En el programa abordan diversas temáticas, pero también reciben capacitación en distintas áreas.


En ese centro de reclusión conviven más de 500 reclusos y se ha transformado en un lugar que dista de la imagen que se tiene sobre el sistema carcelario.

La presencia policial  entre los reclusos es casi nula y aparece una figura llamada "educadores";. El Espectador recorrió el lugar.

El objetivo primario fue conocer de primara mano el trabajo que realizan estos internos en cuanto a su capacitación radial.

Esta experiencia, pero con otro enfoque, la están realizando también jóvenes privados de libertad en la Colonia Berro.

En el caso de los reclusos de Punta de Rieles, este grupo tuvo su primera salida al aire hace 3 meses, con el consentimiento del Ministerio de Educación y Cultura, desde una radio comunitaria del Barrio Capra llamada "El Planeta";.

Se utilizaron equipos de dicha emisora y los reclusos presentaron en una jornada distintos programas planificados y guionados por ellos mismos.

El proyecto va por su quinto programa y se realizó en un local que oficia de teatro.

Una de sus emisiones fue en vivo y contó con la presencia del director del Instituto Nacional de Rehabilitación, el Inspector Principal Luis Mendoza, Patricia Banchero del programa "Aprender Siempre";, autoridades del Mides y el sub secretario del Ministerio del Interior Jorge Vázquez.

Los reclusos explicaron a El Espectador el objetivo de llevar adelante este proyecto.

"Quién iba a soñar o pensar que en una cárcel hubiera una radio para que uno se comunique con la importancia que tiene que la gente escuche los pensamientos del interno", expresó uno de los reclusos.

Su quinta salida al aire tendrá un matiz con las anteriores y es que no solicitarán los equipos de la radio comunitaria que utilizaban, sino que será con su propio equipamiento.

La infraestructura la proporcionó el ministro de Desarrollo Social, Daniel Olesker, quien al visitar el centro de reclusión recibió ese pedido por parte de los integrantes de este grupo.

"El 7 de diciembre hicimos el tercer programa, hicimos la colaboración y luego estuvo el cheque", expresó uno de los reclusos

El sistema carcelario es cambiante para cualquier propósito que se quiera hacer en conjunto.

La grilla de programación de una radio que esté dentro de una cárcel se torna por momentos inestable.

Los reclusos contaron que hay veces que se enteran que cierto programa no saldrá al aire porque su impulsor salió en libertad.

Uno de educadores de Punta de Rieles oficia de operador de radio. En diálogo con Espectador al día aseguró que hay diferencias entre los reclusos. Están los que se suman a estos programa de integración y los que el llamado, tanto para este como para otros proyectos, les es indiferente.

"El programa pretende ofrecer oportunidades, pero quien realmente los sacan adelante son los propios internos. Lo sacaron adelante ellos. Cuando ellos vienen aquí ven una posibilidad y la abrazan. Cuando la persona privada de libertad la agarra con el corazón sale. Están los otros internos que no se agarran a nada y continuarán su vida como ellos opten tomarla", expresó otro de los educadores.

Los miembros del proyecto de comunicación radial del establecimiento muestran interés en la actualidad. Están informados mas allá de no tener herramientas como Internet. En el mes de noviembre fue quitado el acceso a la red.

Son conscientes de que el lugar de reclusión, donde se encuentran, es un modelo carcelario que el país carece.

El Espectador habló con algunos que pasaron por otros centros como Canelones o el propio Penal de Libertad.

Afirman sentir alegría porque sus familiares no tengan que pasar por el exhaustivo control de "cacheo";, o la impresión que brindan los jardines y los módulos sin candados.

"Acá el que arma quilombo es un boludo, es más, el que arma quilombo no viene para acá"; dijo uno de los reclusos consultados.

El hecho de no sentir la presencia policial constante sobre ellos es algo que señalan como positivo.

"Con cada penal todavía hay policías que no se brindan todas estas oportunidades. Se quiso hacer algo en el Comcar, pero los presos no supieron aprovecharlo. Toda la cárcel en conjunto tiene reglas. En otra cárcel le das la mano a un policía y sos mal mirado, podés tener un problema", expresó otro de los reclusos.

Lo interesante de esta iniciativa es que no termina acá.Esta generación de presos en Punta Rieles afirma que quieren legar esta experiencia a los que vengan.

Sostienen que son ellos los que tendrán que llevar adelante este proyecto.

Con su cuarta salida al aire consolidada y en preparación de la quinta, la radio es hoy una realidad y una válvula de escape que los acerca a la libertad.