Diego Bonilla, presidente de Fucvam, dijo a El Espectador que la federación comparte la importancia que el Gobierno le ha dado al tema, pero entiende que se debe llamar a una gran mesa de negociación para que las buenas intenciones de esta administración se transformen en una política de Estado.

"Coincidimos con el planteo que hace el Gobierno de que la vivienda es una urgencia nacional. Lo que sí planteamos es que para cambiar los déficit habitacionales del país hay que hablar más de política de Estado que de una administración del Gobierno.  

Entendemos que el Gobierno andaría mucho más en ese rumbo de cambiar ese déficit habitacional si llamara a una gran mesa para discutir realmente el problema de la vivienda. Porque en Uruguay hay herramientas que se mal usaron y entendemos que si esta administraron quiere caminar el rumbo debería llamar a una gran mesa de  encuentro para que pudiéramos hacer propuestas pensando más que nada en que sean propuestas de Estado que vayan más allá del período de administración", dijo.

Consultado por el Plan Juntos, Bonilla dijo que está siendo discutido en el Parlamento. Dijo que a su juicio, esta idea por la vivienda social viene lenta.

"Entendemos que está muy lento para toda la expectativa que se generó planteada sobretodo desde el Poder Ejecutivo".

Fucvam también pide mecanismos de financiación para el llenado de los cupos libres en los viejos complejos de vivienda, permitiendo así el acceso a ellas de familias por debajo de los 60 UR de ingreso (32.000 pesos), familias objetivo del Fondo Nacional de Vivienda. Entienden que esto debería estar en el orden del día del Ministerio de la Vivienda y el Gobierno.

Fucvam estima que hay 100.000 personas sin techo en Uruguay. Para Bonilla, el tema de la vivienda debe ser prioridad del Poder Ejecutivo.

"Entendemos que el problema de la vivienda es prioridad y estamos de acuerdo con ese diagnóstico que hizo el Ejecutivo y estamos para darle una mano. Y siempre que tengamos alguna diferencia de criterios la vamos a plantear", concluyó.