(emitido a las 7.47 hs.)

EMILIANO COTELO:
Siguen los coletazos del allanamiento que tuvo lugar el viernes en la casa del empresario Adémar González Pérez, en Carrasco, un coleccionista de armas que integra la Asociación Uruguaya de Coleccionistas de Armas y Municiones.

Ayer habló el coordinador de Inteligencia del Estado, José Bonilla, que advirtió que existe falta de controles a propósito de la tenencia de armas y opinó que sería oportuno inspeccionar a todos los coleccionistas de armamento del país.

Bonilla, que participó en ese allanamiento realizado el viernes, mostró su preocupación por este tipo de situaciones, recordó que las armas deben ser compradas en forma legal, que hay que registrarlas y que hay que cumplir con normas de seguridad, como por ejemplo separar armas de cerrojos y municiones.

Pero no es la única autoridad de Gobierno que ha hablado sobre el asunto, también conocimos comentarios del director general de Información e Inteligencia, José Colman, que aseguró que el individuo al que se le practicó este allanamiento en su casa no cumplía con la reglamentación vigente. Según explicó, la norma exige que las armas de colección deben estar inoperativas, les debe faltar una pieza que implica que esa arma no pueda ser disparada. Esa pieza debe estar en una habitación distinta de la habitación donde se encuentra el arma, y, en caso de que el propietario tenga municiones, también deben estar en otra habitación bajo seguridad. "Nada se cumplía en este caso", señaló el director de Inteligencia, quien remarcó que varias de estas armas estaban en condiciones de ser utilizadas al instante para cualquier tipo de fin.

También hay comentarios y repercusiones de otro tipo. Roberto Symonds, presidente de la Asociación Uruguaya de Coleccionistas de Armas y Municiones, y además uno de los mayores coleccionistas del país, critica el modo en que se procedió contra uno de los fundadores de esa institución.

Señor Roberto Simonds, ¿qué objeta usted en el procedimiento?

ROBERTO SYMONDS:
Este señor es uno de los fundadores de la Asociación, es muy conocido, es una persona de conducta intachable. Es coleccionista desde hace 50 años, prácticamente de toda la vida, desde que tuvo uso de razón ha coleccionado, en momentos aparte en que era mucho más fácil conseguir cosas. Como coleccionista que era y de acuerdo a las normas vigentes, estaba habilitado. Los coleccionistas debemos presentar una declaración jurada todos los años de lo que tenemos. Esto estaba claramente registrado en el Servicio de Material y Armamento, que es la autoridad legal encargada del registro de las personas, de los coleccionistas y de las colecciones. Es una persona totalmente conocida.

En particular no me pareció demasiado acertado este tipo de operativo de allanamiento que se hizo, a mi entender desmesurado. Se partió de una denuncia que se hizo en la mañana y sin más se procedió a un allanamiento importante, como si se tratara de un traficante de armas o de drogas o como si se tratara de un delito mayor, cosa que no vemos en operativos en los que realmente hay una razón.

Se hubiera hecho simplemente una llamada telefónica, se hubiera averiguado algo. Me parece bien que la jueza haya ordenado que se hiciera una inspección o que se viera al hombre, pero fue absolutamente desmedido. Y después de esto ha existido un circo mediático que a este hombre no le ha hecho ningún bien, ha sido muy perjudicado no solo en su salud, sino en su moral y económicamente.

ROMINA ANDRIOLI:
¿Qué tan frecuentes son las inspecciones en el caso de los coleccionistas de armas?

RS - Todos los coleccionistas estamos sujetos a inspecciones. Esto queda a criterio del Servicio de Material y Armamento. A algunos coleccionistas nos han inspeccionado varias veces, a otros no; en el país hay más de 1.600 personas registradas como coleccionistas, algunas pueden tener dos armas y otros tienen, como este hombre, cientos, hay de todo. Evidentemente no se puede inspeccionar a todos de un día para otro, es normal que se inspeccione, generalmente queda a criterio del Servicio, responde a veces por su propio conocimiento, a la sospecha de que se está armando algo o simplemente se hace por rutina. Eso queda a criterio de ellos.

RA - ¿No se requiere una intermediación judicial para hacer la inspección?

RS - No, si bien el Servicio está facultado para realizar una inspección de este tipo a los coleccionistas, normalmente, al menos en lo que yo conozco, se llama al coleccionista, se le dice "vamos a ir a hacerle una inspección". Generalmente se avisa, pero no es absolutamente necesario. Generalmente hay buena relación, dado que los coleccionistas estamos obligados a hacer una declaración jurada de la existencia de nuestras armas todos los años, ahí se dan de baja o se dan de alta las armas nuevas que van apareciendo año a año. Hay un registro muy claro al respecto.

Por otro lado, hoy por hoy el tener un arma no registrada no es un delito, es una falta. Esto es así porque es muy común en todo el país que la gente tenga en su casa un arma que era del padre, del abuelo, de repente tiene un revólver, y lo más probable es que esa arma en su momento no haya sido registrada, hay muchas armas en esas condiciones en todo el país. El Servicio de Material y Armamento ha adoptado una política que consiste en apuntar a que todas las armas estén registradas, que es lo ideal. Para eso se han dado plazos y facilidades.

De todas maneras, no es demasiado fácil y a mucha gente le resulta engorroso, porque tiene que sacar su certificado de buena conducta, tiene que hacer un examen psíquico, tiene que hacer una prueba de habilidad para usar el arma, para que la policía después le entregue el título de habilitación de tenencia de arma. El Servicio de Material y Armamento coordina con la policía en los pueblos del interior, avisa "en tal fecha vamos a estar ahí para que ustedes se presenten con las armas y se habiliten". Evidentemente a muchísima gente no le molesta, no tiene ganas, entonces hay armas que no se registran. Y tener un arma en esas condiciones hoy por hoy no es un delito, es una falta que se castiga eventualmente con una multa. Eso debe quedar bien claro.

Por otro lado, esta colección es realmente un museo. Está muy lejos de ser una cosa clandestina, las armas están expuestas en muebles, en vitrinas, en cajones forrados. Es un placer ver esa colección, se parece muchísimo a un museo. Es más, tiene armas que hoy son codiciadas a nivel mundial, que son muy escasas, muy valiosas y para nosotros es un orgullo tener en el Uruguay una colección de ese tipo.

EC - Tenemos comentarios de los oyentes con cuestionamientos.

Adrián de Malvín: "Una organización criminal que quiera armarse a guerra lo único que necesita es asaltar esa casa".

Victorio de Pocitos: "Pero este hombre también coleccionaba municiones y pólvora".

De eso también habló en estos días el secretario de la Presidencia, Homero Guerrero. Este remarcó que la persona investigada "solo tenía registradas 300 armas en un total de 1.000 de alto calibre".

Por su parte, el director general de Información e Inteligencia, José Colman, dijo que se hallaron rifles de asalto, pistolas de última generación y granadas de distinta procedencia. "No sabemos muy bien para qué", señaló. "También se hallaron 130.000 municiones y pólvora. ¿Un coleccionista necesita exhibir pólvora en cajas de madera? Son preguntas que el señor tiene que contestar a la justicia", indicó.

¿Qué dice sobre estos aspectos?

RS - Hablemos de las armas. Usted mencionó que todas las armas deben estar sin los cerrojos, y eso no es así. Lo que dice la reglamentación al respecto es que solo las armas automáticas deben estar con algún elemento que evite su uso y en forma separada. Me refiero ahí a subametralladoras, ametralladoras, fusiles de asalto automáticos, pistolas automáticas –ojo, no subautomáticas, automáticas, que son muy pocas–. Estas armas son las únicas que requieren estar desactivadas, con algún elemento que no permita su uso. Es importante aclararlo porque se han dicho cosas que no son reales. Usted puede tener un rifle, un fusil de la primera guerra o de la segunda guerra o lo que fuera y eso no necesita estar desactivado.

También se cuestionó por qué este hombre tenía granadas. Yo he dicho que las granadas estaban todas inertes, vacías, desactivadas, son piezas de colección porque fundamentalmente eran granadas de la Primera Guerra Mundial. Por lo tanto eso es tan peligroso como tener una lata de conserva en su despensa.

EC - ¿Y las 130.000 municiones y pólvora?

RS - Si bien tengo entendido que hoy por hoy este hombre no estaba recargando, sí tenía carné de recargador. Hay gente habilitada para hacer la recarga de balas. Mucha gente que utiliza, que tira, los tiradores, en este caso tiro práctico, tiro al blanco, a veces tira más de 1.000 tiros en un día. Por el costo, se recuperan las vainas y se recargan. ¿Quién está habilitado para recargar? Una persona que tiene que hacer un examen, que es bastante estricto, que implica estudiar, conocer de balística, de manejo, de todo este proceso; dado ese examen se otorga un carné de recargador. Eso habilita a tener todos los elementos en condiciones de seguridad, y para eso se hace una inspección previa y se autoriza un local de recarga. El local de recarga puede ser una habitación con determinadas condiciones, tiene que tener alfombra de goma, extinguidores, etcétera. Hay que aclarar -porque muchas veces se maneja información incorrecta- que este hombre, si bien tengo entendido que en este momento no estaba recargando, sí tenía carné de recargador desde hace algunos años.

EC - ¿Y en cuanto a las municiones?

RS - En las municiones no hay limitante, en la medida en que estén en condiciones de seguridad. Le decía que una persona que tira mucho, que hace tiro práctico, tiro al blanco, no es raro que consuma miles de municiones en el año. No sé si es este el caso. De todas maneras, no hay ninguna prohibición de tener municiones. Este hombre aparte tenía armas de todo tipo y calibres.

EC - Supongo que no hay prohibición, pero aquí estamos de nuevo ante los riesgos, ante la posibilidad de que quien quiera montar una organización criminal y eventualmente cometer atentados simplemente vaya, asalte esta casa y se vaya muy bien pertrechado.

RS - Por suerte para los coleccionistas, los registros del Servicio de Material y Armamento gozan de confidencial. La mayoría de la gente no sabía que yo soy coleccionista, se están enterando porque estoy haciendo esta nota y porque salí a declarar en la prensa. En general no nos interesa que se sepa, por razones obvias, y más en este país en el que cada vez tenemos más problemas de seguridad. La colección de este hombre era conocida por sus allegados, pero a raíz de este procedimiento, con todo este circo mediático que se armó atrás, discusiones, etcétera, este hombre hoy tiene absolutamente en riesgo toda su colección de armas, municiones y demás. Es más, se va a tener que mudar de casa y no sé adónde van a ir a dar. La forma en que se manejó tampoco es buena. Para nosotros la confidencialidad es importante, más hoy como están las cosas; hoy todos los delincuentes del país están enterados de que el señor este tenía armas y municiones.

Es claro que en toda esta colección puede haber irregularidades, no lo dudo, pero a muchísimas de estas armas que se dice que no tenían guía no les corresponde. Él tiene muchísimas armas "antiguas", y la ley dice que las armas anteriores a 1900 no requieren registro ni guía. Entonces cuando se habla del número de guías y el número de armas sin registrar, sería muy bueno aclarar cuáles son las armas que están en infracción, y hay que tener en cuenta que es muy probable que muchas de estas armas estén en proceso de regularización. Eso lleva su tiempo. Entonces generalizar y decir que el 70% de las armas no están registradas… habría que decir cuántas son realmente las que no están en proceso de registro y cuántas son aquellas a las que no les corresponde, que son muchísimas, me consta.

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Transcripción: María Lila Ltaif