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OPP impulsa impuesto "el que rompe, paga"

La Oficina de Planeamiento y Presupuesto (OPP) trabaja en un nuevo proyecto de ley sobre impuesto al sector agropecuario, con el que se procura que los productores rurales paguen tributo para financiar las obras de infraestructura en base al uso que hacen de la misma.

El presidente José Mujica encomendó el análisis económico y tributario de esta iniciativa a la OPP, la misma dependencia que elaboró el proyecto de ley remitido esta semana al Parlamento, para gravar a los propietarios de extensiones de tierra superiores a 2.000 hectáreas Coneat. La propuesta fue informada en el programa En Perspectiva, por el subdirector de la Oficina de Planeamiento y Presupuesto, Jerónimo Roca
 
Consultado si la OPP considera que el sector agropecuario debiera pagar más impuestos y si eso esta a consideración, Roca dijo que "se justifica plenamente que pague este impuesto", por el de la tierra, mientras que sigue en proceso el ajuste tributario anticipado hace algunas semanas, pero no detallado, sobre cambios en el límite de pago de Imeba por IRAE.
 
El Imeba -Impuesto a la Enajenación de Bienes Agropecuarios- grava la venta de bienes como trigo, maíz, leche, ganado, etcétera. Los que pagan este impuesto no abonan el IRAE, que es el impuesto a las Rentas de la Actividad Empresarial.
 
El límite está en tener ventas anuales por dos millones de unidades indexadas o propiedad de campo hasta 1.200 hectáreas del tipo de índice Coneat 100.
 
La referencia Coneat surge por una ley de 1968 donde se dispuso la creación de un grupo de trabajo encargado de determinar la capacidad productiva de cada inmueble y la capacidad productiva media del país, a los efectos de esta ley en términos de lana y carne bovina y ovina en pie. Ese grupo se denominó "Comisión Nacional de Estudio Agroeconómico de la Tierra", de donde sale la sigla Coneat.
 
Por lo tanto, los que tienen ventas por menos de dos millones de unidades indexadas, unos 245.000 dólares, o campo por menos de 1.200 has índice Coneat 100, pagan el Imeba, o tienen la opción de tributar por IRAE. Lo que se busca cambiar es esa frontera.
 
Roca apreció, a título personal, al Imeba: "Es un mal impuesto, que tiene un mal diseño, que tiene un efecto cascada, que es inequitativo y que debería desaparecer, pero es una fuente importante de los gobiernos departamentales, no se puede borrar de un día para otro. En segundo lugar, no se puede estar en contra del Imeba y a favor del 1 %. O son malos los dos o son buenos los dos, si se pide que se quite el 1 %, que se pida que se baje el límite del Imeba. Ambos son impuestos a las ventas. Mi opinión personal es que el impuesto a los semovientes debería desaparecer cuando tengamos diseñado un rompa y pague para compensar a los gobiernos departamentales. Cuando tengamos un rompa y pague, quien rompa la carretera pague, que está en estudio de la OPP, podremos empezar a hablar de eliminar el 1 %".
 
El subdirector de OPP explicó que "El rompa y pague es un impuesto de suma cero en el cual cada productor aportará en función del uso y como consecuencia el rompimiento que hace de la infraestructura nacional para sacar su producto". Y agregó: "Es un impuesto de suma cero, uno pone lo que rompió. No es un impuesto ni equitativo ni redistributivo como este, en el que el primer grupo de productores, los que tienen menos de 2.000 hectáreas Coneat 100, pese a no pagar el impuesto, se benefician con la caminería rural también".
 
La OPP aún no definió qué gravará el impuesto. "Está en estudio, todavía no sabemos cómo funcionará, puede ser con método sofisticado satelital, puede ser con método de arcos como tiene Chile, puede ser con un impuesto óptimo a los combustibles, considerando mantenimiento, congestión, polución, vidas. Pero le repito, está en estudio, no podría adelantarle mucho más", dijo Roca. Y concluyó: "El presidente está preocupado por el tema y nos ha pedido celeridad en el estudio, pero no puedo darle fechas".