La DGI había remitido a colegios privados un formulario para que le aportaran información de los padres de los alumnos, y de esa forma cruzar con otros datos para comprobar la capacidad contributiva de cada familia.

De esta forma, sumado a otros chequeos similares, la autoridad tributaria procura reducir la evasión y elusión de impuestos. El organismo tributario considera que la reguladora le dará la razón y seguirá adelante con la medida de recolección de información.

Los colegios han planteado dudas sobre la obligatoriedad de dar la información requerida e incluso si al hacerlo no estaban violando disposiciones sobre datos de las personas.

El Director General de Rentas, Pablo Ferreri, fue consultado por El Espectador y al respecto explicó que la DGI no sólo ha pedido información a colegios sino que ha hecho relevamiento en otras áreas.

"La idea es tener un indicio de la capacidad contributiva de los personas físicas para poder contrastarlas contra las declaraciones juradas de los ingresos que ellos mismos realizan", dijo Ferreri.

El jerarca agregó que hasta ahora "hemos pedido datos a inmobiliarias por ventas superiores a 250.000 dólares, a automotoras por ventas mayores a 39.000 dólares, a las marinas con respecto a los yates con eslora superior a los 7 metros" y también "hemos pedido a colegios sobre quienes son los responsables de los alumnos para contrastar esa capacidad contributiva contra sus declaraciones juradas".

Sobre la suspensión del relevamiento de información en colegios, el director de la DGI dijo que esperaba la resolución de la Agencia de Gobierno Electrónico y Sociedad de la Información (Agesic), la unidad reguladora del manejo de datos y que confía en que habrá un pronunciamiento favorable para seguir con esa práctica.

"Estamos muy convencidos de que estamos actuando dentro de la legalidad, pero entendemos que puede haber alguna inquietud y que, en un clima de cordialidad, esperaremos que Agesic se expida con respecto a esta consulta y en función de eso continuaremos la actuación", sostuvo.

Por otra parte, Ferreri explicó la forma en que unos 10 mil contribuyentes, del total de 100 mil que deben presentar declaración por IRPF, podrán hacerlo por Internet en una experiencia piloto.

"Unas 10 mil declaraciones serán incluidas en un plan piloto en el cual le enviaremos una carta a los elegidos con un pin, que estará disponible en la red Abitab y podrán acceder a una serie de servicios desde la web".

Uno de éstos "será poder ver la declaración jurada en borrador del IRPF, dándole OK, no tendrán que hacer ningún tramite en ninguna oficina. Solo tendrán que ir a pagar el saldo o ir a cobrar el saldo a favor que tengan en una red de cobranzas", sentenció el jerarca.

El resto podrá ir a oficinas de la DGI para asesorarse sobre cómo hacer la declaración, o contratar servicios de un contador público o gestoría.