Sobre finales del mes de enero ocurrió en Montevideo un temporal de lluvia y viento que afectó en particular la zona este de la ciudad.
El barrio de Carrasco fue uno de los que sufrió mayores consecuencias con el resultado de árboles caídos y otros que perdieron ramas y hojas. Con el correr de los días los vecinos fueron apilando gajos, ramas y hojas en las veredas a la espera de que fueran retiradas por los servicios de limpieza de la Intendencia. Al cabo de un mes y medio, esos montones siguen allí, en algunos casos con el agregado de residuos, conformando verdaderos basurales.