(emitido a las 7.30 Hs.)

EMILIANO COTELO:
"Primaria prohibirá consumo de papitas fritas en las escuelas".

Esta es una de las noticias que llama la atención esta mañana si se recorre los titulares de portada de los diarios.

Está en Últimas Noticias, que dice que "a partir del mes de julio, quedará prohibida en las escuelas la venta de papas fritas, snacks, algunos tipos de alfajores y otros cuyo aporte principal sea de un alto porcentaje de azúcares simples o grasas totales y saturadas.

Las autoridades de Educación Inicial y Primaria y el Ministerio de Salud Pública, en base a la labor de promoción efectuada por el Programa de Alimentación Escolar, van a realizar el listado de los alimentos recomendables y no recomendables.

Esta decisión del Consejo de Educación Inicial y Primaria se encuentra en etapa de instrumentación y tiene como antecedente las campañas contra el tabaquismo en cuanto se trata de un problema de salud pública".

En línea se encuentra el maestro Oscar Gómez, que fuera director general de Primaria hasta hace muy pocos días, ya que la semana pasada asumió como nuevo subsecretario de Educación y Cultura.

¿Este fue uno de los últimos temas en los que estuvo trabajando en Primaria?

OSCAR GÓMEZ:
Es uno de los primeros y de los últimos temas en que estuve trabajando en Primaria, efectivamente. Cuando trabajaba como maestro siempre tuve la preocupación de cómo se podría mejorar los hábitos alimentarios de los niños en las escuelas, dado que, del total de casi 380.000 niños, hay 255.000 alumnos que asisten diariamente a nuestros comedores escolares. Comedores escolares que siempre hemos entendido como un ámbito de aprendizaje de buenos hábitos de alimentación saludable, de higiene. Y realmente a veces es contradictorio el hecho de que en nuestras meriendas escolares que no son institucionales –aquellas que los niños o bien traen, o bien compran en la escuela– hubiese que borrar con el codo lo que se escribe con la mano.

EC – Sí, cuántas veces hemos visto tanto en escuelas públicas como privadas el desarrollo de campañas para frenar esa tendencia. Por ejemplo, las campañas que instauraban un determinado día de la semana para la alimentación saludable, etcétera. Ahora con esto se va más allá, ¿no?

OG – Claro. Cuando hace unos días atrás coincidíamos con el diputado Javier García en el examen de este tema, porque él también tiene una iniciativa parlamentaria al respecto, me decía, y con mucha razón, que hablar del "día de la merienda saludable" es como si habláramos del día que permitimos fumar en los espacios públicos. Porque es tan dañina una cosa como la otra, y los elementos de promoción de salud, son constantes, permanentes, cotidianos. Creo que tiene razón el diputado Javier García. Si bien es un avance hablar del "día de la merienda saludable", efectivamente los hábitos de salud son de todos los días.

En ese sentido, desde hace ya más de cinco años el Programa de Alimentación Escolar de Primaria (PAE) está trabajando fuertemente en la etapa de promoción. Pero nosotros entendíamos –y creo que es justificado luego de trabajar tanto tiempo sobre la promoción– que teníamos que tomar algunas medidas coercitivas en defensa de la salud de los niños.

En nuestro país existe un alto índice de niños con obesidad, con hipertensión, con enfermedades derivadas de una mala alimentación. Ya hicimos todo un esfuerzo de promoción, se ha trabajado, se insiste en que en las escuelas haya huertas orgánicas, que se incentive el consumo de hortalizas y de frutas y verduras, pero no alcanza. Entonces nuestro equipo de nutricionistas está trabajando y ya produjo un primer informe sobre alimentos recomendables y alimentos no recomendables.

EC – Todavía nos estamos adelantando, porque esta medida va a entrar en vigor recién después de las vacaciones de julio...

OG - ...Claro, si con la nueva integración de Primaria el Consejo continúa esta política educativa, nosotros pensábamos que desde marzo a julio que existiera toda una acomodación. Porque reconozcamos que algunas veces las cantinas escolares también producen ganancia para gastos menores en las escuelas –arreglar un vidrio o lo que fuere- entonces tenemos que hacerlos pensar que tienen que sustituir los productos que actualmente se venden, que son de fácil almacenamiento. Yo quiero entender que esta es una de las razones por las cuales se sigue consumiendo snacks y algún tipo de alfajores de baja calidad, con una saturación en grasa muy importante: por su fácil almacenamiento. Habrá entonces que buscar hábitos para que exista una rotación adecuada de los nuevos productos que deban comercializarse o distribuirse.

Hay un ejemplo muy bueno que se hizo con la Intendencia de Montevideo durante muchos años, y se sigue haciendo, en más de 30 escuelas de Montevideo. Hubo un acuerdo con el Mercado Modelo para que nos dieran en primera instancia frutas a consignación, que luego se compraban, que permitió saber que los niños no son los que se resisten al cambio, y que la resistencia al cambio puede estar en otros ámbitos pero no en los escolares.

EC – ¿Cómo están pensando la instrumentación? Hay un mensaje de la audiencia que justamente apunta a esa pregunta: "¿Qué es lo que se prohíbe: la venta en las escuelas o el consumo en las escuelas de este tipo de productos?".

OG – La propuesta que yo dejé en Primaria es que haya una fase de prohibición de venta para llegar luego a una fase de prohibición del consumo. En eso también tenemos que dialogar mucho con las familias, sabemos que hay muchas familias que están con multiempleo y a veces la merienda escolar la dejan a la propia elección de los niños, dándole el dinero, o bien le colocan en la mochila los snacks y el alfajor. Entonces tiene que ser una labor de buena difusión, de trabajo con los padres, con las familias...

EC - ...Estamos hablando de que los alimentos que se prohibirá son papas fritas, otro tipo de snacks, algunas variedades de alfajores. Esos alimentos no podrán ser vendidos dentro de las propias escuelas. ¿Pero qué pasa con el kiosco que está ubicado en frente a la escuela?

OG –En una segunda fase tenemos que atender a la prohibición del consumo en la escuela. Son etapas graduales que permiten que no haya resistencia sino convencimiento. En ese sentido habíamos trabajado intensamente, desde que fui consejero de Primaria hasta director general de esa misma institución. Reitero, las nuevas autoridades verán la viabilidad de continuar una huella que nosotros estamos convencidos es muy buena, pero la autonomía del ente señala que son ellos quienes van a tomar las decisiones de la continuidad o no de esta iniciativa.

EC – Usted hace todas estas precisiones en la medida que ya no es más director general de Primaria. Pero le estoy preguntando a propósito de cómo tenían ustedes esta medida encaminada mientras usted estaba al frente...

OG - ...Dejando la posibilidad de aquí a junio de iniciar una fuerte etapa de difusión, una lista taxativa de cuáles son los alimentos a promover y de cuáles deberíamos discontinuar el consumo. Luego vendría una fase en donde no se podría comercializar en la escuela. Y finalmente una fase donde no se podría consumir en la escuela.

Es un trabajo muy interesante por parte del Poder Legislativo, encabezado por el diputado Javier García, que coincide con esta tarea que venimos desarrollando desde hace más de siete años. Por lo tanto, creemos que hay consenso en la ciudadanía y en la academia, porque en este caso el diputado también es médico pediatra.

EC – Ahora, ¿esta medida va a regir para las escuelas primarias públicas o también para las privadas?

OG – Nosotros como Estado tenemos la capacidad de sugerir y advertir al ámbito público no estatal. En el caso de que el Ministerio de Salud Pública entienda pertinente que esta campaña es de interés, podría haber otras medidas coercitivas que no sea solamente la sugerencia.

EC – Eso ya depende, dice usted, del Ministerio de Salud Pública, no del Consejo de Primaria.

OG – Depende de un acuerdo, porque la Constitución de la República plantea que el Consejo de Educación Inicial y Primaria, la ANEP en su conjunto, tiene algún tipo de prerrogativa sobre el funcionamiento de las instituciones educativas privadas. Por eso le digo que si es una iniciativa que tiene más de un apoyo también puede.

Pero reitero, en este caso yo creo lo que señalaba García, que no puedo decir que los jueves es el día que se deja fumar en las oficinas, o que el miércoles es el día que se puede tomar alcohol conduciendo. También ocurre en otro ámbito, que nos obligan saludablemente a manejar con el cinturón de seguridad puesto. Es decir que el Estado tiene posibilidades de ejercer sus potestades coercitivas, si lo estima pertinente en un proceso de convencimiento.

FABIÁN TISCORNIA:
Usted señalaba que esto va a depender de las nuevas autoridades de Primaria, básicamente del nuevo director general que es el cargo que falta completar, ¿los otros dos consejeros ya estaban de acuerdo con esta iniciativa?

OG – Sí, este es un tema que hemos venido trabajando con la consejera Irupé Busetti y con el consejero Héctor Florit. Siempre hemos sentido el apoyo de esos dos compañeros en las iniciativas de esta naturaleza, por lo tanto sabemos que ellos tienen una disposición favorable a instrumentar este tipo de actividades.


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EC – El maestro Óscar Gómez mencionaba el antecedente del proyecto de ley presentado por el diputado Javier García, de Alianza Nacional, Partido Nacional, que va en la misma dirección y sobre el cual ambos conversaron hace muy pocos días.

El diputado García también estuvo en Perspectiva, en estas semanas, detallando su iniciativa.

Va en la misma línea pero no es lo mismo, porque el proyecto del diputado García no plantea la prohibición de la venta como sí se está estableciendo ahora en Primaria.

Dice: "El Ministerio de Salud Pública confeccionará un listado de alimentos saludables que contará con información destinada a la población de los centros educativos en forma general, estableciendo recomendaciones para una alimentación saludable en las diferentes etapas de la vida como forma de promoción y prevención a toda la comunidad. Esta información estará visible en los centros educativos. Los puntos expendedores de alimentos en los locales de enseñanza deberán disponer de alimentos y bebidas contenidos en la referida lista". O sea, lo que el proyecto obliga es a que la cantina de una escuela o de un liceo tenga para la venta los alimentos saludables.

FT – Cosa que muchas veces hoy no sucede.

EC - ¿Qué es lo que prohíbe el proyecto del diputado Javier García? Lo dice el artículo 4º: "Prohíbe la publicidad o promoción en los establecimientos educativos de aquellos alimentos, grupos de alimentos, productos alimentarios o bebidas que no estén incluidos en el listado mencionado en el artículo 3º de la presente ley y cuyo aporte principal esté constituido por un alto porcentaje de azúcares simples o grasas totales, grasas saturadas o sustancias denominadas trans".

Y en el artículo 5º hay otra prohibición: "No se permitirán dentro del local escolar o liceal saleros visibles para los alumnos, a fin de evitar el agregado de sal extra a los alimentos previamente preparados".

FT – De todas maneras, en la entrevista que tuvo Javier García aquí el pasado 26 de enero se le preguntó por la prohibición de la promoción de estos alimentos pero no de la venta. Al respecto Javier García decía: "Adelanto que tenemos que enfrentar una disyuntiva. Si sabemos que hace mal, no se puede vender. Habrá que trabajar en los centros educativos, porque uno no puede ni debe determinar lo que se hace en una casa en la vida privada pero sí en los centros educativos". Esto de cierto modo adelantaba esa disposición favorable a este tipo de iniciativas que ahora está a consideración de Primaria para implementar a partir de julio.

EC – De todos modos, el proyecto del diputado Javier García continúa su trámite parlamentario y se supone que va a tener andamiento, que va a tener su promulgación. Recordemos que, si bien no prohíbe la venta en los locales, es más amplio que lo que acabamos de comentar en la entrevista con el maestro Óscar Gómez, en la medida que abarca todos los centros educativos.

FT – Claro, no sólo las escuelas públicas –y eventualmente las privadas– como en este el caso, sino todos los centros educativos, públicos y privados.

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EC – Para complementar, una referencia que hizo el maestro Gómez durante la entrevista. En Uruguay se estima que el 50% de los adultos mayores de 50 años es obeso. Y, según datos publicados en la Revista Médica del Uruguay, si consideramos al conjunto de la población del país el 20% es obesa. ¿Qué pasa mientras tanto entre los niños? El 26% de los niños uruguayos sufre de sobrepeso u obesidad, según datos del Ministerio de Salud Pública.


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