(emitido a las 7.39 hs.)

JUAN ANDRÉS ELHORDOY:
En Punta del Este hay turistas en los cuatro puntos cardinales.

El fin de semana largo será recordado en este balneario como "el más multitudinario y pródigo de los últimos 10 años". Así describe La Nación lo que ha ocurrido en el principal balneario además de destacar que aumenta en forma importante el número de turistas que llegan de Brasil, que ingresan a los locales comerciales sin preguntar precios y suelen recorrer las calles puntaesteñas con sus bolsas y sus productos comprados.


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JAE – Quien se ha ocupado de estos datos es Marcelo Gallardo, corresponsal de En Perspectiva y de El Espectador en Punta del Este.

MARCELO GALLARDO:
Como tú bien decías, estos dos fines de semana –el de Navidad y el de Año Nuevo– han impactado, no solamente hay una fuerte presencia de brasileños y muchísimos argentinos; hay un dato que a veces olvidamos porque generalmente asociamos turismo con visitantes extranjeros y es que hay una gran cantidad de turistas de todo el país –basta ver las chapas de los autos–, y de zonas de alto poder adquisitivo. Se ven camionetas uruguayas de muy alto valor, lo que sin duda también refleja el estado de la economía nacional y algunas temporadas atrás no se veía.

JAE – ¿Coincidís con este mote de "fin de semana largo más importante de los últimos 10 años"?

MG – No sé, no tengo números, te hablo de sensaciones. El verano pasado fue muy bueno también y hubo otros veranos antes de la crisis de 2002, como el de 2000/2001 en el que un día hubo que cerrar La Barra, la Policía puso un cartel en el frente del puente y dijo "no va más" y no entró más nadie porque era imposible llegar.

El sábado, viniendo desde José Ignacio a la altura del balneario Buenos Aires ya empezaba la trancadera, estamos hablando de unos 10-12 kilómetros hasta el puente de La Barra. Ahí ya había que parar el auto, el tránsito era muy dificultoso, lo que habla a las claras de que había una multitud de gente, no sólo de gente que vive al este del arroyo Maldonado sino también de gente que concurre a la playa y a la movida nocturna. Luego, el sábado a la noche, hubo cuatro o cinco acontecimientos sociales en la zona del este de Maldonado. Por ejemplo la inauguración de la muestra de Le Corbusier, en la que había mil sillas, todas ocupadas, y mil o dos mil personas más. En el ámbito del escultor Pablo Atchugarry, en la ruta 104 en Manantiales, habrían tres mil personas; llegar a lo de Atchugarry era una tarea muy complicada, había que ser medio baqueano para poder llegar en tiempo y forma y apelar a toda la destreza para poder salir del atascadero que se había armado en la zona de la ex ruta 10, en la parte que conecta La Barra con Manantiales y José Ignacio, no solamente desde La Barra hacia Manantiales sino también desde José Ignacio hacia Manantiales. Esto habla a las claras de que este fue el fin de semana, es muy difícil que se logre más gente, sería imposible.

JAE – Pero en el caso de la muestra de Le Corbusier y lo que está exhibiéndose en el salón de Pablo Atchugarry son lugares recomendados.

MG – Claro, la calidad del artista no solamente es conocida por todos los uruguayos sino también por muchísimos extranjeros, a tal extremo que yo conozco el caso de un apartamento de 1.800 metros cuadrados que luce una magnífica escultura de Atchugarry en el living.

JAE – ¿Dónde está ubicado ese apartamento?

MG – En la zona de la Parada 19, su propietario tiene en el living una escultura de Atchugarry, grande. Y por ejemplo la Estancia Vik en José Ignacio, cuyas habitaciones han sido intervenidas por artistas uruguayos, también tiene en uno de sus salones principales una escultura muy grande de Atchugarry. Y lo que ha hecho Uruguay al reconocer a Punta del Este: quien ingrese por la rambla de Punta del Este –y eso es una iniciativa del actual ministro de Turismo, Héctor Lescano– verá una espléndida escultura de Atchugarry en la entrada, en los jardines de la Liga de Fomento, lo que demuestra el reconocimiento de todo el Uruguay al artista compatriota y ya se ha demostrado como uno de los hitos que tiene Punta del Este para que conozca quien venga.

JAE – ¿Qué otros hechos del fin de semana destacarías?

MG – Fue el aniversario de la galería Sur, de la familia Castillos, que también fue otra movida interesante. También hubo una serie de acontecimientos. El sábado en el hotel Conrad entraron 17.000 personas a la sala de juego y los restaurantes no daban abasto, también lo que ocurre en el entorno del Nogaró en la entrada de Punta del Este. Una actividad de las cual Punta del Este se jacta –ya que es una característica que la diferencia de los balnearios argentinos– es una fuerte movida dentro de las puertas de casas y apartamentos. Basta ir de noche por la rambla Lorenzo Batlle, en la cual ha habido un crecimiento inmobiliario muy importante, para ver en cada uno de los grandes apartamentos que se han terminado en los últimos años pequeños encuentros sociales. Son reuniones de 10-12 personas, generalmente de turistas –en realidad ya no son turistas porque se trata de residentes que han hecho inversiones fuertes y tienen su apartamento acá–, que los sábados de noche organizan pequeñas reuniones sociales para agasajar a sus amigos. Hay una multitud de encuentros de todo tipo que hacen a la vida del balneario.

JAE – Ya que mencionaste el tema casinos, hay un artículo del sitio web noticiasgaming.com, especializado en casinos, que destaca a Punta del Este y hace mención a la importancia que tiene para este año en particular la competencia Conrad-Nogaró –los dos casinos que hay en la Punta, a los que se suma el Mantra– y maneja cifras realmente escalofriantes. Dicen que en toda la temporada la cantidad de apuestas que pueden recibir los tres casinos podría alcanzar los 10 millones de dólares. ¿Cómo es eso? ¿Estuviste por allí, tuviste oportunidad de ver ese tipo de despliegues, de apuestas que rompen los ojos?

MG – Me parece que se queda corto.

JAE – ¿La cifra de 10 millones de dólares se queda corta?

MG – Te digo un caso: 10 millones de dólares es lo que facturaba el casino Nogaró, hace 30 años, por año.

JAE – Esto está referido a la temporada.

MG – Claro, pero sumale el casino del Conrad, la sala de juego que tiene el Nogaró en el shopping, la sala de juego del Argentino Hotel de Piriápolis... Esa cifra de 10 millones de dólares era la que recababa el Nogaró en la década del 70-80.

El juego es la propia vida de Punta del Este desde los años 30, cuando se inauguraron los casinos –creo que un poco antes había uno–. Por ejemplo el casino San Rafael y el casino Nogaró, que eran casinos privados hasta el año 48 y hasta el 50 y algo respectivamente, y luego de una explotación privada de 10 años pasaron a la órbita del Estado uruguayo. Luego, en 1997 fue inaugurado el casino privado del Conrad. A tal extremo es así que los grandes cazadores de jugadores de Las Vegas vienen en verano a Punta del Este a detectar jugadores fuertes de la región para invitarlos a ir a Las Vegas con todo pago.

En los años 90 vi a un conocido productor televisivo argentino perder más de 200.000 dólares en una noche en el casino. O por ejemplo gente que jugando en el punto y banca en un pase pone 5 o 10.000 dólares porque les permiten jugar no solamente dentro de su lugar sino aparte. He visto esfumarse fortunas en segundos, en lo que demoran en salir cuatro cartas. Hay fuertes sumas, a tal punto que hace algunos años estaba la titular de la Organización Mundial de Salud, una funcionaria norteamericana de rango, que se asombró por lo que se jugaba en las salas de juego de Punta del Este mientras que en América del Sur era muy difícil juntar el dinero para una campaña de salud siquiátrica, por ejemplo. Ella no entendía lo que había visto en las salas de juego privadas y públicas de Punta del Este; ver jugadores sudamericanos jugando esas sumas tan impresionantes y que después los gobiernos no pudieran juntar determinada cantidad para atender la salud siquiátrica de América del Sur, que para ella era mucho menos de lo que estimaba se jugaba en una noche.

JAE – Cerremos con celebridades o con gente importante. Siempre ocurre que Punta del Este llama la atención, tú estuviste ayer con el presidente Tabaré Vázquez, te lo encontraste en el puerto.

MG – Él está aquí desde antes de fin de año, está con su familia, su señora, sus hijos, sus nietos, amigos cercanos. Una de sus actividades principales es la pesca y tiene una particularidad: la realiza solo. Él sale solo, con la tripulación de la embarcación que hay en el Puerto de Punta del Este, y pesca durante horas. Me imagino que son horas que él aprovecha para la reflexión, para desenchufarse, y creo que todo jefe de Estado lo necesita, algunos dicen que el esparcimiento de un jefe de Estado es una razón de Estado. El presidente es todo un baqueano en materia de pesca, ayer justamente hizo una salida, estuvo en varios lugares, y creo que le fue bien, me dijo que estaba contento con el tema. Más allá de las piezas que pueda lograr me parece que es un momento en el que está solo y en el que irá analizando muchas cosas que tiene en la cabeza en la medida que el pique se sucede en la mañana de Punta del Este.

JAE – Es interesante porque de hecho lo que tú trasmitís también está en El País de hoy, en la foto de Vázquez con el marinero, él levantando los dedos. Pero claro, no es habitual, generalmente el que sale de pesca –más allá de que es una actividad tranquila– sale con amigos, ¿no?

MG – Yo lo he visto varias veces pescando acá y creo que solamente en algún par de ocasiones lo vi acompañado por un familiar o por uno de sus colaboradores más cercanos, pero generalmente es una actividad que él hace sólo, bien temprano en la mañana y durante varias horas. Lo importante también para Punta del Este es que el presidente de la República camina solo por el Puerto de Punta del Este, lo que fue detectado por muchísimos turistas argentinos. Vázquez es una persona muy conocida por el público argentino y que ellos vean al presidente de la República caminando sin custodia –sólo estaba el conductor del auto que lo arrimó hasta el puerto, incluso él se tuvo que bajar del auto para correr una barrera a los efectos de tener el auto listo en la zona del muelle principal– es una imagen que trasmite Punta del Este; el presidente no sólo está descansando sino trabajando por el turismo, porque los argentinos empiezan a tomarle fotos y empieza a circular el rumor "mirá, ese es el presidente uruguayo caminando sin custodia". Esa es otra señal que da Punta del Este, me parece muy difícil que en algún otro balneario de la región otro presidente de América del Sur pueda caminar solo por un lugar con muchísima gente. Fue saludado por los trabajadores del puerto, por turistas que se acercaron, algunos incluso para sacarse una foto con él. Hay una foto del compañero Ricardo Figueredo –que debe estar publicada en el diario– donde Vázquez justamente aparece caminando solo por el Puerto de Punta del Este.

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JAE – Además de las fotos, además de las modelos que aparecen desfilando en muchos diarios de hoy, hay una crónica que vale la pena repasar y tiene que ver con el entorno y con lo que dijo Roberto Giordano en su desfile.

No es común que los turistas de un balneario aplaudan a las autoridades de la Aduana o de Impositiva, ya que los impopulares funcionarios del Estado son los encargados de cobrar tributos o revisar valijas. Pero con el peluquero Roberto Giordano y su tradicional desfile de Punta del Este todo eso es posible. Primero ocurrieron una serie de bloopers en el evento que tuvo lugar anoche en el Hotel Conrad. La trasmisión de la televisión local comenzó antes que el desfile y permitió ver en vivo algunas indiscreciones del peluquero, quien rezongó con periodistas y fotógrafos, ironizó con inspectores de la Dirección General Impositiva (DGI) de Uruguay, e intercambió elogios con la madre de Ricardo Fort.

¿Sabía que estaba en vivo para la televisión uruguaya o pensaba que el canal 11 de Maldonado comenzaría la emisión en directo más tarde? En esos momentos previos al desfile, Giordano sorprendió con un pedido de aplauso para la DGI y se encargó de hacer público el interés de los inspectores por estar en la fiesta. "Los de la DGI pidieron seis asientos, ¿dónde están sentados?", preguntó Giordano. "Uno andaba por ahí tomando mate, no tenemos nada que esconder", dijo Giordano, y pidió un aplauso para las autoridades impositivas. Luego hizo referencia al problema que tuvo con la vestimenta para la fiesta. En medio del desfile, Giordano dijo: "Quiero aplaudir a la Aduana de Colonia, pero ahora en serio, no en broma, al director de Aduanas, Ricardo Prato, que nos apoyó en forma incondicional, y al ministro de Turismo, Héctor Lescano", expresó el peluquero.

Vale agregar que con la información surgida el fin de semana parece que lo que aceleró el trámite para que Giordano tuviera la ropa que trajo de Argentina y que venía sin declarar es una declaración de interés nacional que salió en las últimas horas desde Poder Ejecutivo y que habilitó a la realización de este desfile.

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