Las principales líneas aéreas que operan en Uruguay enviaron al ministro de Defensa, Gonzalo Fernández, una nota en la que expresan que es "enorme la preocupación" generada por los retrasos. Señala que los problemas que en plena temporada presenta el Aeropuerto Internacional de Laguna del Sauce retrasa una gran cantidad de salidas y llegadas de los vuelos.

Las empresas aducen que la situación es "gravísima" no sólo para los directamente afectados, sino también "para la imagen del país". "Podemos entender la falta de personal especializado, pero no podemos aceptar pasivamente que no haya ninguna reacción", afirman.

En quince días de actividad (del 25 de diciembre al 10 de enero), Pluna, la principal operadora, acumuló 9.000 minutos de retraso, lo que afectó a 8.000 pasajeros. El gerente de Servicio al Cliente de la aerolínea, Sergio Riolfo, comentó a El Espectador que en el caso de la aerolínea de bandera uruguaya, los perjuicios se acumulan, ya que se registran pérdidas de conexiones debido a los retrasos.

Además, en el caso de Punta del Este, se suman problemas con el tráfico aéreo argentino. El director de la Dirección Nacional de Aviación Civil e Infraestructura Aeronáutica (Dinacia), Daniel Olmedo, dijo al diario Últimas Noticias que detrás de todo esto no existe ninguna medida gremial, sino que "falta personal". Añadió que para estar "cubierto" necesitaría disponibles 16 controladores y actualmente hay siete profesionales, apoyados por un octavo que reparte sus funciones entre Carrasco y Punta del Este. Para operar con normalidad, se necesitan tres controladores por turno y un "retén" ante la eventualidad de que suceda un imponderable con alguno de ellos.

Laguna del Sauce
A nivel oficial se afirma que hay jornadas con más de 140 operaciones (despegues y aterrizajes). La propia estructura del aeropuerto no facilita tanto tráfico, porque, entre otras cosas, hay una sola pista en operaciones.

Olmedo advirtió que "todas se concentran en el horario que todos quieren volar: la mañana y la tarde". Esto genera un embudo por falta de personal e infraestructura.

Los controladores tienen que trabajar tres horas y descansar una, tal como lo marca la normativa. El inconveniente surge en la noche, porque cuando hay un solo trabajador, en vez de descansar una hora, lo hace 30 minutos. En ese lapso de tiempo, hay que parar las operaciones.

¿Qué explica la falta de controladores aéreos?
Uno de los motivos tiene que ver con el Mundial de Sudáfrica. Varios son los que han sido tentados para trabajar allí. De acuerdo a lo que publica Últimas Noticias, un controlador de tránsito aéreo que recién ingresa gana 15.000 pesos. La oferta de los sudafricanos puede llegar a los 6.000 dólares, más gastos de alojamiento.

En cuanto a las perspectivas de esta problemática, la situación se normalizará totalmente en febrero por dos razones: menor actividad en la terminal aérea y la incorporación de 11 nuevos controladores.

Con relación a su responsabilidad por la demora en la incorporación de personal, Olmedo insistió que esta situación fue advertida por Dinacia hace casi un año y medio.