(emitido a las 7.38 Hs.)

EMILIANO COTELO:
Parece que la temporada turística arrancó de manera muy positiva. En los primeros ocho días de este mes de enero ingresaron 123.378 turistas, 22% más que en el mismo período del año 2011, según los datos de Migraciones que se conocieron ayer, que no considera a los visitantes de cruceros.

Estos datos se agregan a los del mes de diciembre, cuando también se registró un aumento importante en comparación con el año previo en la cantidad de turistas. En diciembre hubo 520.339 turistas, fundamentalmente provenientes de Argentina, Brasil, Chile y Paraguay.

Nos interesa profundizar en el desempeño de este sector, que se está convirtiendo en el principal rubro de exportación del país. ¿Cómo han sido las cosas hasta ahora? ¿Qué puede estar pasando en este momento en el cual varias voces hablan de una caída en el caso concreto de Punta del Este y Maldonado? Vamos a charlar con el ministro de Turismo y Deporte, Héctor Lescano.

¿Qué dice usted a propósito de estos números que se divulgaron ayer?

HÉCTOR LESCANO:
Son números de la Dirección Nacional de Migraciones suministrados a Presidencia de la República y al Ministerio de Turismo. Desde luego que son números muy alentadores porque estamos hablando de un crecimiento de un 22,4% en relación a los últimos números del mes de diciembre.

EC – Sí, 22% más en estos ocho días de enero que en los primeros ocho días de enero del año anterior.

HL – Año que fue, como se recordará, muy importante, porque como me señalaba el director nacional de Turismo, el licenciado Benjamín Liberoff, el año pasado el crecimiento de enero fue realmente muy bueno, teniendo en cuenta especialmente el crecimiento de argentinos; era la primera vez que teníamos los puentes abiertos en forma total y había circulación por todos los puentes, sobre todo por el puente general San Martín frente a Fray Bentos, cuyo corte realmente nos afectó mucho en los años anteriores.

Hay que esperar el cierre de enero y seguir trabajando para un mes un poco más difícil como es febrero. Pero son números muy alentadores teniendo en cuenta el crecimiento que habíamos tenido el año pasado. En el 2011, en relación al 2010, terminamos con un crecimiento de visitantes argentinos del orden de un 30%, lo cual significa algo muy importante, y el total de argentinos que ingresaron al país representó una cifra récord. La última cifra récord correspondía al año 1997, cuando tuvimos un flujo de visitantes argentinos realmente muy importante.

Así que el 2011, con sus tres millones de visitantes, fue un año de crecimiento general muy importante, y en particular en el mes de diciembre, con un crecimiento de argentinos del orden del 30% y casi el 10% de crecimiento de visitantes brasileños.

Desde luego, ojalá que estas cifras no solo se mantengan, sino que se incrementen en la segunda semana o en la semana final de enero, y por cierto a lo largo de todo el mes, porque estarían confirmando que efectivamente la tendencia de crecimiento se mantiene.

EC – ¿Qué pasa ahora? Estos números que ahora se divulgan dan una muy buena performance en los primeros días del mes de enero. Pero justamente en el límite de esa medición se produce el retiro de los turistas brasileños que ocupan buena parte de la costa uruguaya, en especial Punta del Este y Maldonado, en lo que para los brasileños es una época del "rebeión". Ese rebeión se ha mostrado y se ha ido consolidando como un impacto fuerte en el turismo de nuestro país. Retirados esos turistas brasileños, las versiones que han estado circulando sobre cómo está Punta del Este después de esa fecha hablan de un bajón que se nota. ¿Qué impresiones tienen en el Ministerio de Turismo?

HL – En esto estoy un poco como en el tema de la seguridad. Así como nunca hablé de sensación de seguridad, tampoco podemos guiarnos en materia de presencia por la sensación. Es muy respetable, desde luego.

Este término bajón yo le diría que no es un término que estemos manejando en el Ministerio. Conozco la opinión de muchos operadores, así como la de otros que nos están hablando en este permanente trabajo nuestro en el este del país y muy especialmente en Punta del Este, adonde concurrimos a distintos eventos prácticamente todos los días, y creemos que se aprecia un número de visitantes, por lo menos del mismo nivel del año pasado, que fue una temporada que todo el mundo calificó de muy buena.

EC – La preocupación viene porque al desaparecer ese flujo fuerte de brasileños el turismo argentino pasa a jugar un lugar preponderante. Y con el turismo argentino existía ya desde antes de fin de año el temor de que se produjera una caída debido a todas esas medidas de control de cambios que se implantaron por el gobierno de la presidenta Cristina Fernández, incluso en sucesivas olas, porque hubo más de un paquete en ese sentido. Se tiene la impresión de que o esas trabas llevaron a alguna gente a que desistiera de intentarlo, o que, decididos a hacerlo igual, se encontraran con que tenían que enfrentar un tipo de cambio todavía peor que el que tenían antes por la diferencia entre el tipo de cambio oficial, el paralelo, etcétera. ¿Qué dice usted de esa parte del inconveniente?

HL – Tenemos que esperar los números [finales], porque también en ese aspecto se pensaba que no íbamos a tener este crecimiento en los primeros ocho días. Yo mismo le confieso que nunca hablábamos de un crecimiento superior al 20%. Las consultoras privadas con las cuales trabaja el Ministerio –CPA Ferrere, Cinve, etcétera–, que se especializan en realizar mediciones y formular escenarios de evolución posible de la temporada turística, eran ya conocidas. Desde luego, las medidas cambiarias del gobierno argentino eran optimistas en señalar, teniendo en cuenta varios aspectos, fundamentalmente la buena performance de la economía argentina, que en última instancia era el factor decisivo para determinar la decisión del viaje y de las vacaciones en el país, nos estaban dando un crecimiento que estaba en el orden del 6, del 7 y quizás optimistamente hasta del 10%. O sea, en primer lugar, las previsiones no eran de un bajón como usted me señala, sino sobre el crecimiento tan importante registrado el año pasado.

Habrá que ver la discriminación con más tiempo, el procesamiento de estos datos, del origen de los turistas. No se olvide que los brasileños, de acuerdo a la tendencia del año pasado, también están teniendo un cambio en el hábito, en el sentido de que antes venían estos pocos días, nos adelantaban la temporada en diciembre, pero después no regresaban. En los últimos años se ha dado que muchos de esos turistas brasileños regresan al país durante el mes de enero, durante el mes de febrero y eventualmente en algún otro momento del año.

Este 22% de crecimiento de turistas, excluyendo tanto el movimiento en el norte del país, que sigue siendo un movimiento de turismo comercial de compras realmente muy importante, especialmente en la ciudad de Rivera. Y excluyendo a los cruceristas, que están bajando cada vez en mayor número en Montevideo y Punta del Este, dos de los puertos más importantes ya no solo de la región, sino del continente en materia de cruceros. Es un elemento muy alentador que significa que tenemos que esperar y seguir trabajando mucho. Se mantienen todos los elementos de promoción de la marca país en la Argentina y en el Brasil y en el resto de la región; hay que trabajar para febrero, que es un mes un poco más difícil.

En todo caso, esta primera cifra divulgada por la Dirección Nacional de Migraciones es realmente positiva y nos estimula mucho. Cada uno tiene su sensación en función de cómo le va por la vereda por donde camina.

EC – A la espera de que vengan esos números de los días que están corriendo, el cierre de la primera quincena y el arranque de la segunda, le consulto, porque usted recién manejaba algunos números globales del año 2011. ¿Han podido hilar más fino? ¿Tienen cifras a propósito del gasto por turista? ¿Cómo fue el movimiento del año pasado si lo examinamos con más cuidado?

HL – Fue muy interesante desde todo punto de vista. En materia de visitantes, en materia de gasto medio y en materia del gasto total. Como usted sabe, este tema del turismo es como prácticamente todas las actividades: hay que mirarlo en términos de balance porque, por suerte, está incrementándose mucho el número de visitantes de turistas que ingresan a nuestro país, y también los uruguayos, como resultado de una situación económica mejor de una gran parte de la población también se expresa en que están viajando más.

Un dato, absoluta primicia, que estaba preparando el director nacional de Turismo para la reunión del mes próximo en Anchorena, primera convocatoria que ha hecho el presidente de la República a los ministros para hablar de las perspectivas del año que se inicia. El tema del balance es un tema muy importante. Fíjese que si tenemos en cuenta el año 2005, yo tengo en mi planilla los datos discriminados por visitantes, por el gasto medio de cada uno de ellos y por el gasto total. Entonces le estaría hablando de que en el año 2005, año del inicio de esta gestión, la balanza, en términos de ingreso de divisas, fue favorable a Uruguay con una cifra de 288.561 millones de dólares. La balanza en el año 2011, una balanza que tuvo un ingreso del orden de los 2.171 millones de dólares y que tuvo un egreso de uruguayos que gastaron afuera de casi 644 millones de dólares, esa balanza neta a favor en materia de divisas a favor del país representó la cifra de 1.528.281 millones de dólares en comparación con los 540 que había representado en el año 2005.

EC – Sí, ese es un contraste muy interesante.

HL – Muy interesante, se lo quería aportar porque este es un dato de una primicia. Se está trabajando en estas cifras de balance para rendir este informe el próximo 23. Estamos viendo que se incrementa el gasto de los visitantes, también el gasto de los uruguayos, pero por suerte gastan más los visitantes que lo que gastan los uruguayos cuando salen del país. Y arroja y confirma definitivamente esta cifra, que no en términos absolutos, que impactan más, porque en términos absolutos estamos hablando lejos de los 2.180 millones de dólares de ingreso por tres millones de visitantes, casi un habitante, un turista, sino que estamos hablando en términos estrictamente de balanza, que puede ser menos impactante desde el punto de vista del número pero es la absoluta realidad y la comparamos en el año 2005. Esta cifra ha venido creciendo en forma ininterrumpida desde esa fecha.

EC – ¿En cuánto está ahora el gasto por turista?

HL – En el año 2005 ese gasto medio era de 281, casi 282, en este año 2011 ese gasto medio estuvo en el orden de los 733 por estadía de los turistas.

EC – Se salta de 282 a 733.

HL – Exactamente. Esta cifra es la que nos explica entonces esta balanza favorable de casi 1.530 millones de dólares que representa, al menos junto a la cadena agroindustrial exportadora, una de las locomotoras del crecimiento firme y sostenido de la economía.

Este es un camino que nos tiene que iluminar sin encandilarnos, porque tenemos que ver si el nivel de gasto de este incremento de turistas que estamos teniendo en este mes de enero de acuerdo a estas cifras divulgadas en el día de hoy por ustedes ojalá sea un buen nivel de gasto. Tenemos que ver si efectivamente la clase media argentina, que hace además un volumen, cómo ha respondido, para poder evaluar entonces con datos y con la perspectiva del tiempo necesario en qué medida estas acciones del gobierno argentino tuvieron algún impacto.

Me atrevería a adelantar, como una conclusión, que si no se hubieran producido estas medidas, que podrían haber tenido algún efecto disuasivo sobre cierto nivel de los turistas argentinos que a veces nos proporcionan volumen o que concurren a la Ciudad de la Costa, o algunas ciudades rochenses, etcétera, la temporada ya tendríamos que estar definiéndola en términos realmente muy importantes, una temporada excepcional. No nos adelantemos.

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