optamos por la radio, netamente por razones económicas, yo no voy a decir por vocación, porque realmente tuvimos que hacer algunos cursos de periodismo acelerado para ponernos al día y aprovechar todo lo que era nuestra formación como docente. Allí surgió una nueva vida para mí.

De la misma forma que no tenía pensando incursionar en la política y sin embargo termino con la enorme responsabilidad y el privilegio histórico de ser el jefe comunal en una celebración como la actual: nada menos que los 200 años de la ciudad.

EC – Una celebración que se da con este contraste interesante entre la valorización del pasado y por otro lado, una apuesta al futuro que tiene como centro este proyecto, que ya no es proyecto, es realidad muy avanzada, de Florida Digital. ¿Podemos recordar brevemente en qué consiste?

JG – Yo decía, hace pocas palabras: de la Florida colonial a la Florida Digital, porque en realidad eso es lo que han marcado el paso de los años.

Nosotros ingresamos a la administración, con todo el equipo, con un fuerte compromiso de una palabra que estaba muy en boga, la necesidad de transparencia, la necesidad de que los gobernantes fueran claros en lo suyo y la población pudiera tener elementos de control y de saber qué es lo que se realiza en una comuna.

Con esa carga fuerte y un compromiso electoral más que fuerte cuando nos posicionamos en el lugar descubrimos que las dificultades eran mayores, porque realmente todo el control era simplemente llevado en cuadernos, todos papeles que lo trasladaban los propios funcionarios de un lugar a otro, eso era muy engorroso, cuando alguien venía a reclamar por un expediente había que sumergirse en una pieza llena de expedientes, se demoraba días en encontrarlo porque tampoco había un orden, y todavía, a veces, se llegaba a la conclusión de que se habían perdido.
 
Allí nos convenció -y yo le quiero dar el lugar que se merece el director de la administración Eduardo Riviezzi, que nos está acompañando en la fonoplatea- que más allá de la voluntad que se necesitaba, buscó convencernos porque él conocía ese mundo mucho más que nosotros -para quienes peinamos canas miramos un poco la computadora con cierto recelo, máxime cuando no la manejábamos-. Comenzamos todo ese período creyendo en él fundamentalmente por la relación de años que teníamos y al día de hoy estamos felices de haber hecho esa apuesta...

EC – ...De haber hecho ¿qué apuesta?

JG – La apuesta a decir: tenemos que aprovechar las Tecnologías de la Información y la Comunicación (TIC), al servicio de la gente. Pero lo tenemos que hacer en forma rápida, que pueda haber algo palpable y que nos estimule.

Entonces había que dar pasos. Primero había que conseguir un socio estratégico porque indudablemente había que tener conectividad. La conexión con las juntas locales –que tenemos 13- era exclusivamente vía teléfono, o a veces en la denominada "cartera" a través del ómnibus; también con inconvenientes porque alguna "cartera" se extraviaba.

Esa conectividad ¿cómo la alcanzábamos? Se necesitaba inversión y estábamos en momentos difíciles económicos. Allí se comenzó a remar, logramos un buen acuerdo con Antel que tenía interés también en mostrar al país que se podía hablar de modelos digitales cuando en el mundo ya avanzaban y rápidamente, y esa conectividad se logró en un plazo de 90 días. Desde ese momento, esa "fase cero" -que le habíamos puesto nosotros- quedó cumplida para dar paso a la fase siguiente que era el expediente electrónico y un portal de la comuna. Ahí se asociaron, aparte de Antel, empresas privadas.

En esto, la articulación de lo público y lo privado fue la gran llave que nos permitió ir alcanzando objetivos. Y ahí se aumentaron los desafíos. Ese portal reúne toda la información que se requería, las consultas que podían hacer los ciudadanos y fundamentalmente el expediente electrónico con la garantía de que nunca más se pierde...

EC – ...Pero nunca más se pierde el expediente...

JG – El expediente, pero se puede cajonear electrónicamente también, hay que hacerle seguimiento.

EC – Una precisión: ¿no hay más expedientes en papel acá en la Intendencia de Florida?

JG – Solamente el título del expediente, que me llega a mí a pesar de que tengo la firma digital igualmente -fui el primer intendente con firma digital en ese aspecto porque había que ponerse a tono-, pero como una garantía más también me llega la carátula de ese expediente y la resolución final para poner de puño y letra la firma, al margen de la digital.

EC – Entonces, por un lado, el expediente en la Intendencia de Florida, sea cual sea el trámite, es un expediente electrónico. Eso permite, entre otras cosas, que circule muy ágilmente.

JG – Exactamente, debería ser así. A veces alguno se detiene, por eso es importante que el ciudadano mismo vaya chequeando esos pasos, porque lo puede hacer telefónicamente desde su casa. Es decir, el segundo desafío grande que había era aumentar las posibilidades de atención de la Intendencia y cómo hacerlo. Queríamos tener atención las 24 horas, los 365 días; y dicen: "no hay rubro, hay que pagar horas extras, hay que tener personal". Eso se logró con un software, con una respuesta de voz que al día de hoy cualquier ciudadano desde cualquier rincón del país se puede comunicar: el 2 67 68. Ese teléfono le va a pedir dígitos a la persona que llama, le va a dar la bienvenida a la Intendencia Municipal de Florida y le va a decir que si quiere tener datos sobre su expediente, digita el 1; si quiere saber sobre vehículos cualquier dato -sea deuda, sea estado de situación-, digita el 2; si digita el 3, es por reclamos de alumbrado público; si digita el 4, todo lo relativo a contribución; el 6 es información general; etcétera. Y ahí logramos las 24 horas, los 365 días, porque es como si tuviéramos metido un funcionario dentro del sistema.

EC – Y ese sistema abarca a la Intendencia y las juntas locales, están todas conectadas y funcionando en general.

JG – Trabajando en red, efectivamente.

EC – También se pueden, por ejemplo, imprimir facturas en la casa de uno y luego pagarlas en un centro de pago.

JG – Exacto. Y hace muy pocas horas, que este es uno de los últimos pasos, dimos a conocer en la capital del país junto con Antel lo que viene a ser un aviso de vencimiento, que es un servicio más que anexamos. Esta respuesta de voz, esta computadora, le va a avisar a toda aquella persona que figura en el registro de nuestra intendencia, 10 días antes que, por ejemplo, se le va a vencer la libreta de conducir. Un trámite que muchas veces viene a hacerlo el ciudadano sin darse cuenta porque tiene vigencia por 10 años, se le escapa la fecha, conduce con ella, a veces protagoniza un accidente y ni siquiera sabía que tenía la libreta vencida. Con 10 días de anticipación va a recibir ese avisito telefónico que le va a recordar que se le vence la libreta.

EC – Está bueno, porque hoy eso es absolutamente elemental y se puede hacer sin ningún inconveniente disponiendo de la tecnología. Quizá hay otras dependencias que aún no lo han implementado pudiendo hacerlo. Ustedes están liderando en una serie de experiencias en esta materia.

JG – Exacto. Con el centro comercial aspiramos en unos pocos días más -porque ya estamos formando un grupo de trabajo- a que el comercio del interior de Florida pueda tener las mismas posibilidades que las grandes superficies. Y a través del portal, a través de la propia página de la Intendencia, tener un link donde pueda ingresar y ofrecer una especie de canasta de supermercado de ofertas, para que pueda haber el intercambio entre el interior y la capital a aquellos que deseen comprar desde el interior a la capital y viceversa, y saber qué es lo que está pasando en el interior. Como lo pusimos en práctica antes, en productos agropecuarios, que también con otra empresa privada y una página a través de nuestro propio portal, donde, por ejemplo, una persona tiene una oveja para vender, pone los datos, la característica, el precio, y realmente eso ha funcionado, ha marchado.

EC – Así que entonces el portal de la Intendencia funciona, además, como una plataforma para intercambio comercial.

JG – Exactamente...

EC – ...Intercambio comercial que ahora está por dar ese otro paso que le permitiría a todos los comercios del departamento, incluso a aquellos pequeños, formar parte de una especie de shopping virtual. Creo que hay un proyecto que habla del Shopping Adinet o algo por el estilo...

JG – Exacto, esa es la vía. Y con las garantías y las seguridades del caso también...

EC – ¿De qué estamos hablando? ¿De que la idea del Shopping Adinet empieza acá en Florida y después se va a extender a otros departamentos del país?

JG – Nosotros tenemos lo que es la experiencia piloto, como las hemos denominado a todas las que hemos realizado. Es decir, esto ha sido producto de la vidriera, el Florida Digital nos ha servido para que se canalicen ideas desde otros lugares y pueda tener el puntapié inicial aquí. Entonces, eso es lo que va a suceder.

Le cuento otra: en relación con el Ministerio de Salud Pública, ya está prácticamente todo listo también para iniciar el trabajo, la historia clínica pasará a ser digital. Es decir, cada ciudadano podrá tener vía internet absolutamente toda su historia clínica al alcance, con las garantías del caso, las reservas, pero a través del código va a poder, sin ningún tipo de problemas, olvidarse de si le pasaron cuando fue a una consulta su historia o no. Ha dado el aval el doctor Basso (director de Salud) para este aspecto -lo conversó con la ministra- y comenzaría también en Florida la digitalización de todas las historias clínicas de los pacientes.

EC – En la relación Florida Digital-Salud Pública ya hay un antecedente, por el sitio web de la Intendencia se puede pedir hora para determinadas consultas.

JG – Especialistas, exactamente. Pero está faltando aún alguna conectividad en alguna policlínica local. Lo pueden hacer desde la Junta ingresando a la página, pero aspiramos a que cada policlínica tenga también la misma conectividad a la red.

EC – Estamos hablando de un proceso bastante vertiginoso, que se inició en el año 2006. Estamos en 2009, han avanzado mucho... ¿Cómo reaccionó la gente? Y cuando digo la gente estoy hablando de los funcionarios municipales, por un lado, y por otro cómo reaccionaron los floridenses: ¿se adaptan, utilizan estos servicios?

JG – Vamos por partes. En torno a los funcionarios, como todo uruguayo, hubo que vencer primero esa resistencia de lo nuevo, y por qué no el pensar que de pronto esa máquina le quitaba un lugar de trabajo: "esta administración se las trae, va a achicar personal, por eso está apostando a la informatización". Entonces, hubo que trabajar mucho con los funcionarios para que comprendieran que lo que se le quería proporcionar era una herramienta que le iba a dar más seguridades y garantías. A esta altura yo puedo decir con orgullo que los funcionarios de la Intendencia Municipal de Florida se pusieron la camiseta del desafío, no la camiseta de la administración, la camiseta de funcionarios municipales, sabiendo que están en una nueva época y que le brinda mayores seguridades. Y han llegado a crear algunos pasos dentro de la propia estructura para seguir alcanzando objetivos, participan de nuestros desafíos. Y a la vez siguen en un proceso permanente de formación. Tenemos una sala donde ante cada situación que se plantea o problema a resolver ellos participan y ayudan en la solución, para mejorar los controles sobre todo.

EC – Usted decía que podía haber existido temor entre los funcionarios de que esto implicara una reducción de puestos de trabajo... De hecho, en este período en la Intendencia  de Florida ha bajado la cantidad de empleados municipales, creo que del orden de 1.300 a 1.000, ¿verdad?

JG – Estamos próximo a los 1.000, pero ha sido producto también de un retiro incentivado que pusimos en práctica, al que se acogieron más de 110 funcionarios, porque resultaba atractivo 18 meses de sueldo más los ocho de premio habituales. Eso nos va a permitir, primero que nada, adecuar un poco más el número a una realidad muy comprometida. Le digo que si lo ponemos como empresa, que en definitiva una administración lo tiene que manejar como tal, el 83% de los rubros que ingresan a la intendencia está comprometido con el funcionamiento. Entonces, eso no tiene sostenibilidad futura.

EC – Está bien, pero a propósito de esa preocupación de los funcionarios, usted dice que el proyecto Florida Digital no implicó despidos, pero sin duda, una vez que se fue produciendo esa reducción de la que usted hablaba en la plantilla, esta tecnología aplicada a los trámites y a las gestiones ha habilitado que no fuera necesario cubrir las vacantes que se iban produciendo, etcétera.

JG – Aunque la mayoría han sido en servicio y ahí es donde uno siente alguna carencia; el personal administrativo no ha sido tanto pero sin duda también ayuda, es decir, son menos manos las que participan. Las tecnologías marcan esas instancias, pero no fue una cosa compulsiva ni fuera de la voluntad; ningún funcionario se retiró de la Intendencia por culpa de la digitalización, eso lo quiero dejar claro.

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EC – Juan Giachetto, un hombre que fue candidato a diputado en el año 2000 por el Partido Socialista, pero que ahora se ubica dentro del Frente Amplio como independiente. ¿Está bien así?

JG – Efectivamente, esa ha sido nuestra postura y lo seguirá siendo. Considero que primero está el Frente Amplio por encima de los sectores, después de la experiencia vivida y haberme alejado del Partido Socialista. Incluso diría que me ha permitido encontrar puertas abiertas, que no es menor, y a veces cuando surge alguna afectación sectorial que pasa en todos los partidos podemos remar de una manera diferente.

EC – Volvamos al proyecto Florida Digital, esta apuesta tan marcada la conectividad y a la utilización de TI, tanto en el funcionamiento de la Intendencia como en otros servicios públicos y privados. Yo le preguntaba cómo ha reaccionado la gente y nos deteníamos en especial en los funcionarios municipales; ¿pero qué pasa con el otro lado del mostrador?

JG – Lo han sabido utilizar muy bien...

EC – ...Los floridenses, ¿efectivamente emplean estos instrumentos, estas herramientas?

JG – Por ejemplo, se eliminaron las colas; ya habla de por sí de que han sabido aprovechar. Teníamos largas colas para sacar la ficha médica, el carné de salud, la licencia de conducir. La gente del interior es la que más goza de estos servicios que no tiene necesidad de trasladarse a la capital salvo el día que reservó y que le toca. Por allí tiene ahorro de traslados, no pierde jornales, y todo eso repercute hasta en la propia economía familiar que es lo que le importa al ciudadano. En eso nos sentimos satisfechos porque se constata: no hay más colas en Florida.

EC – Pero ¿toda la gente sabe de computación? ¿Toda la gente sabe navegar en internet?

JG – No todos saben navegar en internet, pero sí la mayoría tiene teléfono ya sea celular o telefonía fija y también a través de esa forma telefónica puede efectuar reserva.

EC – O sea, el que no se anima con internet puede hacerlo por el sistema telefónico.

JG – Y si no arrimarse a la Junta local de cada lugar y allí el funcionario nuestro también le ayuda a hacer el trámite.

EC – Por supuesto que también existe la posibilidad de utilizar cyber-café, etcétera, si no se tiene computación en la casa...

JG – Exacto, también los centros MEC, los centros CAC...

EC – Recordemos qué son los centros MEC y qué son los centros CAC.

JG – Dentro de la política de inclusión, es decir, el colocar también al gobierno departamental en el marco del gobierno nacional con el Ministerio de Educación y Cultura, tenemos siete centros MEC funcionando a lo largo del departamento. Allí se reúnen los jóvenes, con acceso gratuito a internet. Las máquinas se obtuvieron a través del Ministerio de Educación y Cultura y la Embajada de China, que también colaboró en la equitación. Hay un funcionario encargado de estos centros y allí no sólo se navega por internet, se realizan solicitudes de trámites, sino que fundamentalmente son centros de expansión cultural muy amplios, porque incluso se participa de foros vía internet, surgen actividades conexas en todas las ramas, exposiciones: le ha dado vida a las localidades del interior.

Y los Centros de Atención Ciudadana (CAC) son una experiencia donde se pueden realizar absolutamente todos los trámites en la vía del Estado y donde el ciudadano ya no tiene que trasladarse ni siquiera para pagar, ni averiguar; concurre al centro CAC...

EC –  El centro CAC no abarca solamente a los servicios municipales.

JG – Exactamente. Por eso le digo que está incorporada la mayoría de los trámites del Estado en él. Se pueden realizar pagos, pero también se pueden averiguar datos sobre expedientes, etcétera, de otras reparticiones.

EC – ¿Cuántos centros de este tipo hay en el departamento?

JG – Tenemos dos, porque apuntaba a los lugares que estaban con menor cantidad de servicios: Nico Pérez, en el límite con Nico Batlle, allí también no sólo participa gente de Florida, sino también de Lavalleja, y en Cardal. El centro CAC de Cardal viene con un aumento de consultas extraordinario, ya muy próximo a las 2.000 consultas mensuales, que de por sí solo habla de la importancia que tiene para los pobladores.

EC – ¿Cómo vienen los planes de alfabetización digital en Florida?

JG – Tenemos un gran desafío, porque esta es la meta número uno que nos hemos trazado. En el marco de los proyectos concursables, que en estos momentos están compitiendo con apoyo de la Unión Europea, hemos presentado uno de ellos apuntando a la alfabetización por un total de 600.000 euros. Esperemos poder sortear las vallas, que son bastantes, en este tipo de proyectos, pero para nosotros sería clave fundamental porque ahí sí estaríamos hablando de preparar a los jóvenes.

Si hay un rubro que en el país tiene cero desocupación es el de técnico en informática. Es más, continuamente hay requerimiento y a veces los jóvenes no se animan a dar ese paso, o no lo pueden dar porque indudablemente hay barreras económicas.

EC – A todo este panorama se le podrían agregar otros elementos: por ejemplo, las plazas con conexión inalámbrica a internet disponible gratis...

JG – ...Tenemos cuatro lugares.

EC – Exacto. Y por supuesto el antecedente de Villa Cardal que fue el piloto, la puesta en marcha, la primera experiencia del Plan Ceibal en las escuelas de Primaria en Uruguay.

¿Por qué toda esta combinación se da acá en Florida, cuál es el misterio? ¿Por qué Florida está jugando este papel de locomotora en este terreno de las TIC aplicadas a la gestión de gobierno, pero también a toda esta otra serie de intercambios?

JG – Yo diría, como gran explicación, la conectividad, que es un paso fundamental y que no es fácil de conseguir, y segundo, el señor Eduardo Riviezzi, que es un hombre que golpea puertas, escarba, busca, recorre el país, establece relaciones.

Hace pocas horas tuvimos una video conferencia con Nicaragua en la sala de Antel, porque el gobierno de Nicaragua está interesado en la experiencia de Florida y Banco Mundial de por medio podríamos tener la posibilidad de que nuestro modelo comenzara a replicar en otros países. Esto, sin duda, aumenta nuestros compromisos y el orgullo de saber que, más allá de Florida, es Uruguay el que aparece en el concierto mundial en esta materia.

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EC – Rosario Castellanos sigue recorriendo la ciudad de Florida. ¿Qué has elegido para destacar en este momento?

ROSARIO CASTELLANOS:
Yo les dije que era ineludible porque lo es como espacio para los floridenses, pero lo es para cualquiera que visite esta ciudad recorrer lo que es la rivera del río. Porque de uno y otro lado seguramente se ubican los espacios públicos más característicos y jerarquizados de la ciudad.

Este lado de la ciudad donde me encuentro, el Paseo del Prado, parque público, espacio recreativo, su rambla, el teatro de verano, el rosedal, la glorieta: todo sobre la base de un proyecto del gran paisajista francés Carlos Racine, el mismo que en Montevideo fue el responsable de nuestro Prado y del Jardín Botánico, por ejemplo.

Racine ha optado en este caso por una mezcla, para el verde, de especies autóctonas y foráneas, una caminería sinuosa, pavimentos de piedra, de granito, y todo ello, además, mantenido en una condición tan impecable que no hace más que despertar la envidia de esta crítica montevideana...

EC – ...No sabes que contento dejas al intendente con ese calificativo.

RC – Pero ni que hablar, porque además desde temprano, apenas apareció la primera luz aquí en el Prado, la luz natural, se está barriendo a escoba, palmo a palmo, no hay ni una bolsa de nylon, ni siquiera las hojas que tanto lo caracterizan a esta época del año.

Y del otro lado del río, en la vereda de enfrente, ese hermosísimo Parque Robaina, aquí un monte nativo, las playas de arena, esa vegetación más intrincada, todo lo cual hace que este otoño resulte realmente multicolor y sumamente atractivo.

A ello podríamos agregar la laguna del medio que está con lugar habilitado para baños en parte y ni que hablar el hecho histórico fundamental de Florida, la existencia aquí de la Piedra Alta al pie de la cual me encuentro: esa explanada de piedra que oficia un poco de balcón sobre el río y en el cual se leyó la famosa proclama que declaraba írritos, nulos, disueltos, todos los actos de incorporación, aclamaciones y juramentos arrancados a los pueblos de la Banda Oriental; y no sigo porque no me acuerdo del todo.

Siempre y cuando sea ésta, que está cubierta de placas aquí al pie del puente más característico, la Piedra Alta, porque según vine a enterarme en este viaje, existe otra piedra que algunos opinan fue desde la que verdaderamente se escuchó la proclama y está exactamente debajo de la terraza de un precioso parador municipal, que ha dejado un cuadrado del vidrio precisamente para que veamos esa piedra que algunos opinan fuera desde la que originalmente se escuchó la declaratoria.

EC – ¿Es esa la piedra, intendente?

JG – Esa es la polémica sin duda...

EC – ...Por lo menos da para conversar. (Risas)

JG - Nosotros optamos por mantener la polémica. No olvidemos que la historia nuestra ha sido permanentemente motivo de ello, a tal punto que el centenario se celebró en el mes de setiembre y el bicentenario lo celebramos en abril, a la luz de los últimos documentos aparecidos.