Para Puente, uno de los cambios más importantes en la educación secundaria uruguaya fue la entrada de nuevos estudiantes. "Antes teníamos una educación abierta solo a ciertos alumnos, los que estaban en mejores condiciones y tenían una posibilidad segura de desempeñarse en la educación terciaria, en la universidad. A mi juicio, por suerte hoy estamos abiertos para todos los alumnos", dijo la directora. 

Sin embargo, reconoció que esta diversidad presenta un desafío a los profesores, especialmente a la hora de interactuar con estudiantes problemáticos. Para Puente, los docentes no solo tienen que "ser creativos a la hora de hacer una propuesta educativa" sino también tener paciencia para "seducir a los muchachos y enseñarles a tener un comportamiento esperado".

Nosotros conversamos con un representante de la Federación Nacional de Profesores de Enseñanza Secundaria (Fenapes) previo a la entrevista con Puente, y él dijo que desde el consejo "hay un doble discurso";, una postura de apertura y diálogo hacia fuera, pero "una postura casi autoritaria"; hacia dentro. Por ejemplo, hay denuncias de acosos laborales desde la inspección hacia la dirección de los centros. Según este representante, se da "un desembarco de seis, siete u ocho inspectores en la misma semana, en un mismo centro";, y eso actuaba como una especie de presión, de vigilancia.

Le preguntamos a la directora si esto era así y ella consideró que ya desde las palabras usadas se marca al inspector como un mero controlador. "Desde nuestra mirada", precisó Puente, "el inspector es un acompañante, un orientador, es un profesor". "La palabra ‘desembarco’ sugiera una postura colonizadora"; afirmó, y aseguró que ese no era el caso con los inspectores. Ante la pregunta de si es normal que esa cantidad de inspectores vayan la misma semana al mismo centro educativo, la directora dijo que "es deseable".

Al final de la nota le hicimos esta pregunta: "¿No a la baja o sí a la baja?";. Ella nos contestó lo siguiente: "No a la baja, porque sería retroceder muchas décadas en términos de desempeño social. Porque no es encerrando más tempranamente a los jóvenes que vamos a lograr que restauren su condición humana y que respeten a los otros como humanos. Porque es con educación con lo que tenemos que responder y no con el encierro, con la exclusión social. Tenemos que trabajar para todos, y para aquellos que están en peores condiciones, lograr que se inserten socialmente con el acompañamiento de los adultos y no desde una cárcel".