Paternain pasó por varios países de América Latina, observando y estudiando este debate sobre los menores infractores. El sociólogo considera que "estos debaten nos agobian en la doméstica, tenemos la idea de que vivimos en el peor de los mundos imaginables", y que es bueno saber qué ocurre en otros países sobre este tema y conocer otras formas de respuesta. 

Sobre la discusión de analizar el delito juvenil desde sus causas socioeconómicas, o buscar el control con las herramientas tradicionales, Paternain opina que en realidad el verdadero tema a discutir es la responsabilidad.
Por un lado la institucional, una responsabilidad múltiple que incluye al estado, los medios de comunicación, el sistema educativo y el aparato policial. "Muchas veces la ideal del combate al delito termina generando más niveles de violencia, y mayores niveles de violación de derechos, e impunidad." Considera que se requiere una reforma pronfuda en el ámbito instutucional, en la policia, en el sistema judicial, y en el sistema penitenciario, sea de menores o mayores.
Por otro, Paternain menciona otro nivel de responsabilidad que genera mucha influencia directa en el asunto: "las responsabilidades concretas de la gente abstracta". Es decir, las diversas acciones colectivas que no solo configuran un escenario de violencia, sino también la generan.