El pasado jueves a las 10 de la mañana Argentina interrumpió el suministro que envía a nuestro país y disparó gestiones a todo nivel para intentar restablecerlo.

Según pudo saber El Espectador, fueron casi 8 horas en las que el vecino país no envió energía. Corte que si no se restituía habría generado un gran problema al no tener la capacidad suficiente.

El hecho llevó a que funcionarán al máximo Río Negro, Rincón del Bonete, Palmar y Baigorria para cubrir la situación. Sumado a que se solicitó el aumento del cupo que viene de Brasil. Aumento que no alcanza para cubrir la energía que viene desde Argentina ya que dicho país puede enviar  70 Megavatios más, a lo que ya está mandando.

El vecino país está teniendo dificultades al menos tres días a la semana en mandar energía y reduce los 400 Megavatios que tiene acordado con nuestro país a la mitad.

Martes, miércoles y jueves son los días más complejos para Argentina por la demanda que el proceso industrial le requiere.

El consumo esta semana se disparó a tal punto que si no se destrababa la energía que venía de Argentina la situación esa noche habría sido compleja.