(emitido a las 07.37 Hs.)

JUAN ANDRÉS ELHORDOY:
"Nosotros sabemos que no son más de 300 menores que deberían estar presos, tenemos que decir las cosas como son y con esos menores recluidos, como deben estar, la seguridad mejoraría en forma notoria", manifestó el Jefe de Policía de Montevideo, Walder Ferreira, al diario El País. Agregó que "no estoy diciendo que desaparecería la delincuencia porque esto no es así, pero el problema sería reducido sensiblemente y todos lo notaríamos".

Paralelamente, se supo el fin de semana que el futuro presidente del INAU, Javier Salsamendi, adelantó que va a enviar del gobierno al Parlamento una ley con las características de la emergencia carcelaria para hincarle el diente al problema de la delincuencia juvenil.

EMILIANO COTELO:
Lo que está de por medio es por qué los menores se fugan de dependencias del INAU, por qué especialmente se fugan aquellos más peligrosos.

Con el diario Últimas Noticias habló un jerarca policial que dijo: "son unos 10 menores peligrosos los que mantienen de rehén a la sociedad montevideana", y agrega que "está hablando de los adolescentes que perpetraron los violentos casos ocurridos en los últimos días. Tres de quienes participaron en el sangriento atraco a un restobar ahora están detenidos, pero estos jóvenes –según supo el matutino- ya fueron arrestados en varias oportunidades y todas las veces se escaparon de la Colonia Berro".

JAE – Incluso uno de ellos estaba vinculado a la banda de la granada, que en mayo cometió varios asaltos en el barrio de Malvín.


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JAE – Estamos recibiendo al ministro del Interior, Eduardo Bonomi.

EDUARDO BONOMI:
Yo estaba preguntándome cuántas veces en 25 años tuvieron como centro del panorama nacional este tipo de noticias.

EC – Lamentablemente muchas, ¿no?

EB – Sí.

EC – Es uno de esos problemas casi permanentes en la sociedad uruguaya.

EB – Sí, efectivamente.

JAE – ¿Usted coincide que el asunto mejoraría si cerca de 300 menores quedan presos como se debería establecer en un principio?

EB – Fíjese que ustedes recién mencionaban al menor que estuvo en la banda de la granda. En 10 días fue detenido tres veces. Cada vez que salió, siguió haciendo lo mismo. Así sucede con unos cuantos de ellos. No sé si son sólo 10, como dijo un jerarca. Pero entre 10 y 300 deben andar y sucede eso que acaban de manifestar.

JAE – Aparecen manifestaciones de jueces de menores que definen que vayan al INAU, del INAU se escapan, vuelven otra vez, la Policía también se queja de esta situación. ¿Cómo se corta esto? Javier Salsamendi dijo que se va a enviar al Parlamento un proyecto parecido al de la emergencia carcelaria que se ha presentado en las últimas horas. ¿Cómo se arregla esto en definitiva, cómo se corta para que no se siga repitiendo el tema como ha ocurrido desde hace 25 años por lo menos?

EB – He hablado en la última semana con Javier Salsamendi. Respecto al proyecto de ley, él me manifestó que tenía intención de hacer esta petición puesto que algunas cosas que él pensaba no se pueden incluir en la Ley de Emergencia Carcelaria. Dijo que habrá que mandar otro, pero el gobierno no lo ha tratado. Creo que si lo tratan no va a tener problema en hacer algo parecido, pero todavía no lo ha tratado.

No es sólo Javier sino también la ministra nos planteó algún tipo de colaboración para superar este problema. En realidad esta pregunta sobre el INAU corresponden al director del INAU o al MIDES, porque el problema de la seguridad es un tema nuestro, el tema del tratamiento a los menores después de detenidos no es un tema nuestro. De todas maneras, nosotros entendemos que en lo posible vamos a trabajar para ayudar.

JAE – Desde el punto de vista de la sociedad es lo mismo; o sea, importa poco quién es el responsable final sino lo importante es el problema porque aquí aparecen dos jerarquías, dos ministerios diferentes, pero la problemática parece ser la misma.

EB – No, efectivamente. El problema es que la pregunta tiene que ser de cómo se soluciona el problema de la contención de los menores luego de detenidos, no puede ser dirigida al Ministerio del Interior sino tiene que ser dirigida al INAU. Javier no asumió y ya se está preocupando por el tema, es decir tiene la preocupación

JAE – ¿Usted coincide que hay un problema, que hay unos 300 menores que deberían estar presos y no lo están, coincide que ese es un factor que explica en buena medida la situación actual de inseguridad que se vive?

EB – Sí, coincido en que no hay instalaciones apropiadas para la contención de los menores. Se cometen delitos que son graves -no es lo que antes decíamos ‘infanto-juveniles’- se los detiene, se escapan y siguen haciendo lo mismo; es un problema importante.

JAE – La Policía, que sí depende de su Ministerio, presta asistencia al INAU en la guardia perimetral de la Colonia Berro, también con equipos de choques cuando intervienen en amotinamientos. Sin embargo, la seguridad interna de los establecimientos está a cargo del funcionario del instituto. ¿Esto puede cambiar, esto puede ser modificado, la Policía puede extender su colaboración, el Ministerio puede extender su colaboración en esta otra área?

EB – No estoy seguro que vaya por ahí la cosa. Creo que va por el lado de instalaciones más seguras. Hay una zona muy amplia que no está en buenas condiciones y eso explica parte de lo que sucede. También tiene que ver con el trato interno. Pero me parece que la Policía no es la más adecuada para ese trato más cuando estamos planteándonos que las propias cárceles tienen que salir de la órbita de la Policía, cosa que no va a pasar rápidamente pero que nos lo estamos planteando incluso en la multipartidaria de seguridad.

Sí es cierto que estamos hablando de algún tipo de cooperación; no puedo ir más lejos que esto.

JAE – ¿Pero que va más allá de lo que está planteado hoy?

EB – Por supuesto.

EC – Da la impresión que lo mínimo que hace falta es que se institucionalice algún ámbito de coordinación, porque tampoco es muy lógico que desde una dependencia del Estado se salga a señalar a otra como acaba de ocurrir con estas declaraciones que hizo el Jefe de Policía de Montevideo.

EB – No, es evidente que hay un ámbito de coordinación. Ya de alguna manera incipientemente existe porque es así la Policía detiene y luego tiene que volver a detener a los mismos menores que están cometiendo delitos. Yo creo que estamos trabajando y veremos cuan rápido podemos tener algún tipo de solución.

EC – ¿Es un problema de dinero? ¿Es un problema de recursos?

EB – Seguramente, pero nosotros estamos con algunas ideas para el tema cárceles que lleva a por lo menos superar el problema inmediato.

EC - ¿Cómo es eso?

EB – Nosotros hemos hablado de la construcción de acuerdos público-privados y trataremos de solucionar el problema de cárceles por ese lado.

EC – ¿Usted dice que un mecanismo similar podría aplicarse en el caso del INAU?

EB – Perfectamente.

EC – ¿Pero está previsto eso?

EB – Hemos hablado pero eso necesita leyes que hoy no hay. En el tema cárceles vamos a transitar por el acuerdo público-privado y en este momento estamos hablando con empresas de los más diversos países, incluido Uruguay por supuesto, y creo que lo vamos a solucionar así. Veremos qué se puede hacer en este tema de los menores infractores.

JAE – El País informó ayer que la Jefatura de Policía de Montevideo viene planteando una reformulación de su estrategia para enfrentar esta ola de atracos de los últimos tiempos, ola de atracos que es cada vez más violenta, los hechos son cada vez más violentos. ¿Qué significa esto, por dónde vienen estos cambios?

EB – Yo he anunciado desde hace tres meses, o más, lo que pensamos al respecto en el Ministerio del Interior. Muchas veces los cambios necesitan presupuesto, necesitan recursos que hoy no se tienen. Nosotros estamos trabajando con los mismos recursos que en los cinco años anteriores, de todas maneras algunos cambios hemos hecho.

En el Ministerio de Trabajo yo anunciaba lo que iba a hacer y ahora muchas veces hablamos sobre lo que hemos hecho y no lo digo antes.

Es notorio que hemos hablado de prevención, de información, de inteligencia, hemos hablado de policía comunitaria, de mesas ciudadanas, de despliegue nacional de la Guardia Republicana, de una distinta política de cárceles y prisión. La privación de libertad forma parte de la política de seguridad y entendemos que hay que introducir cambios que ya los estamos introduciendo. El gobierno anterior nos dejó varias cárceles y módulos en construcción. Ni bien tengamos el primero, según las empresas que están construyendo estaría pronto el mes que viene, podríamos empezar una política de redistribución y mejora de la situación.

JAE – El Observador publicó ayer datos del Observatorio de Violencia y Criminalidad de su Ministerio. Los datos corresponden al primer cuatrimestre, período enero-abril. Se comprende el final del período del gobierno anterior y el principio de este. Se destaca un crecimiento de rapiñas del 25%, de los hurtos de 2,5%, y de los copamientos de casi 17%. ¿Estas cifras qué reflexión le merecen?

EB – En una nota anterior de El Observador se indicaba que en el primer gobierno de Sanguinetti aumentó en 60% la rapiña; en el de Lacalle el 74%; en el segundo gobierno de Sanguinetti el 50%; en el de Batlle el 23%; en el de Vázquez el 22%; y estas cifras de ayer abarcan a este gobierno solamente en dos meses –marzo y abril-. Según el Jefe de Policía, no según las cifras del Observatorio que todavía no las tenemos pero según las cifras del Jefe de Policía en mayo habría disminuido. Hay una tendencia a que sigue creciendo pero disminuye el porcentaje con que crece y nosotros aspiramos a que disminuya todavía mucho más. Pero tenemos que trabajar con el presupuesto que nos pretendemos dar para esto pero todavía no lo tenemos.

De todas maneras, hay que atar esto con el comienzo de la nota que es: qué sucede con los delitos cometidos por menores que se han escapado, dentro de este porcentaje.

JAE – ¿Y sabe cuánto es?

EB – No, pero me parece que es más alto de lo que se cree.