Medio Ambiente

Caso Climategate: razón para negar responsabilidades

El caso del "Climategate" da un nuevo impulso a los escépticos que niegan la realidad de la responsabilidad humana en el calentamiento global.


Si bien existe un amplio consenso acerca de que el planeta experimenta una modificación climática, también hay un amplio grupo de detractores que niegan que el responsable del calentamiento global sea de origen humano.

Un ejemplo serían los estadounidenses, los primeros contaminadores per capita del mundo, en donde según una encuesta publicada este lunes por CNN/Opinion Research Corp, sólo el 45% de los norteamericanos estima que el calentamiento global es un hecho y que este fenómeno se explica por la actividad humana.

Según informó Radio Francia Internacional, el escepticismo en este país es superior al de 2007, cuando el 56% compartía el concepto de un aumento de la temperatura y de la responsabilidad del hombre.

Esta corriente de opinión "negacionista" se sintió fortalecida con el reciente "Climategate", el caso de los mensajes electrónicos jackeados de científicos en Inglaterra que presuntamente demostrarían que la comunidad científica altera datos para exagerar el efecto humano sobre el cambio climático.

En el campo conservador, que lidera la corriente de los escépticos, cuatro representantes republicanos escribieron a la directora de la Agencia de Protección Ambiental (EPA) pidiéndole que detenga su plan, anunciado este lunes, para regular las emisiones de dióxido de carbono.

Por otro lado, en el terreno mediático, el canal de noticias Fox News se ha abocado a explicar cómo la mayor regulación estatal y los impuestos verdes que Obama defenderá en Copenhague llevarán el país a la ruina.  

Pero los argumentos para oponerse al consenso sobre el cambio climático no son sólo económicos. Al poderoso lobby petrolero se añade una oposición de tipo religioso, por parte de quienes estiman, desde un punto de vista bíblico, que Dios ha puesto en la Tierra recursos naturales para que el hombre disponga libremente de ellos.

Además, la corriente escéptica tiene también sus defensores en el campo científico.

En Francia, uno de sus adeptos más respetados es el geofísico y ex ministro de Educación Claude Allègre. El ex funcionario del gobierno del socialista Lionel Jospin cuestiona el papel del hombre en el calentamiento global y minimiza el fenómeno.

El científico asegura, además, que no hay uno sino varios climas en el planeta, que están sujetos a cambios imposibles de prever, y denuncia las escalas temporales utilizadas para medir las fluctuaciones de las temperaturas.