(emitido a las 8.36 Hs.)

EMILIANO COTELO:
La hotelería de la ciudad de Colonia tuvo una ocupación del 90%, y las mesas del restoranes volvieron a estar llenas.

El fin de semana largo en Argentina trajo aire a los comerciantes de este lado del río, y mejora las expectativas para una temporada cargada de interrogantes. El telón de fondo es la larga serie de medidas que el Gobierno de la presidenta Cristina Fernández ha ido implementando para el control del cambio de monedas y para las compras en el exterior realizadas con tarjetas de crédito y de débito.

Vamos a conversar con Hugo Durán, quien fuera presidente de la Cámara Hotelera departamental de Colonia, propietario del Hotel Beltrán, en el centro de la ciudad.

¿Qué impresión sacó usted después de este fin de semana?

HUGO DURÁN:
Las conclusiones que usted está mencionando. En Colonia veníamos teniendo una ocupación muy baja por las medidas argentinas, y este fin de semana trajo un poco de aire, se pudo respirar y vimos que Colonia tuvo una ocupación de 95% a 100%, más que nada el sábado. Yo prefiero hablar de días porque cuando decimos fines de semana podemos involucrar tres o cuatro días, y no se interpreta correctamente. Los fines de semana para esta zona turística del país se llama solamente sábado, porque la gente viene y la ocupación está completa ese mismo día. Los restaurantes tuvieron muy buena ocupación; se volvió a ver un turismo bastante fluido después de varios meses de quietud.

EC – Ustedes estaban preocupados.

HD – Estábamos con una alerta, y seguimos en esa situación porque si bien esto trajo un poco de sol a los días nublados, no podemos basarnos en este fin de semana largo para proyectar una temporada turística, porque las medidas argentinas siguen en aumento. Este fin de semana los barcos que venían desde Buenos Aires se encontraron muy demorados, y el turista se sintió muy afectado porque en Argentina implementaron nuevas medidas en el momento que el turista se va a embarcar, pasan por un proceso muy lento donde se le toman huellas digitales a los turistas que salen y se les sacan fotos, parece que le están haciendo una radiografía y eso psicológicamente los afecta. Pero más allá de eso, hubo barcos demorados hasta tres y cuatro horas.

EC – Ese sistema no es nuevo, me tocó pasarlo a mí hace algunas semanas cuando estuve en Buenos Aires, pero no había pensado en el impacto que puede tener en un movimiento puntual de gente que viene por unas horas al departamento de Colonia.

HD – Sin duda. Para los que tiene los tiempos contados, esa demora es muy importante. Por otro lado, imagínese que alguien sale de su casa dos horas y media, tres horas antes y se demore tres horas más en el puerto, más una hora y media para llegar, para venir un fin de semana de sábado a domingo tiene entre diez y quince horas de tiempo perdido haciendo trámites, cuando estamos en lo que se le dice llamar "Mercosur".

ROMINA ANDRIOLI:
Respecto al nivel de gasto de los argentinos, ¿cómo lo vieron este fin de semana? ¿Cómo viene siendo en los últimos fines de semana?

HD – Si la ocupación fue buena en los hoteles, en los restaurantes también es así. El argentino está gastando casi la mitad de lo que venía gastando normalmente en sus movimientos turísticos por esta zona. Pudimos comprobar eso este fin de semana.

Pero antes de este fin de semana era muy poco, porque el turismo era poco. Entre semana los hoteles están prácticamente vacíos, los restaurantes tienen el movimiento cotidiano de la vida comercial de la ciudad, que está impactada por el desarrollo de Montes del Plata. Sin este desarrollo, estaríamos en una ciudad desértica porque el turismo desapareció después de las medidas argentinas, y por primera vez en dos o tres meses remontó. Tuvimos unas semanas de vacaciones de invierno muy venidas a menos, donde por primera vez vimos bajar notoriamente, en más de diez años, el turismo en Colonia.

RA – ¿Qué viene pasando con la forma de pago que están utilizando los argentinos? Teniendo en cuenta las dificultades con las restricciones cambiarias.

HD – El turista argentino ha ido cambiando de acuerdo a todas las penitencias que le están poniendo. Cuando vinieron algunas medidas con respecto al teórico corralito del dólar, empezaron a pagar todo con tarjeta de crédito. En restaurantes que no tenían tarjeta de crédito, entraban diez y ocho se iban porque no podían pagar con tarjeta. Ahora se ve al turista pagando en efectivo, gastando muchísimo menos. Ingresa mucha plata argentina y pocos dólares, también hay pesos uruguayos provenientes de Argentina. Se ve que el turista argentino compra pesos uruguayos y viene a gastarlos acá. Las modalidades van cambiando, no sé cuánto de esto podremos tener para la temporada que viene.

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Foto: Archivo