(emitido a las 7.47 Hs.)

EMILIANO COTELO:
Mientras aquí en Uruguay el proyecto cooperativo Alas-U no termina de despegar, en Argentina los 92 empleados que tenía Pluna SA allí continúan reclamando que no se los olvide.

En las últimas horas le enviaron una nueva carta al presidente José Mujica en la que piden otra vez que se atienda su situación, aseguran que para sus excompañeros de Uruguay, no existen –dicen: "no existimos, somos invisibles"– y amenazan con sumarse al embargo de los aviones de Alas-U si es que aterrizan en Argentina en caso de que no se les pague lo que se les está debiendo.

Vamos a conocer más de cerca esta situación, vamos a conversar con Ana María Denegri, que integra el grupo de exempleados de Pluna SA en Argentina.

ROMINA ANDRIOLI:
¿Cuál fue exactamente la situación de ustedes desde el cierre de Pluna hasta hoy?, ¿por dónde han transitado?

ANA MARÍA DENEGRI:
Fue bastante caótica, como fue la propuesta que terminamos recibiendo de la empresa. A partir del primer golpe lo que hicimos fue juntarnos y un grupo muy numeroso de esos 92 tomamos la oficina que ocupaba Pluna en Aeroparque como para mantenernos juntos. Eso nos ayudó a darnos un poco de asistencia entre nosotros, que realmente era necesaria, de apoyarnos unos con otros y de permanecer juntos para ir viendo qué era lo que íbamos a hacer. Un grupo muy grande de esos 92 estamos todos juntos también con un abogado que va llevando el caso porque es a lo que nos llevó la empresa.

RA – ¿Y hasta el día de hoy mantienen las oficinas ocupadas?

AMD – Tenemos las oficinas ocupadas en Aeroparque, las que ocupaba Tráfico, que de hecho son las que siguieron funcionando durante el mes de julio a pesar de que la empresa no volaba, porque como a nosotros no nos despidieron, no nos suspendieron, no hubo ningún tipo de comunicación de parte de la empresa, entonces permanecimos en esas oficinas. En primera instancia trabajando, pensando que íbamos a cobrar el sueldo, posteriormente como un lugar en donde poder informar al público de la situación de la empresa y de la nuestra, por supuesto, y por otra parte como un lugar de reunión del grupo para poder seguir juntos y viendo qué es lo que vamos a hacer.

RA – ¿Y a lo largo de estos meses han tenido contacto, por ejemplo, con los trabajadores aquí de Pluna, los que piensan formar la nueva aerolínea Alas-U?

AMD – Sí, hemos tenido contacto a partir del que ellos hicieron con nosotros en diciembre, fundamentalmente nuestro interlocutor fue Nicolás de los Santos; Sabrina Acevedo también. Nos contactaron contándonos de este proyecto que nos entusiasmó muchísimo porque nos sentimos también identificados con la posibilidad del regreso de Pluna.

El problema es que para poder sostener la ocupación de las oficinas necesitábamos una transferencia de fondos como para poder reservar ya esas oficinas para Alas-U –en aquel momento todavía no sabíamos el nombre–, para poder liberarlo cuanto antes, porque de hecho son las únicas oficinas libres que tiene Aeroparque hoy en día y hay otras compañías interesadas en ella. Hubo más de una reunión con Nicolás de los Santos, pero lamentablemente eso no llegó, ni eso ni el dinero para poder empezar acá los trámites que necesita la empresa y dedicar un dinero para poder cubrir esos gastos.
 
RA – ¿Pero ese dinero se lo reclamaron al sindicato?

AMD – No sé si es exactamente el sindicato sino al proyecto en sí mismo, a quien está impulsando el proyecto. Nosotros necesitábamos un dinero para poder ponernos en funcionamiento acá en Argentina, porque nosotros ni tuvimos ni tenemos ningún tipo de ingreso por el cierre de Pluna, no teníamos ni de dónde sacar para poder bancar esto.

RA – Eso le iba a plantear también. A diferencia de los trabajadores aquí en Uruguay ustedes no recibieron ningún tipo de seguro de paro ni de complemento.

AMD – Absolutamente nada, ni el sueldo de julio, que lo trabajamos, ni la indemnización que nos corresponde, ni ningún tipo de compensación como sí reciben en Uruguay.

Acá el seguro de desempleo es una risa, es mucho menos que 100 dólares, con lo cual tampoco se soluciona nada. En Uruguay tengo entendido que es más o menos un 50% del sueldo, es un importe digno, el nuestro no tiene ningún tipo de valor como para poder manejarse. Acá hay un desamparo total en cuanto al dinero, y en realidad de parte de Nicolás y de Sabrina lo que hubo es una promesa de que ellos iban a intentar conseguir esos fondos para poder iniciar todo el tramiterío de la nueva empresa acá en Argentina, cuestión que no pudieron resolver. Entonces nosotros nos tuvimos que abrir del proyecto, por el simple hecho de que no podemos bancarlo. Lo bancamos desde la intención, nos parece buenísima la idea de poder reflotar una compañía aérea, lamentablemente nosotros en nuestra condición no podemos acompañarlos así.

Necesitábamos un apoyo que no recibimos que era simplemente monetario. Hubo reuniones, asambleas multitudinarias en Montevideo a las que no nos convocaron, hubo un montón de cuestiones en Uruguay en las cuales fuimos viendo qué pasaba y que no nos convocaban. Con lo cual empezamos a darnos cuenta de que ellos, no sé si por el hecho de que no pudieron conseguir el dinero o por alguna otra razón, nos fueron como dejando de lado y entendimos que no nos estaban tomando en cuenta para ese nuevo proyecto.

RA – Y con respecto al Estado ¿cuál es la situación de ustedes?, porque ustedes ahora le hacen el planteo al presidente Mujica, ya van dos cartas que le escriben, ¿qué es lo que le están reclamando concretamente?

AMD – Lo que le estamos reclamando es que cumpla con la ley, es muy claro, la ley indica en Argentina que si una empresa cierra los empleados deben ser indemnizados y al menos pagarles el sueldo, porque nosotros no hemos cobrado el sueldo ni de julio de 2012. Y segundo que pague las indemnizaciones que prevé la ley, el hecho de que no nos hayan pagado absolutamente nada, no nos mandaron ni un telegrama de despido, nos ignoraron, directamente, es como si no hubiéramos existido. En algún momento incluso durante el mes de agosto de 2012 a partir de algunos contactos que tuvimos con el síndico que está llevando el caso de la quiebra de Pluna en Montevideo nos dijeron "¡Ah, pensamos que eran tercerizados los empleados en Argentina!". Somos 90 personas que recibíamos el sueldo mensualmente, que recibíamos los aportes, todo en regla durante años, porque Pluna siempre fue sumamente correcta con todo eso, y en definitiva de un día para el otro nos ignoraron por completo.

La indemnización está prevista justamente para eso, para que uno tenga el colchón y el tiempo de decir: "Bueno, a ver ahora qué hago. Estuve 30 años trabajando para una empresa, de buenas a primeras no tengo más trabajo", bueno, si recibo la indemnización puedo esperar el tiempo, tengo algo con que seguir mi vida, y eso no pasó en nuestro caso. Nosotros nos encontramos sin trabajo, sin dinero, sin absolutamente nada, ignorados por completo por la empresa, que en Argentina desapareció por completo –los funcionarios, la gente en Uruguay también–. De buenas a primeras quedamos en un situación completamente desamparada.

Lo que reclamamos es: nos tienen que abonar lo que la ley indica que nos tienen que pagar. La empresa no tiene bienes en Argentina –el único bien real que tenía la empresa era la oficina de Florida 1 que fue vendida en épocas de Leadgate, la administración anterior a la del cierre de la empresa–, en Uruguay también hay muy pocos bienes; si no nos pagan por voluntad propia tendremos que buscar el modo judicial de que se nos abone, y si hay que llevar adelante un embargo lo vamos a hacer.

RA – ¿Hasta ahora ustedes han hecho algún reclamo en la justicia por esta situación?

AMD – Sí, por supuesto, hay un juicio en camino en la justicia argentina que como son los tiempos de la justicia, demoran y todavía no está resuelto. No tenemos dudas de que la justicia nos va a dar la razón porque no hay ningún punto para que no la recibamos, simplemente que hay que esperar ese tiempo hasta que la justicia se expida y nos dé la razón. El tema es que cuando la justicia diga: "Sí, señores, tienen razón, vayan a cobrar", tenemos que tener de dónde cobrar. Ahí es donde toma importancia el tema del embargo.

RA – ¿Allí es donde surge la posibilidad de que ustedes retengan los aviones en caso de que la nueva compañía empiece a volar en Argentina? ¿Cómo se entiende esa situación de que por un lado buscan incentivar este proyecto de Alas-U para eventualmente volver a trabajar, pero por otro lado también están del otro lado del mostrador y son uno de los que podrían generar estas acciones para retener las aeronaves de Pluna?

AMD – Es que en realidad acá hay un responsable que es Pluna SA, el presidente Mujica, que es el que decidió el cierre de Pluna SA, es el que está comprometiendo el futuro de Alas-U, no nos equivoquemos de enemigo. Nosotros no queremos cuestionar ni comprometer el inicio de la empresa, lo que decimos es que no puede ser a costa de lo nuestro, nosotros tenemos un derecho y un dinero que cobrar y tenemos derecho a cobrarlo, y si la única fuente de donde podemos conseguir ese dinero es con los aviones que a su vez la empresa Alas-U está queriendo utilizar... No nos equivoquemos, el problema no lo tiene que tener Alas-U con nosotros, lo tiene que tener con el Gobierno que mantiene una deuda con nosotros.

Nosotros no tenemos un deseo de entorpecer el nacimiento de Alas-U en absoluto. Contamos el proceso de cómo fue nuestra relación con ellos por el hecho de que se entienda que fuimos parte también en algún momento y ahora no lo somos, no estamos involucrados en ese proyecto. Pero no es nuestra intención que Alas-U no pueda volar porque los aviones puedan ser embargados en Argentina, en absoluto. Lo que queremos es que el presidente Mujica pague lo que corresponde a los empleados en Argentina así queda liberado por completo el peligro de que los aviones queden embargados. Hay que poner las cosas en el orden correcto para que no se malentienda.

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Documento: Carta de los extrabajadores de Pluna SA en Argerntina dirigida al presidente José Mujica (10/06/2013)