(emitido a las 8.50 Hs.)

EMILIANO COTELO:
Los cajeros RedBrou ubicados en el este del país operaron con normalidad durante el fin de semana, pese a que el consejo de Banca Oficial de AEBU había resuelto que sus militantes no repondrían efectivo en las máquinas dispensadoras.

Dice hoy la prensa que solo cuatro expendedoras de RedBrou se quedaron sin efectivo entre sábado y domingo, dos en Piriápolis y dos en el Chuy. Paralelamente, la red privada Banred cargó a tope sus terminales y por esa vía pudieron abastecerse de dinero los clientes del Banco República (BROU) que así lo requerían. Recuerden que el BROU resolvió que esas transacciones hechas en Banred no tendrían costo para sus clientes.

¿Alguna impresión directa, Juan Andrés?

JUAN ANDRÉS ELHORDOY:
Sí. Agrego que en Piriápolis ayer había un cajero automático móvil, de un banco privado, ofreciendo servicios a los clientes.

EC - Mientras tanto, el sindicato mantiene hasta hoy el paro que viene realizando en la cámara compensadora de cheques, y al respecto hay alguna información. ¿Cuál es el impacto en el clearing? "El viernes había, por lo menos, 70.000 cheques trancados por esta medida", dice el diario El País. El directorio del BROU estima que por lo menos 400 millones de dólares están fuera del sistema financiero debido a este bloqueo del clearing de cheques.

En línea está el doctor Fernando Scrigna, integrante del directorio del BROU por el Partido Colorado (PC).

¿Efectivamente son esos los números que ustedes manejan sobre el impacto de las medidas en el clearing?

FERNANDO SCRIGNA:
Sí, son las sumas y los importes que maneja la gerencia, efectivamente.

EC - ¿Y con respecto a la operativa en cajeros algún elemento adicional a los que ya mencionamos?

FS – La información es que se actúa con normalidad a través de la red privada y se viene llevando adelante así esta situación.

EC – Me llamó la atención, y por eso lo estoy llamando, un comentario suyo que apareció en la prensa del fin de semana. Sostuvo que "el Ministerio de Economía y Finanzas (MEF) y la Oficina de Planeamiento y Presupuesto (OPP) se manejan como un elefante en un bazar en la negociación con AEBU". Y no solo eso. Usted agregó que "deben retirarse de las tratativas para dejar paso a los negociadores de los propios bancos. A más de un año de iniciado el conflicto en la banca oficial, el Poder Ejecutivo debe reconocer que su estrategia fracasó. A esta altura del conflicto es evidente que como negociadores el Ministerio de Economía y la OPP actúan como si fuesen dos elefantes en un bazar", siguió diciendo. Su crítica es lapidaria. ¿Por qué?

FS – Más allá de la quizá extravagante afirmación del momento, hay un hecho que para mí es evidente. Este conflicto tiene un año y cuatro meses. Pareció ponerse un punto de inflexión el 5 de enero del 2011. Hace un año que se está negociando por parte del Ministerio de Economía y la OPP, y si usted recuerda cuando se hizo aquel preacuerdo por el cual el Ministerio de Economía y el Ministerio de Trabajo se comprometían a exhortar a los directorios de los bancos de que suspendieran los descuentos por paros distorsivos, e incluso devolvieran dinero que ya había sido descontado, los directores accedieron a esa solicitud. En el caso del BROU no fue fácil porque era un conflicto que se venía manteniendo con dureza y al otro día de votar lo resuelto por los directorios de acuerdo a lo que el Poder Ejecutivo pedía el responsable de la OPP, salió a decir que la medida era inconveniente e inaceptable que el propio presidente de la República estaba en desacuerdo con la medida.

EC – Sí, esa ida y vuelta dio mucho que hablar.

FS – Estamos hablando de hace un año. A partir de allí se suceden contradicciones hasta que el doctor Breccia tuvo que salir en aquel momento a parar este enredo en una conferencia de prensa; a decir que no, que el Poder Ejecutivo estaba de acuerdo con la suspensión de los descuentos por paros distorsivos y que todo había sido un malentendido con la OPP.

Un episodio similar ocurre ahora. En el mes de diciembre aparentemente se había negociado un acuerdo con AEBU y se le pide a los directorios de los bancos que no incluyan la escala móvil que se ha transformado en el objeto de todo este conflicto. Los directorios acceden a eso, se va a una asamblea, los funcionarios rechazan la propuesta que se había negociado por parte del Poder Ejecutivo y se convoca una nueva asamblea el 22 de diciembre. Cuarenta y ocho horas antes de esa asamblea trasciende en la prensa –por voceros y fuentes que nunca se desmienten– que el Poder Ejecutivo iba a aplicar esa fórmula, cualquiera sea la resolución que la asamblea de AEBU tomara. Cualquiera fuera la resolución, lo que se iba a aplicar era esa propuesta.

Entonces, uno se pregunta: ¿qué se espera de las consecuencias de estas idas y venidas, que podría anunciar otras? La consecuencia es que la asamblea de AEBU rechaza por segunda vez. Desde mi punto de vista, lo que está ocurriendo es que la asamblea de AEBU ahora resuelve que no negocia si no se suspende esta situación, el Poder Ejecutivo insiste, y además sale el presidente de la República a insistir...

EC – ...Sí, el jueves pasado en su audición en M24, el presidente dijo: "Pienso que no existen razones sociales de carácter profundo e interés general que justifiquen la existencia de este conflicto. No me gustan los descuentos ni las sanciones. No será posible que razonemos colectivamente atrás de una conveniencia general de toda la sociedad. Es una invitación", y después cargó contra el sistema de ascensos que entiende no puede admitirse. "Los ascensos en los bancos y en todas partes deben darse por mérito contrastable. No debería haber otra vía que el concurso. Tal vez algún reconocimiento cada tantos años por la permanencia, por la fidelidad, pero no puede ser que el sistema actual, por el hecho de estar pasando el almanaque, estoy ascendiendo, independientemente de capacitarme y de multiplicar mi capacidad intelectual", agregó Mujica.

FS – Claro, pero si usted tiene un año negociando a sus representantes que no logran convencer esto, tiene que salir al año. Estamos hablando de un año. Tiene que salir el propio presidente de la República a expresar esto. Además, con una información un poco distorsionada, porque no se trata de ascensos; acá hay un corrimiento de aumentos salariales anuales, no es incompatible con el concurso. Eso no quiere decir que yo esté de acuerdo con la escala de corrimiento móvil, pero no se puede hablar de estas cosas tan genéricamente. En el BROU no se asciende por antigüedad...

EC – ...Eso fue lo que respondió AEBU a las pocas horas del mensaje del presidente Mujica.

FS – Pero es que no puede ser que después de un año el Poder Ejecutivo no tenga claro cuál es el sistema. ¿No será el momento de que el Ministerio de Trabajo y Seguridad Social (MTSS), que es su tarea, es el especialista en el tema y tiene gente muy capacitada en esta materia al frente de la Dirección Nacional de Trabajo, se ponga al frente sin esa tutela de Economía y OPP y que llame a una negociación sin más voceros que sigan hablando unos sobre otros y agravando este conflicto que puede terminar en una situación no querida por ninguna de las partes?

EC – ...Si las cosas ocurren como usted reclama, ¿quién negociaría por la "patronal"? ¿Serían los distintos bancos?

FS – Por supuesto. Conocen el sistema y pueden buscar alternativas con creatividad. Hace un año que estamos haciendo llamados por la prensa. No hicimos declaraciones porque estamos alineados a un directorio que está trabajando con enorme seriedad en todos los temas del banco, y en este en particular. Nos llamamos al silencio prudente que requiere una situación de conflicto.

EC – Pero ahora usted decide salir y cuestiona la forma en que desde el Poder Ejecutivo se maneja esta negociación, ¿está solo en este planteo o lo ha conversado también con los directores de la mayoría?

FS – Yo hablo por mí. Por supuesto que de esto conversamos todos los días. Es un factor de enorme preocupación para el directorio, pero no voy a hablar sino por mí mismo. Después de un año no se le puede decir "tómelo o déjelo", porque además, ¿a quién favorece esta actitud? Tenemos esta posición de un lado que ya no se trata de ascensos. Yo no estoy de acuerdo con la escala de corrimiento actual. He acompañado las posiciones que intentan racionalizarla, pero no se puede decir ahora a la opinión pública que se trata de que en el BROU se asciende por antigüedad. Esa es una barbaridad, no es así. Y este directorio, y yo me incluyo, porque hace un año y medio que estoy en él, desde antes ha trabajado con seriedad y ha realizado un esfuerzo permanente por profesionalizar al BROU. Entonces, que ahora venga el presidente de la República a decir que no se puede ascender es una barbaridad.

EC - ¿Hay antecedentes de que en este tipo de cuestiones con el gremio negocien los propios bancos y no el Ministerio de Economía y la OPP?

FS – Allí están los mecanismos constitucionales. Usted sabe que los entes comerciales e industriales del Estado elaboran y proyectan sus presupuestos y los elevan al Poder Ejecutivo. El Poder Ejecutivo, con el asesoramiento de OPP, puede observarlo y lo devuelve al ente. Ahí pueden suceder dos cosas: si el ente no acepta, se agrega alguna información, y si allí no hay mecanismos que determinan que vaya a Asamblea General... Pero tampoco le estoy planteando eso. Yo estoy planteando buscar una instancia en la cual el Ministerio de Trabajo asuma el protagonismo que le conocemos. La Dirección Nacional de Trabajo tiene gente muy experiente a la cabeza, entonces son los que deben negociar.

Porque cuando la asamblea se transforma en un ámbito en la cual la prudencia de los dirigentes, que era lo necesario para arribar a soluciones, se transforma en traición, prima el discurso de la traición sobre la prudencia, se enferman esas asambleas y derivan en cosas graves, en medidas como las que se están anunciando, desproporcionadas en una estrategia que el sector radical minoritario tomó ya en el 2010. ¿Entonces a quién alimenta esta situación? ¿En qué terminamos, están los buenos de un lado y los malos del otro? Yo veo que cuando sale el presidente de la República empieza a manejarse esa idea de demonizar a los trabajadores de la clase media, que en definitiva los bancarios son trabajadores de la clase media.

Y yo reitero que no estoy de acuerdo con la escala de corrimiento tal cual está hoy. Pero no puedo decir lo que se ha dicho de ella y veo que esta batalla se va a querer ganar ante la opinión pública, donde están los buenos de un lado que quieren la reforma del Estado y los malos del otro. La reforma del Estado, si se quiere empezar por los bancos, en el BROU ya está en marcha. Pero no en marcha a partir de hace un año y medio porque se proponga la escala, está en marcha por su modificación con enormes dificultades de un banco que ha duplicado sus clientes. Hay que estar ahí adentro para ver el esfuerzo que se hace para haber pasado de 450.000 clientes a casi 900.000. Es muy difícil admitir que se hable genéricamente así del banco, que además ya está en competencia con bancos privados que tienen estrategias muy claras.

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