Exhibición cigarillos

Los quiosqueros piden a Gobierno "no golpearlos más"

Los quiosqueros piden a Gobierno "no golpearlos más"

Quiosqueros advierten aumento del contrabando, mayores perjuicios para la población, cierre de comercios y pasaje de otros al comercio formal, si se aprueba la ley que prohíbe la exhibición de cigarrillos legales en sus establecimientos. Piden al Gobierno "no golpearlos más" y pensar en trabajos conjuntos.

La comisión de salud de la Cámara de Senadores analizará el martes un proyecto de ley que limita toda publicidad, promoción o patrocinio de los productos de tabaco en el interior de los puntos de venta.

El Frente Amplio quiere acelerar el trámite de una iniciativa que preocupa a la Asociación de Quioscos y Sub-Agentes de Quinielas del Uruguay (Aqysaqu) quienes señalan graves perjuicios y un camino equivocado que afecta a cientos de comerciantes.

El director de la Aqysaqui, Claudio Orrego, aclaró a El Espectador que acompaña y aplaude todas las medidas contra el consumo de cigarrillo,  porque es algo que trae consecuencia para la salud de la población, pero afirma que el Gobierno realizó movimientos erróneos en esa dirección.

Puso como ejemplo el aumento del precio de los cigarrillos o la no exhibición de los productos en los diferentes comercios, como se quiere aprobar ahora, algo que entiende, causará un efecto negativo y que ya está ocurriendo.

"Lo único que ha hecho fue mover la masa de fumadores de un lugar a otro. De consumir en su comercio de proximidad, de consumir en su comercio del barrio o en los establecimientos legales pasa a comprar donde su capacidad económica lo permite, por ejemplo, ferias vecinales, puerta de Hospital de Clínicas (…)", estableció Orrego.

Ven en la medida una nueva limitante para la venta de cigarrillos legales en sus negocios, al tiempo que les significa una nueva desventaja en relación a los cigarrillos de contrabando que se venden en la calle sin ninguna regulación ni control de parte de las autoridades.

En tanto, el director Jorge Nuñez aseguró que la iniciativa les provoca nerviosismo y aseguró que se da la paradoja que un comercio, formalmente establecido, tiene una feria en la puerta y los clientes consumen cigarrillos comprados en la esquina cuando ellos están establecidos formalmente y cumpliendo con sus obligaciones. Relató cómo se realizan esas ventas en las ferias.

"Sin advertencia, sin sanidad de nada, no se sabe quién trae el producto. Es una competencia totalmente desleal (…) Si no se publicita o no se ve es muy difíicl que la gente me lo pida cuando el otro está en cualquier feria, no se sabe ni quién lo fabrica ni paga impuestos", indicó Núñez.

Una encuesta realizada el año pasado entre los miembros de la asociación por la empresa Factum, reveló que los quiosqueros consideran que el aumento del contrabando de cigarrillos en el país es consecuencia de "una falta importante de controles al ingreso y la comercialización"; de esos productos en el mercado local.

La consulta concluyó además que los comerciantes sufren un descenso importante en las ventas de cigarrillos en los últimos cinco años como producto del aumento del comercio ilegal de cigarrillos.

Los precios son claros. La ganancia para un comerciante formal ronda el 15% sobre el producto, mientras que quien lo hace de contrabando gana por encima del 40%.

Núñez sostuvo que esta situación va más allá del precio, porque está en juego la calidad.

"El cigarrillo de acá que se fabrica acá o que viene importado acá lo ha revisado el Ministerio de Salud Pública. Los otros cigarrillos que vienen importados o contrabando de otro lado no se sabe qué pueden traer. Se han encontrado pelo de rata, materia de rata y ratones. No tienen ningún tipo de control", aseguró Núñez.

Otro factor que se suma, y que es parte de la preocupación de la asociación, es el pasaje de comerciantes al área informal, dado que sienten claros perjuicios frente a controles inexistentes para el que está en la ilegalidad.

Núñez ejemplificó la situación al señalar que se controla al que ya está siendo controlado.

"Lo que genera es que o gente del sistema formal se pase al informal porque el margen está entre un 40, 50% en el informal contra un margen del formal que está en un 15%. No se controla la parte informal y formal", estableció Núñez.


Claudio Orrego, por su parte,  dijo en este sentido, que la tercera marca más vendida de cigarrillos en el país es una marca de contrabando.

Es por esto que pidió al gobierno no "golpearlos más"; y buscar caminos de consenso, algo para lo cual están dispuestos a colaborar.

"Campaña de sensibilización, otro tipo de cosas, pero no esto que lo único que ha hecho fue perjudicar a los pequeños comerciantes. Es un producto comercializado mundialmente y a lo largo y a lo ancho del país han logrado desalentar a muchos comerciantes (…)", manifestó Orrego.

El directivo dijo que la persona que es fumador va a buscar su placer y si no lo encuentra en un comercio de proximidad, lo encuentra en la feria.

El trabajo encargado por los quiosqueros considera que se identifican dos marcas de cigarrillos de contrabando, que a su vez no se comercializan formalmente en el mercado local, estas son: ‘51’ y ‘Milenio’";.

También una encuesta elaborada en el año 2010 en Uruguay por la empresa  Synovate, una de las mayores firmas internacionales de estudios de mercado, reveló que uno de cada cuatro paquetes de cigarrillos que se consumen en todo el país tiene origen ilegal.

Los resultados revelaron que en Uruguay el contrabando de cigarrillos supera el 25% llegando a un 85,1% en los departamentos del norte del país.

Además, se estableció que la tercera marca más consumida en el mercado era "51" (de origen paraguayo, que ingresa ilegalmente al país), la cual representaba el 10% de las ventas. Sólo dos marcas legales uruguayas, Nevada y Coronado, la superaban en volumen de ventas y el precio de las marcas de contrabando es menos de un tercio de lo que se abona por la compra de marcas legales.

La comisión de salud del Senado recibirá el martes a los quiosqueros, que ven con preocupación que se les haya otorgado solo 15 minutos para exponer esta problemática que afecta a miles de familias.

En otros mercados donde se ha aplicado una medida similar, como Panamá, se produjo un aumento descontrolado del contrabando que alcanzó al 70% del mercado.

Además, considerando el bajo precio de los cigarrillos ilegales, los que fuman cigarrillos de contrabando fuman más y son más jóvenes y más pobres.