Denuncian casos de trabajo irregular en el este
El presidente de la Federación Uruguaya de Empleados de Comercio y Servicios (Fuecys), Ismael Fuentes, informó a El Espectador que han detectado varios casos de trabajadores extranjeros contratados de forma irregular, sin documentación y que no se sabe cómo entraron al país.
En la mayoría de los casos, estas personas reciben salarios sumergido pero, gracias a las denuncias realizadas por la federación, más de una de las situaciones se ha regularizado.
Recientemente se conoció la situación de una mujer peruana que trabajaba como mucama en un apartamento de Punta del Este y que denunció a la Policía que el hijo de sus patrones se presentaba en su dormitorio y la presionaba para que tuvieran relaciones sexuales.
"Tenemos algunas situaciones, por ejemplo se acaba de dar hace algunos días en Maldonado una situación con una trabajadora peruana, también se había dado el caso de la boliviana en una casa trabajando de empleada doméstica. Es decir, se han dado en el último período en el país algunas situaciones irregulares que yo creo que lo que tienen de bueno es que antes no salían a la opinión pública y ahora sí, la gente empieza a conocer que hay derechos y esas situaciones se empiezan a denunciar", dijo al respecto Fuentes.
La Federación es partidaria de que cada uno de los extranjeros que llegue pueda ejercer su derecho al trabajo, pero siempre y cuando se les otorgue la posibilidad de legalizar su situación.
El problema principal "generalmente se da con la llegada del turista, que trae su propio personal en condiciones en las cuales no respetan la ley. Muchas veces los dejan encerrados en la casa mientras ellos salen a hacer turismo, y el personal se encuentra con que no tiene la libertad que debería tener", argumentó Fuentes.
Consultado sobre cómo afecta a Fuecys la contratación de extranjeros, señaló que a ellos lo que les preocupa es que se diga "que el trabajador uruguayo no está preparado para determinado puesto, entonces ahí hay un debate, ya que si no está preparado hay que trabajar en eso".
"Lo que nosotros decimos es que ante este tipo de situaciones lo bueno es mantener los ámbitos de negociación que nos permitan establecer criterios. Lo que no aceptamos es que se traiga a un trabajador para pagarle menos de lo que se paga en los laudos nacionales", añadió.
Por su parte, en diálogo con El Espectador el inspector General de Trabajo y Seguridad Social, Juan Andrés Roballo, anunció que entre este jueves y viernes se estarán presentando formalmente los resultados inspectivos del operativo hecho por esta dependencia del Ministerio de Trabajo.
Los datos corresponden al período comprendido entre la primera semana de diciembre y el día de le fecha. Los operativos, informó el jerarca, fueron realizados en la franja que comprende desde Colonia hasta El Chuy. Al operativo se sumaron balnearios del interior, como Las Cañas, en Río Negro.
Roballo adelantó que si se detectó informalidad, hay casos puntuales, pero hasta que las cifras no estén procesadas no se pueden confirmar tendencias.
En los próximos días habrá nuevos operativos en lugares que no serán anunciados a los efectos de evitar que la presencia de los inspectores sea un elemento esperado.
El nombre de estas inspecciones es el de "operativos rastrillo" o "de oficio", las mismas se realizan cuadra a cuadra, propiedad por propiedad.
Procesados los datos se generarán expedientes pero además se analizarán los datos de informalidad, a los efectos de incorporar elementos para la elaboración de las inspecciones del año que viene.
En otro orden de temas, el titular de Fuecys se refirió a cuáles son las propuestas en las que están trabajando de cara al mes de julio, en el cual tendrán una intensa negociación en el último Consejo de Salarios para el último período del actual Gobierno.
"Nosotros aspiramos a que aquellos salarios que están por debajo de los 15.000 pesos lleguen a esa cifra, como salario mínimo. También a mejorar las condiciones de trabajo, sobretodo porque tenemos un sector donde el 54% de las personas que hacen servicios son mujeres, y aspiramos a que se presten condiciones de trabajo mejores. También reivindicamos lo que se llama cuatro proyectos de ley que tienen que ver con licencias especiales para padres y madres con familiares con capacidades diferentes, la ley de nocturnidad, una ley que proteja la actividad de los call center y tenemos la situación de los horarios comerciales", concluyó.